domingo, 27 de septiembre de 2015

TRILOGÍA DE CORMYR 1: CORMYR

Jugar a Rol es adictivo, y genera bandazos en las lecturas y hábitos de los jugadores. O al menos, a mi me pasa. Tu tienes tu "agenda literaria" más o menos organizada, con los libros que quieres leer, lo que toca, y tal... y de pronto, empiezas a preparar una crónica para Dungeons and Dragons, y claro... Te acuerdas de los Reinos Olvidados, de la Dragonlance, de Ravenloft... Y si bien es cierto que en algún momento del pasado, dejé un poco de lado todos estos libros quizá por lo reiterativo de los temas, si es cierto que a pesar de haber leído muchísimo sobre Dragonlance, tenía un poco más verdes los Reinos Olvidados. Y bueno, pues con todo esto, estuve buscando algún listado con un orden más o menos coherente para leer cosas de Reinos, encontré un orden "cronológico", y el primero en saltar a la palestra, ha sido el primer volumen de la Trilogía de Cormyr, que lleva por título, precisamente, el nombre del más aventurero de los reinos de Reinos Olvidados, Cormyr. 



Cormyr, de Jeff Grubb y Ed Greenwood (el creador de los Reinos Olvidados), es una novela que se mueve entre dos tiempos distintos, de ahí que ocupe el primer lugar en cuanto al orden cronológico de lectura. Los capítulos van alternando historias que ocurren en el presente de los reinos, con una serie de episodios que van dando detalles sobre la historia de Cormyr desde su pasado más remoto. A través de las narraciones de Grubb y Greenwood, vamos de los tiempos en los que el reino del bosque, lo que luego se llamaría Cormyr, era el dominio de un viejo dragón negro cuyas escamas desteñidas por la edad habían variado casi hacia el Púrpura (lo que se convertiría luego en el escudo de Cormyr), para luego hablarnos de los tiempo de los Elfos y la plenitud de Cormanthyr y Myth Drannor, la llegada de los primeros Obarskyr y la fundación de Suzail y el reino de Cormyr, con el establecimiento de esta familia como reyes legítimos y hereditarios de la corona real. 

Los relatos del pasado, que incluyen guerras civiles, enfrentamientos con los reinos limítrofes, etc... tienen como hilo conductor la presencia de los magos de la Corte de Cormyr, desde el primero de ellos, Baureable, el aliado de los Elfos, y sus sucesores, Amendahast, Thorunhast y Jorumhast, hasta el actual, el mago de la corte del Rey Azoun V, y protagonista de la parte "contemporánea" de la novela, Vangerdahast. Y es que toda la historia del pasado (son pinceladas que pasan cientos de años de una a otra) están insertadas en la trama que se desarrolla durante el presente de los Reinos Olvidados. 

En tiempo pasado, hace milenios, el profeta Alaundo había predicho una serie de desgracias para Cormyr, y parece que esas profecías se van a hacer realidad en este tiempo. El Rey Azoun gobierna Cormyr como legítimo rey de los Obarskyr, la familia reinante, pero no tiene herederos varones, sólo dos hijas, que no parecen estar interesadas en el gobierno: Talanasta, de carácter más débil y con mentalidad de burócrata, y Alusair, toda una aventurera sin intención ninguna de aceptar las responsabilidades del reino. La debilidad de la dinastía Obarskyr sale a la luz cuando Azoun y varios de sus compañeros son atacados durante una cacería por una criatura mágica que mata a algunos de los aliados más cercanos del rey, y deja en coma a Azoun. Mientras el rey se debate entre la vida y la muerte, el reino comienza a descomponerse, con diversas facciones preparándose para tomar el poder en el caso de que Azoun fallezca, polarizándose en la princesa Talanasta y su prometido, y el mago de la corte, Vangerdahast, elegido por el rey y su esposa para la regencia. Nobles descontentos, magos guerreros, los Dragones Púrpura, poderosas familias, hechiceros rojos de Thay, familias rivales, clérigos ambiciosos... Numerosas posturas van haciendo su aparición, mientras Cormyr se deshace por las costuras, y muy pocos personajes parecen trabajar realmente en defensa del reino... Mientras la actitud veleidosa de Vangerdahast amenaza con hacerlo saltar todo por los aires.

Cormyr curiosamente aparece en los Reinos Olvidados como una especie de versión más fantástica de Juego de Tronos, con numerosas tramas politicas, golpes y contragolpes dados en los salones de palacio de Suzail, alianzas que se hacen y se deshacen a toda velocidad... Pero al estilo de los Reinos, con mucha más magia, personajes menos definidos y tramas mucho más sencillas, lo que lo hacen una lectura mucho menos compleja, para bien y para mal. Además, curiosamente, como en otros libros de Reinos (me vienen a la memoria las trilogías de Maztica o de las Moonshaes), el primer volumen es relativamente independiente, y casi autoconclusivo, Asi que, creo que ha sido una buena elección para volver a los Reinos, aunque sea de forma eventual... 




No hay comentarios:

Publicar un comentario