Hace ya algunos meses
que vi la película de animación Batman:
Año Uno, que comenté por aquí, y el otro día, en uno de estos ratos tontos
después de comer aprovechando las vacaciones y que Marco me ha pasado las peli
de animación de los personajes de DC, me senté un rato a ver Batman: Bajo la Capucha Roja. Y la
verdad es que muy entretenida, e incluso mejor que Año Uno.
Con esta producción de
animación, Warner Bros lleva a la pequeña pantalla la que fue en su momento una
de las historias más dramáticas de Batman: Una
Muerte en la Familia, el momento en el que en los cómics ocurrió lo que
parecía imposible y, a petición del público, el segundo Robin, Jason Todd,
encontraba su fin a manos del Joker. Todd
ha estado muerto una buena cantidad de años, pero ya en la última
década, hubo algún “amago” de traerle de
vuelta, como hizo Jeph Loeb en Silencio para
luego echarse atrás y decir que había sido Clayface quien había tomado la forma
de Todd, aunque sería finalmente Judd Winnick quien le traería de vuelta ya en
las páginas de las series regulares de Batman, aunque lo hizo con una excusa un
poco (bastante) chorra: los puñetazos de Superboy a las barreras dimensionales
habían resucitado a Jason. Así, tal cual.
Parece que el propio
Winnick se dio cuenta de lo impresentable que era ese argumento, y cuando
realizó el guion de la versión animada, le dio una nueva vuelta de tuerca a la
resurrección de Jason, utilizando los más “batmanianos” Fosos de Lázaro (lo que
al parecer se ha tenido también en cuenta en el nuDC más que los puñetazos de
realidad en sí). Si Batman: Año Uno
había sido copiar a la pequeña pantalla las viñetas del cómic, en Bajo la Capucha Roja, el argumento va
más por su cuenta, es más libre, a pesar de que hay fragmentos que parecen
calcados también del cómic, como el momento en que Jason enfrenta a Batman y al
Joker y le plantea al primero por qué sigue el segundo vivo después de haberle
matado.
Bajo
la Capucha Roja es una apuesta
atrevida para la animación, y sitúa a Batman en una de las tesituras más
complejas para el Murciéllago, la de afrontar los resultados y la
responsabilidad de sus decisiones o de su código ético, algo que a mí
personalmente siempre me ha parecido una de las partes más interesantes de
Batman.
¡A ver qué tal las
siguientes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario