No es la crónica de un mundo... es la historia de muchos.

miércoles, 30 de diciembre de 2015

EL TRÍPTICO DE ASCLEPIA III: UN MAL NECESARIO

Con este volumen, llega a su final la trilogía El Tríptico de Asclepia, de Ian Tregillis, acabando este trabajo que mezcla ucronía, magia y ficción dieselpunk a partes iguales. En los libros anteriores, habíamos visto el enfrentamiento entre los magos ingleses y los superhombres alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. En medio de este conflicto había estado Raybould Marsh, un militar inglés que descubre la existencia de los superhombres alemanes, producto de las investigaciones de una suerte de científico loco, el doctor von Westarp. En los dos polos opuestos del conflicto, habíamos visto a William Beauclerk, un brujo renuente consciente del extraordinario poder de las criaturas metafísicas conocidad como "los Eidolones"; y Gretel, la manipuladora pupila de von Westarp con el poder de ver el futuro. 



La interacción entre unos y otros había creado una Segunda Guerra Mundial diferente a la que nosotros recordamos, mucho más breve, y en la que los rusos, ayudados por los Eidolones, habían acabado con Alemania, absorbiendo prácticamente toda Europa Occidental en el proceso. Veinte años después el conflicto había continuado, esta vez con los brujos ingleses haciendo frente a los superhombres rusos desarrollados según los estudios de von Westarp, y con un complejo panorama político. Las manipulaciones de Gretel, los oscuros deseos de los Eidolones, el sentido de culpa de Will, la destrozada vida de Marsh y su familia... Todos estos puntos se desarrollan a lo largo de la guerra fría entre rusos y británicos, llevando al mundo a un final apocalíptico... 

Y así, en el día después del apocalipsis, comienza Un Mal Necesario... o quizá no lo hace en ese momento, porque después de que Will, Gretel y Marsh asintieran al fin del mundo, el viejo Marsh viaja al pasado, a 1940, al momento en el que Asclepia estaba formándose para enfrentarse a los superhumanos de Alemania, antes de que Inglaterra dejase su defensa en manos de los Eidolones, condenando así el futuro del mundo. Y son precisamente las previsiones de Gretel sobre un futuro diferente las que marcan los hitos de este último libro, con un mundo en el que Gretel, William, el viejo Marsh y su versión más joven luchan contra el propio futuro para construir un mundo en el que los Eidolones no acaben con la humanidad, y para ello, tanto los brujos como los superhombres tienen que ser exterminados. 

Con Un Mal Necesario, Tregillis cierra una historia trepidante, que mezcla acción, ciencia ficción y realpolitik para construir una interesante ucronía, donde cada giro de los acontecimientos o de los bien definidos personajes, parece conducir hacia un final aún peor que los anteriores, y donde evidentemente, no hay un final feliz, probablemente para nadie. 

Una trilogía fácil y rápida de leer, muy entretenida y recomendable. 

lunes, 21 de diciembre de 2015

LOS GATOS GUERREROS; LOS CUATRO CLANES IV: ANTES DE LA TORMENTA

Con la traición de Garra de Tigre, el Clan del Trueno quedaba más herido que nunca en su propio corazón. Estrella Azul, la líder del Clan, a pesar de contar con el apoyo de su nuevo lugarteniente, Corazón de Fuego, ha quedado herida en lo más íntimo de su ser por la traición de su antiguo segundo, y el resto de los clanes no están demasiados dispuestos a mostrarse amables con el Clan del Trueno. El Clan del Viento no les perdona que dieran cobijo a Cola Rota, aun tienes enfrentamientos con el Clan del Río debido a la tensión provocada por el idilio de Látigo Gris y Corriente Plateada; y el Clan de las Sombras se encuentra debilitado por la enfermedad, que parece estar cebándose en sus líderes más allá del Sendero Atronador...



Con este panorama Corazón de Fuego debe hacer frente no solo a los problemas del exterior sino también a los del interior, mientras trata de ocultar la debilidad de Estrella Azul, tiene que hacer frente a su añoranza por Látigo Gris, a la presencia de los afectos de Garra de Tigre dentro del clan, y los nuevos sentimientos que le surgen hacia Tormenta de Arena... y al comportamiento de su propio sobrino, Nimbo, caprichoso y rebelde, y con una relación con los Dos Patas que sorprende al propio Corazón de Fuego...

Con estas premisas, el grupo de escritoras que escriben como "Erin Hunter", arrancan una nueva novela de los Cuatro Clanes, intensa en sí misma, con nuevas perdidas y llegadas al Clan del Trueno, y que sirve de puente entre las tres anteriores y las que quedan por venir, donde se va gestando el enfrentamiento entre el Clan del Trueno dirigido por Corazón de Fuego y el asesino Garra de Tigre...

¡¡¡Que me traigan ya el quinto que lo tengo encargadoooo!!!

RAVENLOFT: FIESTA DE GOBLYNS (V)

Después de ver cómo el Dominio de Daglan se formaba ante sus propios ojos, con la hechicera Radaga al frente, habiendo recuperado la Corona de Almádenas, se dieron cuenta de que las nubes en el cielo, a pesar de la ausencia de viento, avanzaban raudas hacia el Oeste. Pensando en que algo debía estar pasando allí, emprendieron el camino, preparados para enfrentarse a cualquier cosa que pudieran encontrarse. Tras un largo día y una larga noche, finalmente llegaron a una población, la capital del pequeño dominio de Radaga, Hemlock. El poblado estaba rodeado por una muralla hecha de esqueletos vivientes, y cerca de una iglesia abandonada, se estaba formando un torbellino de nubes que llegaban a tocar tierra en un círculo de montículos cercanos. Clavis y Balduin se acercaron a la muralla, y los esqueletos se prepararon para atacar, así que retrocedieron, Sin embargo, cuando un grupo de goblyns procedentes del interior de la población y enarbolando una cabeza humana, lo esqueletos permitieron que salieran, apartándose. Derrotando a los goblyns, los personajes se disfrazaron con sus ropas y volvieron a la ciudad, con Bastian al frente portando la cabeza decapitada, y de ese modo, pudieron adentrarse en Hemlock. Una vez dentro de la población, no dudaron en dirigirse hacia la iglesia. Allí tuvieron que enfrentarse a un numeroso grupo de muertos vivientes, y se adentraron en lo que parecía ser el corazón del dominio de Radaga. 



Después de que Lady Sombra descubriera las trampas envenenadas situadas en la puerta, pudieron adentrarse en la iglesia, enfrentándose de nuevo a varias criaturas no muertas, desde zombis a esqueletos gigantes, liberando en su exploración a un guerrero elfo, Honnock Cann, procedente del reino en el que la Corona había sido forjada, aunque para Honnock, era la Corona de Almas, obra del malvado hechicero Daglan Daegon, que había depositado un gran poder en la Corona, para finalmente, quedar atrapado dentro de esta; y les explicó que Radaga no debía ser asesinada con la corona puesta, pues eso permitiría a Daglan liberarse y tomar su cuerpo, encarnándose de nuevo en Ravenloft. Siguieron explorando la iglesia, derrotando a extrañas criaturas, hasta que tras una batalla en la nave principal de la iglesia, donde derrotaron a varios goblyns, una entidad y un espectro, consiguieron interrumpir el hechizo que le permitía a Radaga continuar animando muertos vivientes, y encontraron también el camino que llevaba hacia el refugio de la sacerdotisa, una cripta en el exterior de la iglesia. 

Hacia allí se dirigieron, dispuestos a acabar finalmente con Radaga, que estaba allí, protegida por vario esqueletos de fuego y dos esqueletos gigantes. Los hechizos de Bastian y Clavis, y la resistencia de Ailyn, Ronna y Balduin, permitieron a Lady Sombra utilizar una nueva adquisición, una capa de araña, para trepar por las paredes y acercarse a Radaga lo suficiente como para arrebatarle a la sacerdotisa la Corona. Ronna pudo acabar finalmente de nuevo con la no-vida de Radaga, no antes de que Sombra y Ailyn fueran malditos por los sacrílegos poderes que mantenían a la sacerdotisa, y en ese momento, la maldad de Daglan se liberó de la Corona, tratando de hacerse con el cuerpo de Radaga. Clavis bendijo el cuerpo de Radaga, evitando a Daglan que lo tomara, pero la forma espectral del nigromante se hizo con la Corona y se enfrentó a Lady Sombra, dándole las gracia por haber matado a su nieta de generaciones, lo que le había permitido liberarse, lo que era el objetivo de los poderes de Ravenloft, un nuevo dominio para Daglan Daegon. Todos se preparaban para, a pesar de estar en malas condiciones, hacer frente al nuevo señor, cuando una blanca luz estalló, viendo junto a Daglan la silueta de un elfo, que al parecer, había estado atrapado en la Corona junto al nigromante, 

La luz blanca arrastró a Bastian, Ronna, Ailyn, Sombra, Clavis y Balduin, y cuando recuperaron la visión, se encontraban en una jungla, con el aire cargado de humedad, y rugido escuchándose procedentes de la densa vegetación...

miércoles, 16 de diciembre de 2015

EL TRÍPTICO DE ASCLEPIA II: LA GUERRA MÁS FRÍA

La ucronía que no parecía tal iniciada por Ian Tregillis en Semillas Amargas, continúa en la segunda parte de su "Tríptico de Asclepia", del que ahora vamos a hablar por aquí.



En Semillas Amargas, pudimos ver cómo durante la Segunda Guerra Mundial, el Doctor von Westarp desarrolló un artilugio dieselpunk que funciona con fuerza de voluntad, y que le había permitido crear a una especie de equipo de "X-Men" a la alemana: la invisible Heike; las gemelas sin nombre capaces de comunicarse estuvieran donde estuvieran; el piroquinético Reinhardt, o los hermanos Gretel y Klaus, ella precognitiva, él capaz de hacerse intangible. La aparición de este cuerpo desequilibró tanto la guerra que los ingleses no tuvieron más remedio que acudir a una defensa especial: los brujos, capaces de manipular a los eidolon, unas criaturas todopoderosas en la práctica, y ajenas a nuestro mundo, a nuestras percepciones... y a todo lo que conocemos como moral. 

Por eso había surgido Asclepia, una organización dentro del MI6 para luchar contra las creaciones de los nazis, y dentro de la que se encontraban dos de los protagonistas de la novela: el jefe militar Raybould Marsh y uno de los brujos, Sir William Beauclerk. En Semillas Amargas asistimos al desarrollo de la Segunda Guerra Mundial, donde pudimos ver las maquinaciones de Gretel para llevar a cabo sus misteriosos objetivos, y nos habíamos sorprendido al encontrarnos con un final para la Guerra que no es el nuestro, y es que la Unión Soviética, con el camino allanado por los Eidolon manejados por los brujos ingleses, habían derrotado a los Alemanes en 1941, haciéndose en el camino con los secretos de Von Westarp y parte de su equipo, incluidos Gretel y Klaus. 

Al principio de La Guerra Más Fría, nos encontramos con que han pasado más de veinte años desde el final de la Primera Guerra Mundial, con la URSS y Gran Bretaña enfrentadas a ambos lados del Canal de la Mancha, protagonistas de una nueva versión de la Guerra Fría en la que nada tuvo que ver EE.UU, sumidos en una profunda crisis económica desde 1929. Asclepia había tenido efectos devastadores para los personajes que habíamos conocido en el libro anterior, y que aquí vuelven, veinte años después y con sus vidas completamente cambiadas, algunos habiendo encontrado la paz, otros con sus vidas destrozadas... pero el juego no había acabado para ellos. Los desarrollos científicos rusos en el campo de Arzamás-16 anunciaba un nuevo conflicto, y la vidente Gretel, decide que ha llegado la hora de volver a poner las piezas de su juego en movimiento. Su hermano Klaus, Marsh y William se ven arrastrados por las maquinaciones de Gretel,en las que las relaciones internacionales entre la URSS y Gran Bretaña se tensan cada vez más, mientras se descubren nuevos sucios secretos que Inglaterra ha mantenido vivos para mantener al margen a la URSS, Y tras todo esto, se encuentran los macabros Eidolon, que tienen su propio objetivo, y que no es otro que la extinción de toda la humanidad...

De nuevo en esta novela Ian Tregillis nos cuenta una historia trepidante, llena de acción y giros argumentales con unos personajes muy bien llevados  y con las líneas del bien y el mal completamente difuminadas y en la que muchas veces los "buenos" son mucho peores que los "malos"...

domingo, 13 de diciembre de 2015

RAVENLOFT: FIESTA DE GOBLYNS (IV)

Decididos a acabar con la amenaza de Radaga, y a pesar de que se encontraban muy desgastados por su exploración de las catacumbas en las que se encontraba la Corona de Almádenas, volvieron a adentrarse en el refugio de la sacerdotisa. Allí, se enfrentaron a los esqueletos gigantes, pero también a Radaga, que hizo su aparición ocupando el tórax de uno nuevo esqueleto gigantesco. Aprovechando en primera instancia su posibilidad de atacar a distancia, y luego concentrando sus ataques en Radaga y su montura, Finalmente, Ronna consiguió acabar con el esqueleto que protegía a la sacerdotisa, y tras recibir numerosas heridas, una flecha de Lady Sombra acabó con la vida se Radaga. De inmediato, la caverna se hundió, lo que provocó que estuvieran a punto de perder a Ronna y Bastian, pero finalmente, consiguieron salir con vida de las cavernas de Radaga y abandonar la hondonada de los huesos, en dirección a Armonía, donde descansaron y se recuperaron de todo lo que había acontecido, antes de volver a salir en dirección a Skald, donde esperaban encontrarse con Akriel. En el camino, debatieron largamente sobre qué iban a hacer con la Corona, ya que Bastian y Clavis habían percibido una fuerte magia oscura en la corona, y dudaban de los objetivos de Akriel con ella.



A su llegada a Skald, acudieron a la Vieja Posada Kartakana, donde efectivamente, se reunieron enseguida con Akriel (posteriormente, Clavis descubriría que Akriel disponía de una habitación en la posada). Lady Sombra tanteó las intenciones de Akriel, haciéndola creer que no habían encontrado la verdadera corona, pero tras ver como Akriel se derrumbaba, admitieron que la habían conseguido. Akriel entregó a los personajes su pago, y les pidió un nuevo favor: que llevaran la Corona de Almádenas al Doctor Dominiani, su amado, en el dominio de Gundarak. Según Akriel, Dominiani disponía de los conocimientos adecuados para destruir la Corona, y con ella, el poder de su poderoso pretendiente, Reginald, sobre ella. A pesar de las dudas de Ailyn sobre todo lo que estaba ocurriendo, aceptaron la petición de Akriel, poniéndose en camino hacia Gundarak. El viaje fue sorprendentemente tranquilo, salvo un incidente con un jabalí y tres lobos, y finalmente, llegaron a la fortaleza del Doctor Dominiani, donde fueron recibidos por sus silenciosos sirvientes, unos monjes ataviados de gris. La siniestra fortaleza de Dominiani arrancó las dudas de los aventureros, al igual que la impresión de que el doctor intentaba en todo momento dejarles encerrados, aunque Lady Sombra se plantó, consiguiendo que el Doctor se disculpara por su costumbre. Dominiani solicitó escuchar cómo habían recuperado la Corona, aunque Clavis narró una historia completamente ficticia que el Doctor aceptó. Dominiani les confesó que se dedicaba a tratar a enfermos con problemas mentales, y que antaño, sus padres habían servido como militares bajo el servicio de Lord Gundar, pero él había preferido dedicarse a salvar las mentes. Llevados al tema de la Corona, Dominiani admitió tener los suficientes conocimientos mágicos como para destruir la Corona, aunque tardaría semanas en reunir lo necesario para dispersar el poder maligno de la Corona de Almádenas. Clavis y Bastian se ofrecieron para ayudar a Dominiani, pero este rechazó su ayuda, argumentando que temía por su seguridad si interferían. Poco después, se retiraron a dormir, y aunque hicieron guardias, la noche pasó tranquila. Al amanecer, encontraron una nota de Dominiani, informándoles que debía salir para tratar a un paciente. Les dejaba también una carta privada para Akriel, y el pago por sus servicios, dos mil monedas de oro en monedas de platino. Sin embargo, decidieron no dejar la Corona allí, y tras tomar el estuche con la carta para Akriel, abandonaron el castillo de Dominiani, decididos a volver con Akriel y entregar entonces a ambos la Corona, ya que seguían sin confiar en Dominiani

Así que emprendieron un nuevo viaje hacia Armonía, pero esta vez, apenas se alejaron medio día del castillo, pues pronto las Brumas les encontraron... y se vieron en otro lugar completamente distinto, en un terreno cocido por el sol, bajo una gran tormenta, y el cielo, los relámpagos trazaban la momificada faz de Radaga, cuya voz, llevada por los truenos, les dio la bienvenida a Daglan, el hogar de la estirpe de Daegon... y les dio las gracias por devolverla la Corona, que enseguida, Lady Sombra comprobó que habían perdido en algún momento de su viaje por las Brumas... Solo entonces, recordaron en tercer verso de la profecía de Hyskosa que les había llevado a Kartakass...

En la casa de Daegon, el gran brujo nació; de la vida, la no vida, de los vivos se burló. 

martes, 1 de diciembre de 2015

LOS GATOS GUERREROS, LOS CUATRO CLANES 3: EL BOSQUE DE LOS SECRETOS

Seguimos en el Iconocronos con esta espectacular saga, que cada vez tiene más gatos, y más drama, y más tensión, y más acción... ¡y es que todo es genial!

La historia continúa justo donde la dejó el libro anterior, pocos días después del asalto de los renegados de Estrella Rota al refugio del Clan del Trueno. Y retomando algunas de las historias del primer tomo, nos encontramos a nuestro protagonista, Corazón de Fuego, cada vez más preocupado y desconfiando del lugarteniente del Clan, Garra de Tigre, de quien sigue sospechando, más aún después de su actuación durante el enfrentamiento entre los cuatro clanes que habíamos visto en Fuego y Hielo. 



A la relación cada vez más tensa que Corazón de Fuego mantiene con Garra de Tigre, se unen los problemas que le genera la relación entre su mejor amigo, Látigo Gris y una de las gatas del Clan del Río, Corriente Plateada; y la presencia de Pequeño Nimbo, el hijo de la hermana de Corazón de Fuego como adoptado en el clan, hacen que cada vez la presencia de Corazón de Fuego en el clan sea más complicada. Además, una serie de extraños sueños en los que aparece la desaparecida curandera, Jaspeada, y que parecen tener que ver tanto con el futuro como con un misterioso pasado, que tiene que ver con la líder del Clan, Estrella Azul, y sus cachorros, fallecidos tiempo atrás.

El tercer volumen de Los Gatos Guerreros nos trae más de lo que ya habíamos visto en los libros anteriores. una historia juvenil y entretenida, que tiene mucho de todo lo bueno que se puede esperar de un libro. Corazón de Fuego y los suyos se están haciendo un gran espacio en la estanteria de mis personajes favoritos.