INFERNO

 

X-Men: Inferno Omnibus by Louise Simonson
My rating: 5 of 5 stars

Hay historias que están hechas para determinados momentos de nuestra vida. Los libros de nuestra infancia, los que marcaron nuestra adolescencia, la primera novela con la que lloramos o el primer cuento con el que nos estremecemos. Y luego hay historias que están ahí, para siempre, y que son como una vuelta a casa. Y para mí, Inferno es uno de estos lugares. ¿Por qué? Pues... a saber. Leí algunos números de Inferno allá por el 88/89 (cuando se publicó en España por Forum), no todos, porque me enganché tarde a la serie, allá por la mitad, y recuerdo que aparecí en uno de los números de X-Terminadores, con unos personajes que ni conocía, pero con una historia que me dejó bastante enganchado, así que al mes siguiente volví a la papelería y cogí el siguiente, y así me hice más o menos con casi toda la segunda mitad de Inferno. Con el paso de los años y el coleccionable de la Patrulla-X conseguí todos los números de X-Men y X-Factor relacionados con la saga, pero la parte de X-Terminadores y Nuevos Mutantes se había quedado fuera... Así que cuando hace poco vi que había salido un Omnibus, pues nada, después de un par de vueltas lo compré y lo he devorado. Y me ha parecido tan buena como siempre.

Para cuando se publicó Inferno, había bastante jaleo acumulado en los X-Men, especialmente con las figuras de Jean Grey y Madelyne Pryor. Es decir, Chris Claremont y John Byrne habían convertido a Jean Grey en Fénix, y luego la editorial les había obligado a matarla (en una de las mejores historias que se ha escrito nunca, todo sea dicho). Posteriormente, Claremont había creado a Madelyne Pryor, una mujer que era virtualmente idéntica a Jean Grey y de la que Cíclope se terminó enamorando y con la que se casó y fue padre, pero de nuevo en un giro editorial, Marvel decidió resucitar a Jean Grey, manteniendo que Jean nunca había sido Fénix sino que había permanecido en éxtasis todo ese tiempo, y Fénix, una entidad independiente, la había sustituido. Eso daba al traste con los planes que Claremont pudiera tener para Madelyne Pryor, pero a la vez, generaba una tensión más que interesante. Cíclope había abandonado a sus compañeros y a su mujer cuando Jean Grey había vuelto a la vida, y los miembros originales de la Patrulla-X se habían unido formando Factor-X. Inferno sería el lugar donde estos argumentos colisionarían y se desarrollarían, pero la figura de Jean Grey/Fénix/Madelyne Pryor no sería la única protagonista de Inferno. Illyana Rasputin, la hermana de Coloso, había sido un personaje que, quizá siguiendo la estela de la propia Jean Grey, se había ido convirtiendo cada vez más en una criatura malvada. Siendo una niña, Illyana había sido raptada y llevada al Limbo por el demonio Belasco, que la educó como su aprendiz, enseñándole la magia oscura; Illyana volvió al mundo convertida en una adolescente y se unió a los Nuevos Mutantes como Magik, habiendo sustituido a Belasco como reina del Limbo y de todos sus demonios. Y poco a poco, Illyana se había ido convirtiendo cada vez más en una demoniaca Niña Oscura. A través del demoniaco N'Astirh, ambas historias se entrelazarán, ya que el demonio manipulará a Madelyne Pryor para convertirla en su Reina Duende, y a Illyana para transformarla definitivamente en la Niña Oscura y volcar el Limbo sobre la Tierra. Y así tenemos la historia: millares de demonios volcándose sobre una Manhattan enloquecida y en la que las papeleras se comen a la gente, y cuatro grupo de mutantes intentando solucionar la papeleta, o al menos parte de ella. Sí, cuatro, porque además de en Patrulla-X, Factor-X y Nuevos Mutantes, la historia principal se desarrolló en una cuarta serie, X-Terminadores, protagonizada por los chavales que Factor-X había salvado de los enemigos de los mutantes, y que se convertían así en el punto de equilibrio, en una especia de Nuevos Mutantes de Factor-X.

Con todo esto sobre la mesa, Inferno es una maravillosa historia de estilo clásico, de cuando los cómics contaban muchas cosas en pocas páginas, un trabajo genial de Chris Claremont (Patrulla-X) y Louise Simonson (en las otras tres colecciones), y con dibujos de John Bogdanove (X-Terminadores), Walter Simonson (Factor-X), Brett Blevins (Nuevos Mutantes) y un maravilloso, impresionante y magistral Marc Silvestri en Patrulla-X.

Y no me queda mucho más que decir, es maravillosa.

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