Hay series cuya
lectura tiene un momento y un lugar, y series que hacen historia hasta tal
punto que no importa cuando se lean, son historia viva del cómic. Hacía ya
algún tiempo buscando leer una de las series que ha trascendido al estatus de “mito”
entre los aficionados al cómic, The Authority,
junto con The Planetary, quizá la
serie más importante del sello Wildstorm.
Ya hemos hablado
alguna vez de Wildstorm, el estudio creado por Jim Lee tras independizarse de
Marvel, y cuya colección estrella fue Stormwatch,
creación del propio Jim Lee, como un equipo de héroes que tenía que enfrentarse
a los Daemonitas, y que estaba lleno de personajes calcados de la Patrulla-X,
como casi todo Image, sello al que se había vinculado Wildstorm. Con el paso
del tiempo, uno de los “niños rebeldes” del mundo del cómic, Warren Ellis,
llegaría a Stormwatch, cambiando la faz del grupo hasta tal punto que hubo que
cambiar el título de la serie y sus objetivos. Stormwatch se habían hecho
mayores, y se convertirían en The
Authority. Junto con Ellis, estaría el dibujante Bryan Hitch, especialista
en splash pages espectaculares que ya se había alejado de sus orígenes como “plagiador”
de Alan Davis, y juntos, el tándem Ellis-Hitch convertirían The Authority en la colección referencia
de los cómics adultos de superhéroes. Con un equipo formado por Jenny Sparks
(el espíritu del siglo XX), Jack Hawksmoor (el dios de las ciudades), Swift (un
avatar alado de la paz con mucho espíritu guerrero), Apollo (una deidad solar,
el equivalente de Superman en este mundo), Midnighter (pareja del anterior,
equivalente a Batman y el mejor luchador del mundo), el Doctor (el chamán
universal de la Tierra) y Engineer (la nueva versión de un héroe de Stormwatch,
una doctora con “ocho pintas de nanotecnología por sangre), en su etapa con
Ellis y Hitch al frente, veríamos a estos héroes enfrentarse, a través de
grandes viñetas de narración panorámica, a uno de los viejos enemigos de
Stormwatch, un terrorista internacional; a una invasión procedente de una
Tierra Alternativa; y a la enajenada versión de Ellis del propio Dios, en una
serie de doce números sin un respiro y llenos de acción, que concluían con la
muerte de Jenny Sparks (finalizado el siglo XX, llegaba el momento del cambio,
la joven Jenny Quantum, que se convertiría en la hija adoptada de Apollo y
Midnighter), y la salida de Ellis y Hitch de la serie.
Tras una serie de
números de relleno en los que Jenny Sparks se encontraba con cada uno de los
miembros de The Authority, comenzaba
una segunda etapa dentro de este primer volumen de la serie, esta vez en manos
de un autor aún más gamberro que Ellis, Mark Millar, y del feista Frank
Quitely, que continuarían con el estilo de Ellis y Hitch, adaptándolo a sus
propias ideas sobre el cómic. Con ellos, The
Authority se convirtieron en personajes mucho más irreverentes, mucho más
violentos, y que empezaron a inquietar a DC, que había adquirido el sello
Wildstorm años antes. La violencia y el sexo de The Authority hicieron que
finalmente considerara la salida de Millar de la franquicia, tras censurar
varios de sus números, lo que hizo que
el escocés se marchara de DC para (de momento) no volver, ni tener intención de
hacerlo.
¿Qué supone leer
Authority a día de hoy? Pues ver que, efectivamente en su momento, debió ser un
cómic completamente innovador, pero que a día de hoy, el espíritu oscuro se ha
extendido tanto por el mundo de los superhéroes que resulta mucho menos
impactante. Una lectura que me ha gustado… pero que me ha hecho arrepentirme de
no haberla leído en su momento, mucho antes.
ResponderEliminarLa verdad es que cuando lo lei, apenas era un adolescente y flipé bastante.
Macarra y rompedora... pero sólo en su momento como bien dices.