domingo, 26 de agosto de 2012

BATGIRL 1


                De las colecciones que han ido saliendo con las Nuevas 52 de DC, había una que me daba especial pereza. Se trata de Batgirl, cuyo primer tomo toca comentar hoy. Y es que la base desde la que partía la serie me parecía la menos interesante de todas. Supongo que se debe a no hace años suficientes que estoy metido en esto de los cómics como para tener cierta referencia afectiva hacia el personaje de Bárbara Gordon como Batgirl. Por supuesto que he leído La Broma Asesina, obra que me parece fascinante; pero para mí, Bárbara Gordon es Oráculo. Con su silla de ruedas, su imagen virtual, dirigiendo a las Aves de Presa, colaborando con la Liga de la Justicia, derribando Internet para evitar el contagio de la Antivida… En fin, que esa era la Bárbara Gordon que a mí me gustaba.



                Y precisamente, la Batgirl del nuDC parte de unos preceptos absolutamente contrarios a esto. Lo único que sabía de la colección era que Bárbara Gordon volvía a ser Batgirl, probablemente nunca había sido Oráculo y volvía a caminar. Ups. ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? No lo veía, la verdad. Pero ya sabéis, la curiosidad mató al gato, y el otro día en una tarde friki, me llevé el tomito de ECC que tenía Oneyros para echarle un ojo. Y me he llevado una sorpresa de lo más interesante. De no tener ningún interés en la serie, creo que ha sido de las más entretenidas que he leído.  Y es que Gail Simone se lo curra, la verdad.
                Evidentemente todo lo que se había leído sobre la serie era cierto. Bárbara vuelve a ser Batgirl, no se sabe todavía si Casandra Caine y Stephanie Brown han tenido esa identidad, y todo apunta a que Bárbara nunca ha sido Oráculo. Y desde un año antes de la serie, anda. Pero lo interesante es que no sabemos como, y Gail Simone consigue que este sea uno de los trasfondos más interesantes de la serie, y que parece que va a tener mucha miga. Mucha. Para esta primera trama, Gail Simone ha creado un personaje nuevo, un villano muy interesante, Espejo, con una obsesión de lo más particular: deshacer los milagros. Dicho así, parece un poco raro, pero leído la verdad es que queda bastante bien. Espejo sirve de excusa para que Simone nos presente a la nueva (o vieja) Batgirl, con su entorno, y hace incluso un cameo para Nightwing, para aclarar también cual es la relación de Bárbara con el resto de la Batfamilia. Además, en positivo, en este primer tomo se cierra por completo el primer arco, al contrario que en el resto de los tomos que ECC ha publicado con las Nuevas 52, donde en la mayor parte de los casos nos hemos quedado un poco con la miel en los labios.



                El tomo de Batgirl lo redondea el dibujo de un genial Ardian Syaf, que ya había demostrado sus habilidades en El Día Más Brillante, y que realmente, consigue en estos primeros cuatro números de Batgirl un trabajo realmente admirable, con una Batgirl espectacular que se mueve por los tejados de Gotham como pez en el agua.
                En fin, muy recomendable.

viernes, 17 de agosto de 2012

CERRADO POR VACACIONES

Bueno, pues como el letrero de ahí arriba indica, por fin el dueño de este cortijo, o sea, yo, se va a tomar unas merecidas vacaciones, y por un par de semanas, de despido del mundanal ruido... y dejo el cortijo cerrado.

No os preocupéis, fieles seguidores, que esto es temporal, y para Septiembre, volveremos con energías renovadas y síndrome postvacacional. Hablaremos de Animal Man, de Alpha Flight, de Batgirl... y de muchas cosas más.

¡¡¡Nos vemos en un par de semanas!!!

jueves, 16 de agosto de 2012

THOR: VIAJE AL MISTERIO

                El final de Asedio supuso un relanzamiento para la serie de Thor, apoyado sobre todo por la aparición de la película protagonizada por Chris Helmsworth y dirigida por Kenneth Brannagh en los cines. Obviamente, se pretendía que la película sirviera de impulso a los cómics y viceversa, y las mentes pensantes de la Casa de las Ideas decidieron que la mejor forma de hacer esto era arrancar con una nueva colección desde el número 1. Así, haría su aparición The Mighty Thor 1, con guiones de uno de los más cotizados guionistas de Marvel a día de hoy, Matt Fraction, y los espectaculares lápices del español Pascual Ferry. Pero, ¿qué hacer con la cabecera de la que ya había disfrutado el Dios del Trueno y que había alcanzado no hacía demasiado tiempo los 600 números?


                Esa cabecera se convirtió en Journey Into Mistery, manteniendo la numeración original a pesar del cambio de nombre, con lo que ha enganchado directamente con la colección en la que viera la luz por primera vez Thor en el mundo Marvel, y que fuera su homónima. Aquí en España, Panini ha reunido en un solo tomo los diez primeros números de la colección (nueve de la primera saga y un point one), el que hoy nos ocupa. Lo cierto es que las críticas llegadas de allende los mares han aportado un cierto hype a la colección, ya que a alguna lumbrera se le ha ocurrido compararla con el propio Sandman  de Neil Gaiman, colección que ha trascendido del mundo para convertirse en una leyenda, en un mito dentro del mundo del cómic. Así que, lo primero, hay que tratar de ser realistas: aunque este Viaje al Misterio es francamente bueno, está muy lejos de Sandman, al menos de momento. Que tampoco es posible comparar diez números con la novela gráfica en 75 entregas que fue la obra magna de Gaiman.


                Y realmente, lo cierto es que Marvel arriesgó poco con el equipo creativo de la colección. El guionista británico Kieron Gillen ha estado realizando trabajos “secundarios” en Marvel, y ha saltado ahora a la palestra al ocuparse en solitario de La Imposible Patrulla-X, una de las colecciones de mutantes resultantes del Cisma. Y ya anteriormente, había guionizado algún número “de relleno” entre las etapas de Straczinsky y Fraction en Thor, con bastante buen resultado, la verdad. El dibujante elegido para acompañarle fue Doug Braithwaite, que se diera a conocer trabajando con Alex Ross y Jim Krueger en los proyectos Universo-X y Justicia, y que, al igual que Gillen, ya había realizado algún número para Thor, donde su estilo, fantástico y casi medievalista, encajaba bastante bien con las historias de los dioses de Asgard. Como veis, el tándem Gillen-Braithwaite no supone nada rompedor, y ambos habían tenido un éxito relativo en sus apariciones anteriores.
                Pero desde luego, Gillen y Braithwaite han hecho un trabajo más que importante. No me atrevería a decir (ni mucho menos) que pasará a la historia, pero desde luego que es de lo mejorcito que ha pasado por mis manos últimamente. Y es que han sabido elegir muy buenos juguetes con los que jugar. Con Thor como protagonista (obviamente) de la colección a su nombre, había que encontrar unos protagonistas adecuados para esta nueva saga. Y el elegido para encabezar el reparto ha sido ni más ni menos que en nuevo Loki, el niño en el que ha vuelto el espíritu del Dios del Engaño, caído en Asedio. Y Gillen demuestra que sabe manejar a este personaje con gran habilidad, y reconozcámoslo, hacer creíble la actual situación de Loki, no es fácil.


                Esta primera saga de Viaje al Misterio se enclava dentro de los acontecimientos de Miedo Encarnado (no podía ser de otra manera, ya que el peso de la saga estaba en un dios asgardiano), y nos muestra como Loki se ha movido en segundo plano y a su estilo para reunir un grupo de pintorescos aliados (entre los que destacan las Disir, que fueran creaciones de Gillen, las primeras valquirias) y retorcidas estrategias con las que refuerza la lucha de Thor contra la Serpiente. Y lo hace con un estilo narrativo completamente literario, y es quizá en esto en lo que sí que recuerda de cierta forma a Sandman, en el estilo que Gillen ha utilizado para contar su historia, para presentar sus tramas, sus trasfondos, sus personajes… Y llevarnos a un punto donde el guionista se atreve incluso a hacer algo de metaliteratura, con una imaginativa resolución de los dilemas de Loki y de la espada del propio Surtur.
                Un tomo muy a tener en cuenta, una lectura que merece la pena.

miércoles, 15 de agosto de 2012

MÓNICA NARANJO: INMENSIDAD

Para este Miércoles Musical os dejo un tema de la gran "diva" de la música en España, la inconmensurable Mónica Naranjo, en un vídeo sacado de su gira Adagio, donde compartía escenario con diversas orquestas filarmónicas. El tema es "Inmensidad", de su tercer álbum, Minage, que fuera un tributo genial a la cantante italiana Mina.

Absolutamente sobrecogedor. ¡Que lo disfrutéis!

martes, 14 de agosto de 2012

X-MEN: LA AMENAZA DE LOS COSECHADORES


                Inferno había sido, obviamente, un gran proyecto, y si normalmente tras cada gran evento, Claremont decidió dedicar parte de su tiempo y su trabajo a los números dedicados al equipo, a los personajes, que tanto marcaron la historia de la Patrulla-X y el hacer de este guionista a los mandos del equipo. Los números de partidos de baseball, de compras, de bar… Y tras una saga de la extensión y el peso de Inferno, Claremont decidió dedicar dos números a que sus personajes pudieran desarrollar aquellas facetas que no se veían tanto en misiones o en combate. Así, en los números de X-Men que siguieron a Inferno, Claremont dividió al equipo según la vieja idea de “Chicas por un lado y chicos por otro”, y mientras en el X-Men 244, las chicas se iban de compras y de fiesta a una zona comercial, en el 245, los chicos se iban de bares. Por supuesto, no todo sería tan fácil como parecía al principio, y Mariposa, Tormenta, Pícara y Dazzler terminaron haciendo frente a remanentes de tecnología “demonizada” en manos del Equipo M (un grupo de investigadores que habían sufrido un destino incierto en Inferno); Coloso, Lobezno, Kaos y Longshot se encontraban haciendo frente a una invasión extraterrestre… que satirizaba uno de los grandes eventos de DC: INVASION! Como puntos a destacar, en “Noche de Damas”, Claremont y Silvestri presentan por primera vez al que se convertiría en uno de los personajes protagonistas de muchos momentos célebres, Júbilo, a quien Pórtico permitiría seguir a las chicas hasta el complejo australiano de la Patrulla. Y el número de “¡Hombres!” destaca por estar dibujado por el polémico Rob Liefeld (sí, por el mismísimo ROB!), y porque en la reunión de razas extraterrestres que planean invadirnos, podemos ver a un montón de invitados especiales: Darth Vader, Alf, Jabba el-Hutt, Bobba Fett, E.T, Yoda…



                Tras su participación en Inferno y un breve descanso, la Patrulla se vio metida de forma tangencial en la saga veraniega de 1989, ¡Atlantis Ataca!, en su Annual 13, con guion de Terry Austin y dibujo de Mike Vosburg, una historia un poco deleznable, que contaba además con un complemento sobre Júbilo de manos de Sally Pashkow y Jim Fern. Y tras estas historias, Claremont se lanzaría muy en serio con la que sería una de sus “no sagas” más particulares: la destrucción de la Patrulla-X. Así, literal, como suena. Tras haberles hecho morir a ojos del mundo en La Caída de los Mutantes, Claremont parecía dispuesto a deshacerse de todos y cada uno de los miembros de su alineación. Uno por uno, los miembros de la Patrulla irían “sufriendo” las atenciones del patriarca mutante. La amenaza de los Cosechadores, a los que la Patrulla había expulsado de su refugio australiano, ahora dirigidos por el viejo Rey Blanco, Donald Pierce, y con Dama Mortal y sus seguidores (Reese, Cole y Macon) como nuevos efectivos, comenzaría a cernirse en el horizonte, y las visiones de Mariposa Mental cada vez lo dejarían más claro. Si la Patrulla se enfrentaba a los Cosechadores, morirían.



                Pícara sería la primera en salir del punto de mira. La Patrulla (con Lobezno fuera) tendría que hacer frente a la fusión entre Nimrod y el Centinela Molde Maestro en una batalla sin parangón en las calles de Manhattan, batalla en la que moriría la prometida del propio Senador Kelly, y en la que, para acabar con la amalgama asesina, Pícara/Carol Danvers, la arrastraría hasta el Portal Peligroso que Roma les había entregado. Longshot sería el siguiente en marcharse, sumido en dudas sobre su integridad y su alma tras lo ocurrido en Inferno, pero el gran golpe para la Patrulla llegaría de manos de un enemigo un tanto absurdo: Nanny, y su seguidor, Creahuérfanos. Los dos peculiares personajes atacarían a la Patrulla-X, consiguiendo dominar y rejuvenecer a Mariposa, Kaos y Dazzler… La intervención de Júbilo (cuya presencia sigue siendo un misterio para los X-Men), Coloso y Tormenta liberará a sus compañeros, y pondrán en fuga a Nanny y Creahuérfanos, con Tormenta persiguiéndoles… Turbado por la situación y las drogas de Nanny, Kaos dispara para derribar a Nanny, alcanzando la nave… y encontrando a Tormenta muerta entre los restos de la nave. Así, de pronto, la Patrulla se encontraba sin sus dos “almas”. Lobezno, ocupado en su propia serie, y Tormenta. De la formación del Giant-Size 1, sólo Coloso continuaba en el grupo. Y además de todo lo que esto significaba a nivel de guion y de historia, a largo plazo sería incluso más relevante para la propia historia del cómic que el número 248 de X-Men, con la muerte de Tormenta y el abandono de Longshot, sería dibujado por un recién llegado, Jim Lee, a quien se daba así una oportunidad para ver cómo funcionaba. Las repercusiones de la llegada de Jim Lee las veremos más adelante y con profundidad…
                Pero las desgracias no habían acabado para la Patrulla. Una misteriosa llamada procedente del Sur de Chile (y cuya autora es ni más ni menos que Lorna Dane, que parece haberse librado de Malicia), lleva a la Patrulla-X a un nuevo viaje a la Tierra Salvaje, donde se enfrentan a Zaladane, la antigua sacerdotisa de Garokk y ayudante del Alto Evolucionador, que aliada con Niñolisto y los Mutados de la Tierra Salvaje, que absorbe los poderes de Polaris, planeando amenazar al mundo con ellos, y revelando que es hermana de Lorna Dane. La Patrulla vencerá se deshará de Zala y sus seguidores, liberando también a Ka-Zar y su gente, pero las visiones de Mariposa continúan… si vuelven a Australia, morirán en manos de los Cosechadores.



                Y así es como Claremont pone punto final a la última parte de su proceso de deconstrucción de la Patrulla. Y lo hace acudiendo a una narrativa en retrospectiva, porque nos encontramos a Lobezno prisionero de los Cosechadores, y no hay rastro de los X-Men. A partir de las visiones de Lobezno, cruelmente torturado por Donald Pierce, descubriremos que, por miedo a los Cosechadores, Mariposa Mental convenció a Dazzler, Kaos y Coloso para que cruzaran el Lugar Peligroso, atravesándolo luego ella misma, dejando a los Cosechadores con dos palmos de narices. Eso suponía nuevas vidas para ellos si superaban el juicio del Lugar Peligroso, tal y como Roma les había ofrecido… pero dejaba a Lobezno en una tesitura de lo más incómoda.
                Y sólo con el inverosímil apoyo de Júbilo…          

lunes, 13 de agosto de 2012

UNA RETROSPECTIVA: DAREDEVIL DE MILLER.


                Bueno, hoy toca echar un vistazo atrás, hacia un personaje que no es habitual del Iconocronos. Y es que en las últimas semanas, por culpa de (o gracias a) Oneyros, he estado leyendo el Daredevil de Frank Miller, cubriendo así uno de los muchos huecos de mi formación comiquera, y el resultado final merece un post en estos, mis dominios.



                Bueno, ya he dicho varias veces en diferentes posts que tengo problemas con los cómics “antiguos”. Mi coleccionismo es hijo de los primeros noventa, mi crianza ha sido con Jim Lee, Liefeld (sí, así como suena), Peter David y Stroman, las sagas de Thanos, los Hijos de la Medianoche… Y hay muchas “obras de culto” anteriores a este momento que no encajo del todo bien (bueno, salvo en la Patrulla-X, obviamente). Por ejemplo, un mito como La Guerra Kree-Skrull, me pareció aburridísima. Así que cuando Oneyros me insistió en que leyera el Daredevil de Miller, lo hice con esa mezcla de interés y “verás como no me gusta” que suelo tener en estas ocasiones.
                Los primeros resultados fueron positivos, y sorprendentes, porque resulta que la llegada de Miller a los lápices de Daredevil coincidió con una aventura con la Viuda Negra y los Anihombres que en algún momento había pasado por mis manos cuando era un crío, así que encima la cosa se cargó de cierto sentimentalismo. Pronto, Miller se hizo cargo de los guiones, y terminaría dejando los lápices para dedicarse solo a la narración… y la serie ganó varios enteros. Y es que Miller como guionista es un puñetero crack, pero como dibujante, no es nada del otro mundo. La primera época de Miller en Daredevil estuvo marcada por la aparición de su personaje fetiche en Marvel, Elektra, el encumbramiento de Kingpin como máximo enemigo del Diablo Guardián, cambiando de la órbita de Spiderman a la de Daredevil; la transformación de Bullseye de un enemigo más a un personaje absolutamente emblemático y letal… ¿Corresponde el estatus de “mito” de esta historia con mi percepción?



                Sí. La verdad es que sí. La historia es trepidante. Los personajes, geniales. La trama, una joya. Genial, de verdad. Luego Miller dejó la serie (tenía que revolucionar DC también, después de lo que había hecho en Daredevil, era obvio que tenía un hueco en Batman), y esta… bueno, Dennis O´Neill, David Mazzuchelli y otros guionistas y dibujantes hicieron un trabajo bastante irregular. La estructura de “río” narrativo de Miller se perdió en favor de episodios autoconclusivos, algunos bastante nefastos y poniendo a Matt Murdock en situaciones más pintorescas que interesantes.
                Miller tenía que volver. El Diablo Guardián merecía volver a lo más alto. Y a lo más bajo. Y lo hizo en una novela gráfica, Amor y Guerra, que serviría de prólogo a la que probablemente sea la más aclamada etapa de la historia de Daredevil: Born Again. En Amor y Guerra, Miller hace tándem con Bill Sienkiewicz. Y Amor y Guerra es una OBRA DE ARTE. Pero así, en todos los sentidos. Supongo que mi relación con Sienki también es peculiar, y ha mejorado con los años. De crío leí cosas, como alguno de sus números de Nuevos Mutantes, y me parecía… raro. Quizá desconcertante sea la palabra. No creo que sea un dibujante con un dibujo que un niño pueda apreciar. Con el paso de los años he releído obras suyas, he “descubierto” a Bill Sienkiewicz. Y asumiendo que es uno de los más grandes dibujantes de la historia del cómic, Amor y Guerra es uno de sus mejores trabajos. Cada página, cada viñeta, cada detalle, es digno de admiración y estudio. Y por supuesto, la trama que Miller desarrolla para que Sienki la plasme en viñetas, es absolutamente perfecta. Víctor, el adversario de Daredevil en esta ocasión, es un auténtico psicópata perfectamente plasmado, Kingpin es… bueno, indescriptible. La araña monstruosa en el centro de una historia que envuelve como una telaraña a personajes y lectores.
                Born Again llega justo después y es considerada por muchos la mejor trama de Daredevil. A mi me ha gustado mucho más Amor y Guerra. Pero el “Nacido de Nuevo”, el regreso oficial de Miller a la cole regular de Daredevil, con lápices de un espléndido Mazzuchelli (al que muchos dibujantes posteriores de esta colección han seguido incluso en épocas recientes, y del que podemos ver influencias en Michael Lark, David Aja y otros). Para Born Again, Miller destruye todo lo que Daredevil y Matt Murdock significan. Karen Page, la antigua novia de Murdock, revela que este es Daredevil, Kingpin lo averigua… y como un gato con un ratón herido, el señor del crimen comienza a jugar, destruyendo todo lo que rodea a Daredevil, arrojándole a una espiral de perdición que sólo acaba cuando toca fondo, y Matt no tiene más remedio que tomar el único camino que le queda. Hacia arriba.



                Matt Murdock, Glorianna O´Brenn, Foggy, Kingpin, Ben Urich… todos se convierten en piezas de un historia excelente, la bajada al infierno y ascenso de Daredevil, quizá con un final un poco metido con calzador, pero que en su desarrollo, es absolutamente adictiva.
                Así que, si alguno queda por ahí sin leerla, que lo haga. Y si me tengo que quedar con un momento de toda esta historia, de toda esta trama… Mucha atención a la conversación entre Daredevil y Bullseye que tiene lugar en el último número de la primera etapa de Miller. Es absolutamente acojonante.
                Acojonante, de verdad.

viernes, 10 de agosto de 2012

LIGA DE LA JUSTICIA INTERNACIONAL 1


                Si echamos la vista atrás, podremos ver todos que en los años 80 se vivió un proceso de maduración del cómic innegable. Cualquier vestigio de infantilidad había quedado atrás con la Crisis en Tierras Infinitas, y la llegada de la famosa oleada británica movió el cómic cada vez hacia lugares más oscuros. Es la época del Caballero Oscuro y el Born Again de Frank Miller; del American Gothic y el Watchmen de Alan Moore; del Sandman de Neil Gaiman…  La Patrulla-X dejó de ser un grupo de superhéroes más para convertirse en proscritos, los Morlocks cayeron como insectos… Todo era sombrío, como si el mundo de la novela negra hubiera llegado al cómic a lo bestia.



                Y en esta mar de sombras, DC decidió darle la vuelta a la tortilla, y tras sacrificar a la que debiera ser un serie enseña, la Liga de la Justicia, en una maniobra editorial que estuvo dentro de la saga Legends (de John Ostrander y John Byrne), dejó el concepto de Liga de la Justicia de América (convertido en Liga de la Justicia Internacional) en manos de dos escritores gamberros como pocos y un dibujante apropiado para la que iba a ser la forma de narrativa más divertida de la historia del cómic. Keith Giffen, J.M DeMatteis y Kevin Maguire ponían en las librerías el número 1 de su JLI en 1987, una Liga de la Justicia que recurría a personajes más o menos secundarios salvo excepciones como Batman y J´onn J´onnz y que además de contarnos pintorescas historias de invasiones extraterrestres, luchas contra villanos clásicos y nuevos, una mudanza… se centró en las relaciones entre los miembros del grupo para llegar a los lectores. Y lo hicieron a carcajada limpia.
                Tras unas decenas de números y con la llegada de los 90, el concepto pareció caer en el olvido, la Liga de la Justicia volvió a un concepto más clásico del heroísmo, y se adaptaron al tono más violento del que Image (y Rob Liefeld en X-Force, por ejemplo) habían imbuido el mundo del cómic, aparecieron series como Justice League Task Force. La JLA volvería a irse degradando hasta que Grant Morrison remozó de nuevo todo el concepto… y la JLI de Giffen, DeMatteis y Maguire se convertía cada vez más en una leyenda, que volvía poco en pequeños repuntes, en varias series limitadas como Antes Llamados Liga de la Justicia  o No puedo creer que no sean la Liga de la Justicia. Y sería durante el desarrollo de El Día Más Brillante cuando el concepto de la Liga de la Justicia Internacional volvería con todas sus fuerzas, en la serie quincenal Liga de la Justicia: Generación Perdida. Los miembros más representativos de la JLI se unían de nuevo bajo la batuta de Keith Giffen y Judd Winnick y con lápices de Aaron Lopresti. En Generación Perdida, la antigua Liga de la Justicia tenía que hacer frente a su antiguo aliado y ahora enemigo, Maxwell Lord, a quien todo el mundo había olvidado, y que estaba desarrollando un plan para volver a hacerse con el control de Jaque Mate. La Liga volvía a estar en el centro de la pista principal…



                Y así, tras Flashpoint, dentro de las Nuevas 52, todo estaba preparado para que una de las nuevas series que aparecieran fuera Liga de la Justicia Internacional. Y lo hace de manos de Dan Jurgens, creador de Booster Gold y guionista de esta serie en los tiempos previos a Flashpoint y con los lápices de Lopresti. La alineación del grupo es semejante a la que tuvo la Liga de la Justicia Internacional: Booster Gold (convertido en líder, como personaje fetiche de Jurgens), Batman, el Rocket Red de Generación Perdida, Hielo y Fuego, Vixen, Godiva (un personaje más que secundario, terciario, había formado parte de los Guardianes Globales que precedieron en su función a la Liga de la Justicia Internacional), Augusto General Férreo y un renuente Guy Gardner.  Y al igual que en la primera encarnación de este grupo, surge con vocación de servicio a la ONU, aunque esta vez, en vez de el filántropo Maxwell Lord, será un miembro de la propia Organización de las Naciones Unidas, André Briggs quien se encuentra al frente de la formación a nivel administrativo.
                La verdad es que Jurgens se enfrenta a todo un reto a la hora de hacer volver algo tan mítico como la JLI, y desde luego, su sentido del humor está muy lejos de aquellos grandísimos momentos que convirtieron a J´onn en un devorador de galletas, que forjaron la amistad entre Blue Beetle y Booster Gold, los enfrentamientos entre Guy Gardner y Batman, o la adaptación de Rocket Red al modelo de vida occidental. El tono que imprime a la serie es más clásico, con desapariciones misteriosas de científicos y un villano de nuevo cuño, Peraxxus (con cierto aire a Ronan el Acusador) dándoles la réplica a lo chicos de Booster, que además tendrán que hacer frente a una sociedad que ve cada vez más en los grupos de superhéroes a títeres de los gobiernos autoritarios (herencia de la propia Legends o incluso de la más actual Civil War). El propio Lopresti es mucho más clásico en su dibujo de lo que era Maguire en su momento (y también más contemporáneo, claro), y cumple con bastante habilidad a la hora de mostrarnos visualmente la historia que Jurgens nos cuenta.



                De momento, y a falta de que acabe la primera saga (este primer tomo de ECC nos trae los cuatro primeros números), el corte de la serie parece bastante clásico, entretenido, pero habrá que esperar todavía a ver qué ocurre más adelante. 

jueves, 9 de agosto de 2012

LA TRAMPA DORADA

Después de la ingesta masiva de fantasía épica y cómic de las últimas semanas, me apetecía volver a echar un ojo a la obra de la escritora Philippa Gregory sobre los Tudor. Bueno, más concretamente sobre las esposas de Enrique VIII, así que he dedicado algunos días a la lectura de La Trampa Dorada, como se ha traducido en España la novela The Boleyn Inheritance (algo así como "La Herencia Bolena"). Si en sus obras anteriores (La Princesa Fiel y La Otra Bolena), Gregory se había dedicado a hablarnos de Catalina de Aragón y las dos hermanas Bolena, en La Trampa Dorada nos encontramos en los momentos previos a la muerte de la tercera esposa de Enrique, Juana Seymour, y justo antes de la llegada de su cuarta esposa, Ana de Cleveris.



Si en las otras novelas Philippa Gregory había acudido a la narración en primera persona y centraba la historia en los personajes de Catalina de Aragón y María Bolena, en La Trampa Dorada vemos que la narración se divide entre tres personajes principales, tres mujeres muy diferentes y cada una con más interés que la otra. Así, nos encontramos capítulos protagonizados por Ana de Cleveris, la Cuarta Reina de Enrique VIII. Ana, hermana de Guillermo de Cleveris, uno de los más influyentes príncipes de la Liga Protestante, llegaba a Inglaterra como cúspide del sueño de la mano derecha del rey, Thomas Cromwell, en sus intentos por continuar avanzando en  la Reforma Religiosa en Inglaterra. Había sido una mujer educada en el protestantismo alemán, en la sobriedad del Imperio, y Gregory nos la plantea como la hija de un hombre enloquecido y la hermana de un príncipe dominante. Ana sería la elegida por Enrique entre varias princesas europeas, pero se encontraría con un problema con el que no contaba a su llegada a Inglaterra: le resultaría tan desagradable al rey que, poco después de su llegada, este comenzaría a preparar todo lo necesario para deshacerse de ella, mientras se enredaba en un caprichoso romance con la segunda protagonista de la novela, Catalina Howard. Philippa Gregory se esmera pare mostrarnos la paranoia que llega a envolver a Ana y la locura de Enrique, que se muestra en todo momento como un hombre caprichoso y temible, dispuesto a todo para conseguir lo que quería y que ya había sobrevivido a tres mujeres.

Catalina Howard es, como he dicho, la segunda protagonista de la novela, sobrina del Duque de Norfolk, cabeza de la poderosa casa Howard y por lo tanto, emparentada con importantes personajes de la época, como el Conde de Surrey o la propia Ana Bolena. Sin embargo, Catalina había carecido de la cuidada educación de que había disfrutado su prima Ana, y por lo que sabemos, era una niña extraordinariamente hermosa que se crió en un entorno de libertinaje. Se casó con Enrique VIII con quince años y ya había tenido dos amantes que, según todo indica, había llevado a su lecho, su profesor de música, Henry Mannox y uno de los hombres que acudían a casa de su abuela, Francis Dereham. Lejos de la imagen casi mística que de ella nos dio Ford Maddox Ford en La Quinta Reina, Catalina es aquí una muchacha caprichosa, materialista, pero de buen corazón y buenos sentimientos, enredada por su entorno en una historia que estaba condenada al fracaso desde el principio.

La tercera perspectiva sobre la historia nos la cuenta uno de esos personajes que aparecen en los márgenes de la historia, uno de esos que nunca es protagonista de lo que se nos cuenta, pero que en las manos adecuadas se convierte en protagonista absoluto de todo, y que genera auténtica curiosidad. Se trata de Juana Bolena, Lady Rochford, la que había sido esposa de Jorge Bolena y uno de los personajes más enigmáticos de la corte de Enrique VIII. De Juana Bolena (Juana Parker de soltera) sabemos que fue una de las damas de la corte de Ana Bolena, que fueron sus testimonios los que llevaron a esta y a Jorge al patíbulo, aunque ella consiguió salvarse y conservar el título y la mayor parte de la herencia de los Bolena. Luego formó parte de la corte de Juana Seymour, y asistió el lecho de muerte de la Reina tras dar a luz al joven Eduardo VII. Y por último, como remate, se vio enredada en las infidelidades de Catalina Howard con Thomas Culpepper, uno de los caballeros de la corte de Enrique, siendo juzgada junto a la propia reina.

No quiero dar muchos más detalles por si alguno se anima a leer, pese a que entiendo que algo que pasó hace cuatrocientos años no puede ser spoiler, pero simplemente, debo decir que muy pocas novelas (muy muy muy pocas) consiguen tenerme lo suficientemente enganchado como para dejar en un montón las novedades de cómics del mes y seguir con ellas...

Con La Trampa Dorada, Philippa Gregory lo ha conseguido de largo.

miércoles, 8 de agosto de 2012

MALÚ Y TIZIANO FERRO: EL AMOR ES UNA COSA SIMPLE

Bueno, todos los que andáis por aquí de vez en cuando, y los que me conocéis personalmente, sabéis que si tengo dos cantantes fetiche, son Tiziano Ferro y Malú. Que los dos hayan grabado juntos este tema de Tiziano, es como un regalo de reyes adelantado. Perfecto, simplemente perfecto.



Que lo disfrutéis.

martes, 7 de agosto de 2012

X-MEN: INFERNO


                Hacía mucho tiempo que Factor-X y la Patrulla andaban cruzándose, siguiéndose los pasos los unos a los otros pero sin llegar a coincidir. Durante la Masacre Mutante, ambos grupos estuvieron en los túneles de los Morlocks. En la Caída de los Mutantes, mientras la Patrulla hacía frente al Adversario y “morían”, Factor-X hacía frente a Apocalipsis y sus Cuatro Jinetes, con el regreso de Warren Worthington convertido en Muerte, probablemente la encarnación más interesante que ha tenido nunca este personaje. El momento del encuentro había llegado, y sería tratado como se merecía: con todo un crossover que envolvería a cuatro colecciones y que salpicaría a buena parte del Universo Marvel en el proceso.




                Inferno es una creación conjunta de Chris Claremont y Louise Simonson, y además de Factor-X y la Patrulla, tendrían un lugar preponderante en esta saga los Nuevos Mutantes y una serie limitada creada ex profeso para esta historia y protagonizada por los chicos a los que Factor-X había ido recogiendo en sus diversas misiones, reunidos bajo el nombre de X-Terminadores. Y si Inferno no es la mejor saga que se ha escrito en la historia de los mutantes, está muy cerca de serlo. Al igual que se había hecho antes, la historia está concebida de modo que, aunque la lectura de estas cuatro series nos da la visión completa de lo ocurrido, la conexión entre ellas se hace por parejas, de modo que podemos seguir la trama de Factor-X y la Patrulla sin leer Nuevos Mutantes y X-Terminadores y viceversa… aunque la historia queda un poco coja.
                Inferno llega para cumplir cuatro objetivos principales: cambiar el status quo  de Illyana Rasputin, aclarar el complejo triángulo Jean Grey-Madelyne Pryor-Fénix, mostrar el encuentro entre la Patrulla y Factor, y permitir a los X-Men devolver a los Merodeadores todo el daño que les habían hecho. Y cumple con los cuatro objetivos de sobra. ¿La historia?



                En los últimos meses, en Nuevos Mutantes y en algunos momentos en Patrulla-X, habíamos visto como el dominio de Magik sobre el Limbo se había ido viendo mermado por la cada vez mayor fuerza del demonio S´Ym, hasta el punto de que justo antes de empezar Inferno, el demonio tecnorgánico había conseguido hacerse con el control completo del reino, atrapando a Illyana y a los Nuevos Mutantes en el proceso. S´Ym no estaba solo en el proceso, y había recabado la ayuda de otro demonio, el hechicero N´Astirh, ideólogo de un plan que permitiría a S´Ym extender el dominio del Limbo a la Tierra a través de un portal mágico que utilizaría bebés mutantes como vértices de poder, dando lugar a un proceso de demonización de Nueva York (y el mundo, claro), centrado en el Empire State y Times Square. Pero N´Astirh no era un siervo dedicado, sino más bien el segundón llamado a ocupar la palestra central, así que, mientras conspiraba para S´Ym, conspiraba también contra él y preparándose para conseguir para sí mismo el control del Limbo y de la Tierra, utilizando para ello a Madelyne Pryor, ante quien había aparecido en X-Men… y al hijo de esta y Cíclope. La confluencia de tramas fue magistral, como magistral fue su desarrollo.
                Los X-Terminadores y los Nuevos Mutantes serían quienes tendrían que lidiar con la demonización de Nueva York y salvar a los niños mutantes, derrotando a S´Ym, y alcanzando Illyana su manifestación más siniestra, la Niña Oscura que se sacrificaría para cerrar el portal al Limbo… aunque al final, Illyana no moriría, sino que reaparecería convertida de nuevo en una niña pequeña, como si su exilio en el Limbo nunca hubiera tenido lugar, como si nunca hubiera sido la siniestra aprendiz de Belasco. Parte de los X-Terminadores (Rictor y Bum-Bum) pasarían a formar parte del plantel de Nuevos Mutantes; y aunque su parte en el desarrollo de la saga habría terminado… el mundo aún no estaría a salvo.
                Porque serían la Patrulla y Factor-X quienes tendrían que cerrar las tramas de esta historia. Los dos grupos se ven arrastrados por la demonización progresiva de Nueva York, y la Patrulla-X tiene un nuevo enfrentamiento con los Merodeadores en El Callejón, donde los seguidores de Siniestro se habían instalado. Mientras Factor-X hacía frente a lo que ocurría en la superficie (trenes demonio y cosas así) y Scott y Jean Grey trataban de encontrar al hijo del primero con Madelyne, secuestrado por los demonios, la Patrulla combatía en el subsuelo… y se iba entregando cada vez más a la oscuridad que les rodeaba. Con la Patrulla y Factor-X en Nueva York, el encuentro es solo cuestión de tiempo, y se produce auspiciado por las manipulaciones de Madelyne Pryor, convertida por las manipulaciones de N´Astirh en la Reina Duende. Durante este tiempo, Madelyne, guiada por N´Astirh, se había enfrentado a Siniestro, averiguando por fin su origen: Madeyne Pryor había sido un clon de Jean Grey, uno de los juguetes genéticos de Siniestro, atrapada en estado comatoso hasta el momento en que Fénix se suicidaba en la Zona Azul de la Luna, despertando y diciendo las mismas palabras que “Jean” había dicho justo antes de morir. Siniestro había manipulado su vida para cruzarla en el camino de Scott Summers, y había decidido destruirla cuando Jean Grey había vuelto a la vida. Pero Madelyne no estaba dispuesta a convertirse en un juguete, y movida por el rencor y la ira, estaba dispuesta a hacer arder el mundo para vengarse de las manipulaciones de Siniestro y del abandono sufrido en manos de Cíclope.



                De la Patrulla-X, Dazzler y Longshot se ven arrastrados por el Inferno, mientras que Kaos, directamente, movido por sus sentimientos hacia Madelyne, se pone de su lado. El resto de los miembros del equipo (Pícara, Mariposa Mental, Lobezno y Tormenta) también se ven tocados por la oscuridad, no así Coloso, que de hecho, además de participar en los números de Patrulla-X lo hará en los de Nuevos Mutantes, ayudando a Illyana a luchar contra S´Ym. Por supuesto, el encuentro entre Factor-X y la Patrulla se lleva a cabo como se llevan a cabo los encuentros entre casi cualquier grupo de superhéroes. A ostias. Y es que había mucha mala sangre entre ellos. La Patrulla aún creía que Factor-X eran cazadores de mutantes, que habían traicionado el sueño de Xavier. Los miembros de Factor-X estaban convencidos de que la Patrulla había muerto. Ambos habían sido traicionados, unos por Madelyne, los otros por su relaciones públicas, Cameron Hodge, miembro del grupo radical antimutante "La Verdad" y que había acabado con la vida de la novia de Warren, Candy Southern, para caer luego él mismo ante las afiladas alas del Ángel Oscuro. La lucha entre Patrulla-X, Factor-X, N´Astirh y Madelyne Pryor se desarrollaría en varios niveles, hasta que finalmente los X-Men y Factor-X dejaran a un lado sus diferencias para derrotar a N´Astirh, suicidándose después Madelyne en un último esfuerzo por destruir a Jean Grey, que unificaría por fin sus recuerdos, quedando clara la relación entre Madelyne, Jean y Fénix, como hemos dicho antes. Pero el enemigo final de Inferno, no sería otro que el propio Mister Siniestro, a quien la Patrulla y Factor-X se enfrentarían unidos, en la abandonada Mansión del Profesor Xavier, que resultaría destruida en el conflicto. Los dos grupos tendrían que hacer frente a Siniestro y Malicia/Polaris, descubriéndose la participación de Siniestro en muchos acontecimientos de la vida de Cíclope. La lucha entre los dos equipo y Siniestro es uno de los momentos más trepidantes de la historia del cómic, e Inferno acaba, como era de esperar, con los dos equipos dejando a un lado sus diferencias, lo que permitiría su colaboración en futuras ocasiones (lo veremos en Proyecto: Exterminio o la Saga de la Isla Muir...), y desde luego, pone un punto y aparte más que adecuado a la épica que inunda toda esta saga.

Si los guiones de Louise Simonson y Chris Claremont son impecables en cada uno de los números de Inferno, no son menos apropiados los lápices de la saga. Los números de Patrulla-X fueron realizados en su totalidad por Marc Silvestri, cuya original narración hace que Inferno tenga cierto toque de perfección que muchas otras historias no han podido alcanzar. Y aunque en la comparación directa desde mi punto de vista sale perdiendo, no menos importante es el trabajo que Walter Simonson, de trazo mucho más libre que Silvestri, hace en los números de la saga correspondientes a Factor-X, siendo él el dibujante que da forma a la espectacular lucha entre los héroes mutantes y Siniestro, en un número que debería ser enmarcado y mostrado en los museos. 

Si las historias de mutantes son grandes, Inferno es probablemente la mejor de todas ellas. Aun babeo cada vez que la leo. 

En serio.

Wow.




lunes, 6 de agosto de 2012

LAS HERMANITAS DE ELURIA


                Decir que Stephen King es una especie de gallina de los huevos de oro no sorprenderá a nadie. Pero hasta hace un par de años, pensar que las creaciones de Stephen King podían convertirse en uno de los grandes hitos del mundo del cómic del siglo XXI, probablemente nos hubiera extrañado más. Y sin embargo, así ha sido. La colección de siete libros La Torre Oscura ha sido probablemente la obra más grande de Stephen King, y su protagonista, Roland Deschain, el Pistolero, una de sus mejores  creaciones. Sin embargo, llevar la saga de Roland al cómic, parecía un desafío, y para llevarlo a cabo, Marvel eligió a un elenco inmejorable: Robin Furth, colaboradora y coordinadora de Stephen King y autora de The Dark Tower: A Concordande; el guionista Peter David, que nos muestra su faceta más siniestra; los lápices de Jae Lee, sombrío y casi mágico; y el color del maestro del coloreado informático, Richard Isanove. Juntos, dieron comienzo a una historia que comenzó como una serie limitada… y hoy vamos a hablar de la séptima de estas series.



                El trayecto iniciado en El Nacimiento del Pistolero y continuado en El Largo Camino a Casa, Traición, La Caída de Gilead, La Batalla de la Colina de Jericó y El Viaje Empieza, se une ahora Las Hermanitas de Eluria, el tomo del que vamos a hablar hoy y que nos ha traído en formato de bolsillo… bueno, DEBOLS!LLO. De aquellos que iniciaran este viaje, Jae Lee fue sustituido por Luke Ross, que es quien se encarga del apartado gráfico en Las Hermanita de Eluria, pero el resto del equipo sigue al completo. Furth, David, Ross e Isanove continúan contándonos qué pasó con Roland Deschain tras la caída del mundo civilizado, un mundo que se ha movido, en el que todo el orden que representaban los Pistoleros de la estirpe de Eld, ha desaparecido. Roland es el último pistolero, el último del linaje de Eld, y en estos cómics, aun es un niño, muy lejano del Roland que será protagonista de la primera de las novelas de la historia de King, El Pistolero.
                Roland es joven, en muchas ocasiones impetuoso y descuidado, y por eso, le ocurren cosas como la que se nos cuenta en Las Hermanitas de Eluria. En esta narración, Roland llega por puro azar a un lugar llamado Eluria, donde es herido por un grupo de mutantes lentos, y cae en las manos de lo que parecen ser un grupo de extrañas enfermeras. Que según avanza la historia, vemos que son aún más extrañas y tenebrosas. No sorprendo a nadie si digo que la presencia del vampiro es una de las más llamativas en las novelas de King, desde El Misterio de Salem´s Lot a la propia La Torre Oscura, y Peter David y Robin Furth utilizan Las Hermanitas de Eluria para plantearnos un primer encuentro de Roland con estas terribles criaturas, más mágicas de lo que nunca han sido en la obra de este escritor.



                A nivel de trama, Las Hermanitas de Eluria es una historia sencilla, sin muchas pretensiones, muy lejos de la épica de narraciones anteriores, pero si algo caracteriza a Peter David es su capacidad de hacer bien cualquier cosa, de modo que aun así, estamos ante un trabajo bastante entretenido, y capaz de complacer tanto a los fanáticos de la Torre Oscura como yo mismo, como a los seguidores del Roland más comiquero.
                Ya sabéis, nos vemos en el camino del Ka. 

jueves, 2 de agosto de 2012

NIGHTWING 1


                Si nos preguntan a cualquiera por nuestro personaje de DC favorito, probablemente la respuesta sea uno de los grandes, y para la mayoría, sin duda alguna, el nombre que acudiría a nuestra boca sería “Batman”. Pero si dejamos a un lado a estas “grandes divas”, me atrevería a asegurar que muchos de nosotros, en el segundo puesto, tendríamos a Nightwing. Y es que Dick Grayson, durante sus muchos años de existencia se ha hecho con un importante hueco en el Universo DC.



                Dick Grayson fue, como todo el mundo sabe, el primer Robin, e hizo su primera aparición en el Detective Comics 38, allá por 1940, de la mano de Bob Kane, Bill Finger y Jerry Robinson. Batman necesitaba un contrapunto para demostrarnos a todos su inteligencia, necesitaba alguien que le diera la réplica, un Watson para el Holmes de la serie. Batman era el cazador silencioso, Robin el duende saltarín que volvía locos a los maleantes con su inacabable cháchara y sus chanzas. Cuando llegó el momento de crear una imagen junior de la Liga de la Justicia, uniendo a los sidekicks  de los diferentes héroes principales de DC, Dick Grayson no podía faltar, convertido en el líder de los Titanes. Pero Dick no estaba llamado a ser Robin para siempre. Crecería (cosa que no han hecho muchos personajes del cómic), y comenzaría a discutir con Batman, las disensiones se harían cada vez más frecuentes, hasta que finalmente, Dick dejaría de ser Robin y se convertiría en Nightwing. Y este ha sido uno de los grandes aciertos de la historia de DC, porque Nightwing, mola. Mucho. En dos ocasiones Dick ha sido llamado a cubrir el papel de Batman, una durante la larguísima saga La Caída del Murciélago, y la más reciente, tras la desaparición de Bruce tras Crisis Final y La Batalla por la Capucha, y las dos veces, finalmente, ha vuelto a vestir el uniforme de Nightwing, porque por suerte para todos, Dick Grayson no es Batman. Es alguien diferente, es Nightwing. Y tiene todo lo bueno de Batman, pero añadiéndole habilidades sociales, lo que le convierte en uno de los personajes principales de DC. Es la persona en la que incluso Superman confía, el héroe que puede acudir sin ningún problema a cualquiera de los otros héroes que se mueven por el universo DC, y al que todos van a responder.



                Con todo este trasfondo, es obvio que Nightwing no podía quedar apartado del relanzamiento de DC, este reboot que continuamos descubriendo mes a mes de la mano de ECC, y que ha venido en ser llamado “Nuevo Universo DC” o “Las Nuevas 52”. Y una de esas 52 tenía que ser Nightwing. Dick Grayson venía disfrutando de serie propia desde muchos años atrás, con mejor o peor suerte, pero bastante interesante en los últimos tiempos, donde ha contado con escritores de la talla de Judd Winnick, y ahora, DC ha apostado por un recién llegado que parece llamado a convertirse en uno de los grandes de la industria del cómic. Kyle Higgins que, como muchos otros guionistas viene del mundo del cine (dirigió en 2008 un revolucionario corto de 27 minutos llamado “The League” que llamó la atención de muchos medios), se ha hecho un hueco en la franquicia del Murciélago con algunas historias de complemento para Batman Inc y co-guionizando con Scott Snyder Batman: Puertas de Gotham. Ahora, DC le ha dado el control completo sobre, podríamos llamarle, “el primero de sus secundarios”.
                Realmente, la misión de Higgins no es fácil, y es que debe continuar las aventuras de un Dick Grayson que ha estado últimamente portando el Manto del Murciélago y convertido en Batman por mano y obra del indiscutiblemente genial Grant Morrison. Ante él, Higgins tiene la tarea de convertir lo que podría ser “un salto hacia atrás”, la vuelta de Dick a Nightwing, y hacer que sea algo interesante e innovador. Y la verdad es que el principio promete. En esta nueva realidad creada tras Flashpoint, Dick tenía dieciséis años y no doce, pero se mantiene la continuidad en la que ha sido Batman hasta poco después del regreso de Bruce. Ahora, vuelve a ser Nightwing y a Gotham, y para su primera historia, Higgins decide darle una vuelta de tuerca más a esta “vuelta hacia atrás” que supone volver a convertir a Dick Grayson en Nightwing, y lo hace yendo aún más atrás, para cimentar su historia en el pasado del personaje, en el Circo Haly, que ha regresado a Gotham, trayendo con él muchos recuerdos para Dick (era el circo en el que ejercía de trapecista junto a sus padres, formando parte de los Grayson Voladores hasta que fueron asesinados en plena actuación por el mafioso Tony Zucco), pero también misterios y la creación de un nuevo enemigo, un asesino de nombre Saiko que parece decidido a acabar no con la vida de Nightwing, sino con la  de Dick Grayson, al que por algún motivo, considera el peor asesino de Gotham…



                Y seamos serios, con el historial que tiene Gotham, que te consideren el peor de los asesinos, no es demasiado agradable.
                Higgins ha decidido tomarse su tiempo para plantear su historia, y en estos cuatro primeros números de la colección que ECC ha reunido en un solo tomo, se limita a ir estableciendo el nuevo status quo del personaje, presentarnos a algunos de los personajes del entorno del Circo Haly y sembrar las primeras pistas sobre lo que nos depararán los próximos números. Y para ello, cuenta e el apartado gráfico con uno de los dibujantes que más ha evolucionado dentro de DC, el brasileño Eddie Barrows, que dio un enorme salto cualitativo en su trabajo desde las páginas de Jóvenes Titanes con Sean McKeever a las de Blackest Night: Superman, de la mano de John Robinson. Y ahora, Barrows nos enseña que su trabajo no ha hecho más que mejorar, aunque no parece que vaya a ser demasiado regular, ya que en este primer tomo, ya tiene que contar con la ayuda de un pictórico Eduardo Pansica y de un Trevor McCarthy cuyo trazo recuerda poderosamente al de Terry Dodson (con lo bueno y lo malo que ello conlleva). Si bien los cambios de dibujante no ayudan a una colección que está empezando, creo que Higgins tiene unas ideas lo suficientemente interesantes como para que tal hecho no pese sobre su trabajo.
                ¡A ver cómo vienen los siguientes tomos!

miércoles, 1 de agosto de 2012

BSO BATMAN TDKR: GOTHAM´S RECKONING

El otro día, cuando hice el post sobre la nueva peli de Batman, comenté que la banda sonora de la peli me había parecido un gran apoyo para el film, y que tiene momentos absolutamente grandiosos, como todo lo que suele hacer Hans Zimmer (¿cómo no recordar ese pedazo de BSO de Los Simpson?). Mavado ha tenido el detallazo de conseguirme este trabajo, y hoy os dejo por aquí uno de los temas, en el que como fondo musical aparece el impresionante coro de los presos de la cárcel en la que creció Bane, ya sabéis... ¡Asciende!

¡Que os guste!