Entre
los proyectos de lectura de este año, además de continuar con la fantasía
épica, por aquello de haber recuperado el gusanillo, me planteé mantener un
hueco abierto para ese otro gran campo que es la Ciencia Ficción, al que llegué
tarde pero firme de mano de Dan Simmons. Este año, cuando me llegó el momento
de pedir los regalos para Reyes, decidí que era la hora de tener todo un
clasicazo del género, y así terminó en mi biblioteca la Trilogía de la Fundación, de Isaac Asimov.
Y
ya he leído el primero de los tres libros, Fundación,
así que aquí vengo a daros parte, como es de ley. Fundación transcurre en un momento en el que la humanidad se ha
expandido por buena parte del Universo, llegando a formar un gran imperio cuyo
centro administrativo y político es el Planeta Capital de Trantor. Y es en
Trantor precisamente donde surge una ciencia, llamada la psicohistoria, una
ciencia que permite predecir los movimientos de la humanidad a largo plazo. Y
el mayor de los psicohistoriadores de Trantor, Hari Sheldon, descubre que el
Imperio se dirige hacia una época de oscuridad y de acontecimientos que concluirán
con el fin del Imperio. Por supuesto, el gobierno no está demasiado de acuerdo
con que se conozcan las teorías de Sheldon, pero este consigue establecer la
Fundación, una organización en un alejado planeta llamado Término, donde grupos
de científico redactarán la Enciclopedia Estelar, con toda la sabiduría del
Imperio, para que la época de oscuridad no acabe con todo el saber acumulado
por siglos de investigación humana…
O
al menos, ese es el planteamiento de la Fundación, porque su realidad va mucho
más allá. Y es el que el plan de Sheldon es mucho más complejo que esto, y
mucho más a largo plazo de lo que parecía al principio. No voy a devanar mucho
más de la trama de esta primera novela, por si queda alguien que no la ha
leído, pero como os digo, detrás de este proyecto de Fundación hay mucho más de
lo que parece.
Asimov,
de momento, no parece ser uno de esos escritores de ci-fi que lo llenan todo de
inventos extraños, de teorías cósmicas avanzadas… claro, que también es cierto
que es un obra escrita en los años cincuenta. Los cinco cuentos cortos que,
reunidos, forjan Fundación ponen su
peso en las relaciones humanas, y es que más que relatos, podemos hablar de que
Asimov desarrolla su narración a través de conversaciones entre diferentes
personajes, más que detallando hechos en sí. Toda la información de lo que
ocurre nos llega a través de los comentarios de los protagonistas, tamizado por
sus percepciones, huyendo como de la peste de lo que sería el narrador
convencional. Y si hay algo por lo que destaca Asimov en Fundación es por el gran conocimiento que demuestra de los
movimientos evolutivos de la civilización humana, como ya demostró en su amplia
colección de escritos, mucho menos conocidos que sus novelas de Ciencia
Ficción, sobre la historia del mundo. Es todo ese conocimiento lo que Asimov
aplica a su Fundación, donde podemos
encontrar incluso paralelismos con el Imperio Romano y sus últimos momentos en
lo que a la disolución y fragmentación del Imperio se refiere.
En
fin, Fundación es solo el preludio de
algo más grande que llegará con Fundación
e Imperio y Segunda Fundación,
así que… ya os iré contando.
3 comentarios:
Soy un pejiguera, pero es Seldon, sin "h" intercalada xD.
Pero, ¿el libro te ha gustado o no? No quiero adelantarte acontecimientos, pero Fundación no es una trilogía al uso, sino una colección de relatos que luego se agruparon en tres libros. Vamos, que lo que viene es más grande, pero a mi, particularmente, lo que más me gustó de toda la serie es precisamente este primer libro (soy fan incondicional de Salvor Hardin).
Lo digo porque estos relatos estaban pensados para ser leídos por sí mismos, más que como preludio de lo siguiente. Si esperas una trilogía en el sentido clásico, puede que cuando llegues al final se te quede una cara un poco extraña... y hasta aquí puedo spoilear.
Sí, sí me ha gustado, Er, aunque creo que un poco menos de los que esperaba. Quizá había acumulado demasiado hype con esta novela. También es cierto que mi llegada a la Ci-Fi fue de mano de Dan Simmons, y como que todo lo comparo... Y jo, Simmons es taaaaan alucinante... Que parece que todo lo demás no está a la altura. Aún así, la historia es MUY interesante.
Uy, es que Simmons es mucho Simmons. De todas formas, ya sabes que cuando uno lee clásicos, los tiene que poner en su contexto. A mi de toda la trilogía entera (las continuaciones suck, todas ellas) lo que más me gustó, precisamente, fue Fundación. Fundación e Imperio nunca me gustó nada, pero es que lo leí allá por 6º o 7º de EGB, y tardé años en entender el final (que tampoco es que sea nada del otro mundo, es que yo siempre he sido cortito). Yo creo que te gustará, porque es donde el homenaje a Gibbon es más evidente.
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