X-MEN: LA MALDICIÓN DE LOS MUTANTES

Curse of the Mutants by Victor Gischler
My rating: 3 of 5 stars

Advenimiento había terminado y las colecciones con una X en el nombre se multiplicaban. Desde que X-Men se había convertido en X-Men: Legado después de Complejo de Mesías, el título había quedado disponible, y la editorial decidió ocuparlo recurriendo al novelista Victor Gischler y al dibujante Paco Medina, que ya había trabajado en la franquicia mutante junto a Kyle y Yost en New X-Men. Y la idea de la colección era favorecer la interrelación de los mutantes con otros personajes de la casa, como Spiderman, los Cuatro Fantásticos, o en este primer arco, Blade.

En Marvel tenían claro que los vampiros volvían a estar de moda, quizá no por las razones adecuadas (Stephanie Meyer, seguro que no eran las razones adecuadas), así que decidieron aprovechar y traer de vuelta a Drácula, ya que el Señor de los Vampiros tenía una historia antigua y compleja con ellos, especialmente con Tormenta, a la que había estado a punto de convertir en vampira (de hecho, Marvel desarrollaría a una Tormenta vampira en un mundo alternativo, un personaje muy interesante). Pero en este caso, Drácula no sería quien atacase a la Patrulla, sino que lo haría su hijo, Xarus, después de dar un golpe de estado y acabar con su propio padre. Gischler nos traería una nación vampírica dividida en sectas evidentemente basada en los clanes del juego de rol Vampiro: La Mascarada; con clanes guerreros, clanes humanistas, investigadores... En fin, un poco de todo. Y los vampiros realizan un ataque terrorista sobre San Francisco, utilizando sangre vampírica modificada de forma vírica para atraer a ellos a Júbilo, personaje que había perdido sus poderes tras Dinastía de M y que había vuelto al mundo superheróico como la Nuevo Guerrero Wondra en los tiempos posteriores a Civil War, pero al que Gischler devolvía al centro de la "vida mutante".... por decirlo de alguna manera.

En fin, La Maldición de los Mutantes trae un nuevo conflicto de amplio espectro entre la Patrulla-X y los vampiros, y lo hace contando con el mayor especialista en vampiros de Marvel... o al menos, el más cinematográfico, que parece que ya nadie se acuerda de Hannibal King y Frank Drake... ¡Blade! No es que aporte mucho a la historia como tal, ya que realmente Gischler convierte a Cíclope en el personaje central de la saga, comiéndose con mucho a todos y cada uno de sus compañeros.

Una historia muy entretenida.

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