No es la crónica de un mundo... es la historia de muchos.

lunes, 22 de octubre de 2012

JUPITER


El Universo esta lleno de lugares extraordinarios, y nuestro propio Sistema Solar esconde muchas de ellas. Una de ellas es Júpiter, el gran gigante gaseoso, el segundo cuerpo más grande del Sistema, sólo por detrás del propio Sol. Se trata de un gigante gaseoso masivo, lo que significa que realmente no tiene una superficie interior definida. A pesar de que es mucho mayor que la Tierra (el tamaño de Júpiter es de 1317 veces el de nuestro planeta), es considerablemente menos denso, de modo que su masa solo supera la de la Tierra 318 veces.



                Su atmósfera está formada por diferentes grupos de gases que, a diferentes densidades, forman diversas franjas, llamadas cinturones (las zonas oscuras) y bandas (las claras) que se mueven a distintas velocidades. En 1664, el astrólogo Robert Hooke observó el que probablemente sea el fenómeno atmosférico más conocido de Júpiter, y probablemente la tormenta más famosa de todo el sistema solar. Se trata de su conocida Mancha Roja, un gran anticiclón en el que hay vientos de hasta cuatrocientos kilómetros por hora, y con un tamaño de dos y veces y media el de la Tierra.
                Júpiter tiene una gran colección de satélites, a la mayoría de los cuales se han puesto los nombres de las muchas amantes del Dios Romano del que el planeta toma nombre: los clásicos, Ío, Europa, Ganímedes y Calisto;  el sistema interior formado por Metis, Adrastea, Amaltea y Tebe; y los llamados satélites irregulares, tan lejanos a Jupiter que la gravedad del Sol distorsiona sus órbitas: Himalia, Aedea, Aitné, Ananké, Arcé, Autónoe, Caldona, Cale, Célice, Calírroe, Carmé, Carpo, Cilene, Elara, Erínome, Euante, Euporia, Eurídome, Harpálice, Hegemone, Heliké, Hermipé, Isonoe, Leda, Lisitea, Megaclite, Mnemea, Ortosia, Pasifae, Pasitea, Praxídice, Sinope, Sponde, Taigete, Telxínoe, Temisto, Tione y Yocasta… además de otros veintipico que no tienen nombre definitivo.
                ¿A que viene toda esta charla astronómica? A que Júpiter es uno de los planetas que se pueden ver a simple vista. Solo alzando los ojos al cielo y mirando. Si no hay luces que molesten, sin contaminación lumínica, en Octubre Júpiter ocupa un papel preminente en el cielo. Muy cerca de Tauro, además (cerca cósmicamente hablando). Y este ha sido el fin de semana de Júpiter. Perdonadme los seguidores habituales por este post tan atípico, pero tenía que hablar de Júpiter.
                Gracias, Cielo.

1 comentario:

Mavado dijo...

Taabién lo vi... Y si, brillaba muy mucho y pensé que no era. Pero Google Sky Maps me sacó de dudas... Aunque insistía en que no podía ser. Que Júpiter no se ve desde la Tierra. ¡Error! Esto le pasa a uno porque no tiene ni pajolera idea. xD