Ayer os decía por aquí que ya había terminado con Las Guerras de Dios, y en cuanto acabé, me puse a releer el segundo de los libros de la Torre Oscura de Stephen King, titulado La Llegada de los Tres. Como los viajes al curro dan para mucho, pues nada, en un par o tres de días he tenido tiempo para leérmelo, y aquí os traigo el post. Si alguno se lo ha perdido, por cierto, tenéis el post sobre La Torre Oscura I: El Pistolero hace pocos días.
La Llegada de los Tres comienza sólo unos pocos minutos después del fin de El Pistolero. Tras haber escuchado las profecías del Hombre de Negro, Roland, el Pistolero, despierta en una playa llena de criaturas monstruosas semejantes a langostas (a las que llaman “langostruosidades”). Las profecías del Hombre de Negro eran claras, si Roland quería llegar a su objetivo, a la Torre Oscura, necesita sus nuevos tres, su nuevo ka-tet. Sabemos que los antiguos compañeros de Roland, Cuthbert y Alain, murieron en algún momento del pasado, mientras el mundo se movía, en una batalla contra los rebeldes de alguien llamado Farson. Y ahora, para seguir adelante, Roland necesita un nuevo ka-tet (algo que podríamos venir a traducir como “Hermanos del Destino”). Los naipes del Hombre de Negro hablaban de tres compañeros para Roland: el Prisionero, la Dama de las Sombras, y la Muerte (pero no para ti, Roland, dice el Hombre de Negro). Y mientras una infección mortal recorre su cuerpo amenazando su misión y su propia vida, Roland debe recorrer la inmensa playa en busca de tres puertas, que aparecen en medio de ningún sitio, y que le llevan a diferentes momentos de la historia de Nueva York… de nuestra Nueva York (o al menos eso parece), donde se encuentran sus compañeros.
Eddie Dean es el Prisionero, un heroinómano partícipe de un negocio para introducir cocaína en Estados Unidos en 1987, al servicio de un gran narco, el señor Balazar, obsesionado en construir torres con cartas. Con la enfermedad de Roland cada vez más avanzada, vemos en La Llegada de los Tres que es precisamente el personaje de Eddie Dean el que va cobrando mayor protagonismo, mientras asistimos a su lucha contra las autoridades, y contra sus propios demonios, ayudado y ayudando a Roland.
Odetta Holmes. Detta Walker. Ella es la Dama de las Sombras. La esquizofrénica perfecta. Dos personalidades completamente diferentes, cada una con un juego completo de recuerdos, y sin conciencia ninguna de la existencia de la otra. Su hogar es la Nueva York de finales de los sesenta, en plena lucha por los derechos de los negros. Odetta es amable, educada, una mujer rica y culta, encantadora. Detta es desagradable, violenta, lasciva, grosera, una ladrona y asesina en potencia. Y ambas conviven en un cuerpo tullido, ya que alguien arrojó tiempo atrás a Odetta al metro, que le amputó las piernas. Y desde luego, no está dispuesta a ponerles las cosas fáciles a Roland y a Eddie.
Jack Mort es… la Muerte (aunque no para Roland, recordemos). Porque Jack Mort realmente es El Que Empuja. Una compleja historia le une a Odetta Holmes/Detta Walker, pero también a Jake, el muchacho que Roland encontró en la Estación de Paso en las páginas de El Pistolero. De la mano de Jack (vestido completamente de negro, ¿una ironía de Marten?), Roland debe hacer frente a nuestro mundo, pero sin apenas pretenderlo provoca una paradoja, ya que evita que Mort arroje ante el coche que le iba a atropellar a Jake, el chico de la Estación de Paso, lo que tendrá repercusiones en el futuro de la saga.
Y sin embargo, Jack Mort no es el peor enemigo de Roland, pues la serpiente, el auténtico peligro se encuentra entre ellos…
Que difícil es hablar de estos libros sin hacer spoiler, por Dios.
En La Llegada de los Tres King repite el estilo que tanto éxito le diera en El Pistolero. Tajante, cortante, sencillo, casi brusco en algunos momentos. Nos revela algunos detalles más de la historia de Roland, los suficientes para que el Pistolero se convierta en un personaje cada vez más interesante, a la vez que dirige los focos hacia los que serán sus compañero, su ka-tet. Sabemos más cosas sobre el pasado del Pistolero, sobre cómo era el mundo antes de moverse, aunque apenas son retazos. La Llegada de los Tres, realmente, supone una introducción, un preludio a lo que va a venir a partir del siguiente tomo, Las Tierras Baldías, donde realmente comienza el viaje de Roland y su ka-tet hacia la Torre Oscura… aunque aún no sabemos cuales son los propósitos que llevan allí al Pistolero…
1 comentario:
En definitiva es un placer leer la seccion de tu post destinada a la torre, magestuosos los recuerdos que tengo de cuando leí la colección, me haces recordar cada letra del libro.. gracias, sigue así.
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