THE EXPANSE 4: LA QUEMA DE CÍBOLA

 

La quema de Cíbola by James S.A. Corey
My rating: 5 of 5 stars

Ma.
Dre.
Mía.

Pues no sé por donde van a ir los tiros, pero esto mejora con cada novela, la verdad, así que a este paso me voy a quedar sin estrellas para los siguientes. Hasta ahora, en las aventuras anteriores de James Holden y los tripulantes de la Rocinante, habíamos sido testigos de como la aparición de la Protomolécula alienígena había puesto en jaque todo el orden existente entre las tensas relaciones entre la Tierra, Marte y los llamados Planetas Exteriores. Los experimentos de Protogen, las manipulaciones de Mao-Kwikowsky, la aparición del portal más allá de la órbita de Urano y la apertura de cientos (quizá miles) de nuevos mundos, todo ello debido a la Protomolécula habían conducido a la posibilidad de que la humanidad comience la expansión más grande que se ha conocido nunca, y llevados por la necesidad de un nuevo hogar, un grupo de habitantes de la destruida colonia de Ceres, han conseguido burlar la vigilancia de la APE (establecida ahora en el espacio entre los anillos con la Nauvoo/Bégimo ahora convertida en Estación Medina) y se han establecido en uno de estos nuevos planetas, al que llaman Ilo. Pero al mismo tiempo, la ONU ha entregado los derechos de este nuevo planeta a una empresa de gestión, que ha enviado un grupo de científicos para evaluar ese nuevo mundo. Unos y otros van a entrar en conflicto de inmediato, y se establecen desde el principio las tensiones entre esas formas de pensar. ¿Da la ocupación derecho a la posesión? ¿Qué derecho tiene la Tierra a gestionar los nuevos mundos descubiertos? Y con esta situación, Holden, Amos, Álex y Naomi son enviados a Ilo/Nueva Terra para mediar entre los científicos y los okupas... Pero Ilo es mucho más de lo que parece, y los problemas políticos entre unos y otros pronto van a convertirse en la menor de las preocupaciones de todos.

Los autores que se encuentran tras el pseudónimo de James S.A Corey convierten así La quema de Cíbola en una historia llena de sobresaltos, casi en una película de catástrofes en la que si algo puede salir mal, sin duda lo hará. Y tiene sentido, ojo. Si la época de las exploraciones en la Tierra supuso choques culturales, biológicos y de todo tipo, aquí hablamos de un planeta fuera del Sistema Solar, con un ecosistema (por decirlo de alguna manera) completamente diferente a todo lo que la humanidad puede haber visto. Lunas que son armas, bacterias que viven en las nubes y causan ceguera, tsunamis, estallidos volcánicos... Y detrás de todo esto, la Protomolécula. O quien estuvo detrás de ella... o quien destruyó a los creadores de la Protomolécula. De los libros anteriores, solo mantenemos el punto de vista de Holden, aunque se incorporan dos de personajes que ya conocíamos de forma eventual: Basia, el amigo de Prax en La Guerra de Calibán, es uno de los colonos que llega a Ilo procedente de Ceres; y Havelock, el compañero de Miller en StarHelix en El Despertar de Leviatán, forma parte del equipo de la corporación que quiere estudiar Nueva Terra. El cuarto punto de vista lo da Elvie Okoye, una doctora que forma parte de la expedición de investigación y que nos dará la parte científica de la novela.

Y en fin, es un libro muy divertido, emocionante... Me está gustando mucho The Expanse, la verdad...

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