LUCIFER: LA ELECCIÓN DE LA ESTRELLA DE LA MAÑANA

 

The Sandman Presenta: Lucifer by Mike Carey
My rating: 4 of 5 stars

Uno de los proyectos más ambiciosos y duraderos que surgieron de The Sandman fue sin duda la colección Lucifer, y podríamos decir que este fue su prólogo, o su capítulo piloto, por así decirlo. Sin duda, Lucifer había sido uno de los personajes más llamativos que habían participado en The Sandman, el rey del infierno que había abandonado sus dominios para trasladarse a San Francisco y convertirse en el dueño y pianista de un bar irónicamente conocido como Lux, junto a la Lilim Mazikeen. Y haciendo esto, Neil Gaiman había desafiado una de las convenciones del género... o de todos los géneros más bien: jugar con el diablo. Lucifer no es un protagonista habitual, no lo es ni aún hoy en día, y cuando los diablos han aparecido en cómics y películas siempre han sido adversarios, enemigos, los malos de la película, bien de un modo llamativo y rodeado de fuego como en el caso de los demonios de Marvel, o terrorífico, como en todas las películas de terror surgidas desde La Profecía o El Exorcista. Pero Gaiman había hecho algo distinto, y Mike Carey iba a continuar allí donde Gaiman lo dejó, con el demonio convertido en un pianista de San Francisco.

Así que en este Sandman Presenta: Lucifer (publicado en Estados Unidos como Lucifer: The Morningstar Option), vamos a ver como uno de los ángeles, Amenadiel, se reúne con Lucifer para encargarle una misión: hay una entidad en la Tierra que está concediendo deseos de forma arbitraria, y aunque el Cielo está interesado en saber qué ocurre, no quiere implicarse directamente, por lo que recurre a Lucifer como agente libre y a cualquier precio, por lo que Lucifer reclamará una Carta de Paso que le permita acceder a una especie de "dimensión alternativa". Con este punto de partida, vamos a ver como Lucifer busca información entre los Lilim o en el propio infierno (con una nueva aparición de Remiel y Duma, los ángeles tutelares del Infierno), lo que nos va a permitir familiarizarnos con la peculiar forma de actuar de Lucifer Estrella de la Mañana; y mientras, vamos a conocer a la familia de Rachel Begai, una chica medio navajo que vive junto a su padre y su hermano Paul. Paul sufre una enfermedad que le impide hablar o reaccionar y que básicamente lo conviere en un vegetal balbuceante, y de alguna manera, parece que la entidad que concede deseos se ha pegado a Paul, lo que va a hacer que el camino de Rachel y el de Lucifer se unan en una búsqueda chamánica para descender por los mundos de los mitos navajos hasta el primer mundo, donde yacen las sombras... Pero, ¿es la Estrella de la Mañana un aliado en el que poder confiar?

Es evidente que Carey no nos va a presentar un personaje heróico, y creo que supo darle a Lucifer un tomo de antihéroe que sin duda colaboró en que la colección durara tanto como lo hizo, permitiendo al guionista contar su historia completa, que comenzaría en el número 1 de la serie regular, con el arco Seis Cartas sobre la Mesa. En este prólogo, Carey va a estar acompañado por un más que impresionante Scott Hampton, que ilustra con lo que parecen ser acuarelas, dando un tono muy especial a la narrativa de Carey y nos deja ver a un Lucifer a la par siniestro y seductor, con un estilo muy propio.

Lucifer, junto con Sandman, es una de mis historias favoritas del mundo del cómic, así que de aquí en adelante, preparaos para escuchar muchas palabras de alabanza al trabajo de Carey y los dibujantes que le acompañaron en esta historia.

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