UN CESTO LLENO DE CABEZAS

 

Un cesto lleno de cabezas by Joe Hill
My rating: 4 of 5 stars

En este proceso de apertura de temáticas comiqueras que he emprendido (gracias Kieron Gillen), he decidido darle una oportunidad al terror y a la línea Joe Hill Cómics, así que nada, gracias a Alcalá Cómics me he hecho con los tres primeros volúmenes. Y el primero de los tres es obra del propio Joe Hill, Un cesto lleno de cabezas, que ya de por sí tiene un nombre bastante impactante. Por si hay alguien por ahí que no sepa quién es Joe Hill, y aunque su mérito es propio, no se puede negar que es, sin duda, el príncipe del terror, ya que como poco, es el hijo del Rey. Y es que Joe Hill es el hijo de Stephen King, aunque ha desarrollado una carrera propia como escritor, y ya hizo sus pinitos en el mundo del cómic con la aclamada (y sorprendente) Locke & Key. Sí que he leído Locke & Key y he visto su adaptación a serie, y también he visto la primera temporada de NOS4A2, adaptación de otra de sus novelas, pero la verdad es que no he leído nada más de él, de modo que tampoco tengo mucha idea de qué tal escritor es más allá de esos pocos detalles que he comentado, de modo que he podido acercarme a Un cesto lleno de cabezas con la mente abierta.

Y bueno, pues la verdad es que ha pasado de entretenido, me ha parecido un tomo muy divertido, con algunas cosas muy originales y algunas que son clichés absolutos, pero muy bien utilizados, lo suficiente como para ser predecibles, pero no tanto como para ser aburridos. Un cesto de cabezas nos cuenta una noche en la vida de June, una joven que llega al pueblo donde su novio ha estado trabajando como ayudante de policía todo el verano. Y una vez allí, se encuentra con que el pueblo se ve atrapado en una gigantesca tormenta mientras un grupo de presos fugados, por algún motivo, decide convertir a June y a su novio Liam en su objetivo... Pero en el mejor estilo de las Final Girl (y especialmente de esa película sorprendente que es Tú eres el siguiente), June va a resultar ser una adversaria notable, y más armada con un objeto que parece llegar a sus manos por pura casualidad, un hacha mágica vikinga que permite que aquellos a los que decapita continúen hablando, lo que va a hacer que June se haga, precisamente, con un cesto lleno de cabezas.

Como he dicho antes, aquí hay de todo. El planteamiento del hacha mágica me parece muy original, y más aún cuando Hill no hace ni el más mínimo esfuerzo por explicarlo, y es que hay veces que las cosas tienen que ser así. ¿Por qué? Porque son cosas que pasan. La narración es muy dinámica, no hay ni un momento bajo. Y por ejemplo, el tema de "los cuatro presos" o la implicación de la policía en todo lo que está pasando en el pueblo, sí que es bastante predecible, no en cuanto al motivo pero sí en cuanto a que están ahí y desde el principio se nota que hay algo raro.

En fin, un tomo interesante, una historia muy entretenida, y un buen primer acercamiento a esta línea de cómics.

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