No es la crónica de un mundo... es la historia de muchos.

lunes, 9 de diciembre de 2013

DRAGONES Y MAZMORRAS 6

Hoy presentamos: 
El Momento de la Verdad.


Por motivos diversos, la realidad reflejada en esta crónica, ha sufrido un cambio de retrocontinuidad. El personaje de Eärwen se mantendrá al margen de momento, y Tharkas se ha convertido en el druida de un grupo que ahora estará formado por Tharkas el Druida, Hank el Explorador y Alexiel la Maga…

                Desde los túneles del templo de las Serpientes, Hank, Tharkas y Alexiel ascendieron hasta la bodega de la mansión del Consejero Verlaine. Sorprendidos y tensos, los personajes subieron a la mansión, sorprendidos por encontrarse la residencia del consejero vacía y sin los guardias que deberían estar allí. Hank escuchó quejidos procedentes de la planta superior, y hacia allí se dirigieron. Leo, el leopardo de Tharkas les avisó de que había presencia de personas en dos de las habitaciones, y Alexiel decidió entrar a una de ellas, encontrándose en el dormitorio principal de la casa, donde yacían muertos los guardias de Verlaine. Mientras examinaban el lugar, sufrieron una emboscada por parte de uno asesino, Slaam, que se había escondido en un armario. Tharkas consiguió evitar el ataque de Slaam, y Alexiel le hizo dormir con uno de sus hechizos, pero antes de que pudieran reaccionar, el compañero de Slaam, McNeill, hizo su aparición procedente de la sala contigua, arrojando al interior de la sala un frasco de fuego de alquimista, que prendió de inmediato. Hank consiguió acabar con McNeill con un certero disparo de su arco, pero la sala ya había comenzado a arder, y el fuego se extendía por la casa. Alexiel utilizó el Disco Flotante de Tenser para salir del edificio por la ventana, llevándose consigo a Slaam, mientras Tharkas y Hank corrían por otro acceso, llevándose el cuerpo de McNeill y a Elgin. Tharkas sufrió algunas heridas en la huída, pero finalmente salieron del edificio y se reunieron después de saquear a Slaam y McNeill.




                Tras encontrar un sitio más discreto mientras la casa de Verlaine ardía hasta las cenizas, despertaron a Slaam, encontrando además entre sus papeles y los de McNeill documentación que indicaba que la Hermandad planeaba un ataque contra el Templo del Dios del Conocimiento, y que Verlaine era otro de los objetivos de la Hermandad. Alexiel, Hank y Tharkas se dirigieron al Templo del Conocimiento, dispuestos a averiguar la verdad sobre lo que escondían sus muros, y allí, Elgin consiguió que se reunieran con el Sumo Sacerdote Thuron. La reunión fue tensa, y finalmente, Hank no dudó al cortar a Thuron para comprobar si se trataba de un Hombre Serpiente. Y así resultó ser, aunque el ataque de la Hermandad comenzó en ese momento, y Thuron les suplicó ayuda, además de una próxima explicación. Decididos a ayudar a los sacerdotes, Tharkas, Alexiel y Hank se dispusieron a enfrentarse a los miembros de la Hermandad, que se habían camuflado entre los Sacerdotes. Los Cultistas, dirigidos por una sacerdotisa serpiente, K´Ral, y acompañados de Slaam, realizaron su ataque en dos frentes, y mientras Alexiel, protegiendo a Thuron, desafiaba a los cultistas que asaltaban el flanco este del templo, Tharkas y Hank intentaban bloquear la puerta oeste, donde se encontraban K´Ral y Slaam.
                El combate fue épico. Los hechizos de Alexiel, los precisos disparos de Hank, las criaturas invocadas por Tharkas… Los cultistas más débiles fueron segados, pero Slaam consiguió acabar con el leopardo de Tharkas y el lobo de Hank, mientras K ´Ral conseguía mantener en jaque al Explorador y el Druida. Sería finalmente la magia de Alexiel la que derrotara a K´Ral, lo que hizo que Slaam se rindiera, y pondría fin al ataque de la Hermandad.
                Sería entonces cuando Thuron, reunido con los personajes, reconocería ser un Hombre Serpiente, pero no una de las criaturas malévolas del Innombrable, sino uno de los sabios y viejos seguidores de Yig del tiempo de Valossa, que se había infiltrado en el tiempo para comprender el saber reunido por Lucius en sus viajes, y que había terminado ocupando el puesto del Sumo Sacerdote, muerto de manera natural. Todo indicaba que Milton Drac y su Faro tenían un siniestro designio… y aún quedaba averiguar cuál era. 

No hay comentarios: