52 Aftermath: The Four Horsemen by Keith Giffen
My rating: 3 of 5 stars
Dentro de las múltiples tramas de la saga 52, una de las historias más interesantes era la que incluía a los científicos locos de la Isla de Oolong y como sus diferentes habilidades servían para crear a los Cuatro Jinetes de Apokolips. Pero 52 era, sobre todo, un año sin Superman, Batman y Wonder Woman, y ahora había llegado el momento de que la Trinidad se las viera con los Cuatro Jinetes, para lo cual se recurrió al experimentado guionista Keith Giffen y a un dibujante competente, Pat Oliffe, que crearon una miniserie en la que podíamos asistir al regreso de los Cuatro Jinetes a la nación de Bialya, devastada tras el ataque sufrido por Black Adam en 52. Convertidos esta vez en la versión "terrana" de los Cuatro Jinetes de Apokolips, estos seres tratarán de vengarse de los héroes de la Tierra... y también de su creadora, la doctora Verónica Cale, convertida ahora en presidenta de la Isla-Nación de Oolong.
La verdad es que este tomo tampoco tiene mucho más, es una historia autoconclusiva que realmente no aporta nada nuevo ni es excesivamente original, pero que cumple con su función básica, que es hacer que el lector pase un rato entretenido, y eso lo consigue.
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No es la crónica de un mundo... es la historia de muchos.
lunes, 30 de diciembre de 2019
viernes, 27 de diciembre de 2019
LA BATALLA POR BLUDHAVEN
Infinite Crisis Aftermath: The Battle for Blüdhaven by Justin Gray
My rating: 2 of 5 stars
Esto sí que ha sido curioso, y un poco jarro de agua fría. Recordaba con mucho entusiasmo este tomo, pero la relectura...
Pongámonos en antecedentes. La Batalla por Bludhaven tiene lugar un año después de los sucesos de Crisis Infinita, y vuelve a uno de los escenarios de la crisis, concretamente a la ciudad que le da título, Bludhaven, la ciudad vecina de Gotham que normalmente había sido el feudo de Nightwing. Durante la Crisis, la Sociedad de Supervillanos liderada por Alexander Luthor lanzó a Chemo, un villano químico y gigantesco como una bomba sucia sobre la ciudad, destruyendo buena parte de esta y haciendo inhabitable el resto. Los Titanes estuvieron intentando ayudar a los ciudadanos, pero en este tomo descubrimos que fueron relevados por un equipo gubernamental que se hace llamar El Anillo de la Libertad. Así que los Titanes se fueron... y durante un año, Bludhaven ha continuado aislada del resto del mundo con la amenaza de que el interior está contaminado por la radiación... pero la fuente debe ser otra, pues Chemo era un villano químico, no radioactivo...
Así que en La Batalla por Bludhaven vamos a ver qué es lo que ocurre en la ciudad, donde van a coincidir los intereses de varios grupos: el gobierno de los Estados Unidos, representado por Padre Tiempo, el Anillo de la Libertad y la agencia SHADE; por otro lado, la Sociedad de Supervillanos (con un nuevo líder que no aparece aún pero que irá teniendo importancia de cara a Crisis Final), que ha enviado a la Legión Nuclear a averiguar cual es la fuente de radiación; y a los Caballeros Atómicos, un misterioso grupo armado con tecnología extraterrestre, y que quieren contener la radiación de la ciudad. A estos, hay que añadir otros intereses, como los propios ciudadanos de Bludhaven, exiliados de su ciudad y dirigidos por un nuevo y contestatario Firebrand, los Jóvenes Titanes o Hal Jordan.
Justin Gray, Jimmy Palmiotti y Dan Jurgens son los encargados de contar la historia de Bludhaven, y como he dicho antes, en su momento esta historia me entusiasmó, pero a día de hoy, me ha dejado mucho más frío que entonces. La narrativa me ha parecido un poco floja, y quizá después de muchos años leyendo cómics "contestatarios", a día de hoy me parece mucho menos original... aunque hay momentos absolutamente geniales, todo sea dicho, especialmente lo relacionado con un héroe desaparecido que vuelve y la armadura de Monarca... un guiño a un viejo argumento truncado en DC...
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My rating: 2 of 5 stars
Esto sí que ha sido curioso, y un poco jarro de agua fría. Recordaba con mucho entusiasmo este tomo, pero la relectura...
Pongámonos en antecedentes. La Batalla por Bludhaven tiene lugar un año después de los sucesos de Crisis Infinita, y vuelve a uno de los escenarios de la crisis, concretamente a la ciudad que le da título, Bludhaven, la ciudad vecina de Gotham que normalmente había sido el feudo de Nightwing. Durante la Crisis, la Sociedad de Supervillanos liderada por Alexander Luthor lanzó a Chemo, un villano químico y gigantesco como una bomba sucia sobre la ciudad, destruyendo buena parte de esta y haciendo inhabitable el resto. Los Titanes estuvieron intentando ayudar a los ciudadanos, pero en este tomo descubrimos que fueron relevados por un equipo gubernamental que se hace llamar El Anillo de la Libertad. Así que los Titanes se fueron... y durante un año, Bludhaven ha continuado aislada del resto del mundo con la amenaza de que el interior está contaminado por la radiación... pero la fuente debe ser otra, pues Chemo era un villano químico, no radioactivo...
Así que en La Batalla por Bludhaven vamos a ver qué es lo que ocurre en la ciudad, donde van a coincidir los intereses de varios grupos: el gobierno de los Estados Unidos, representado por Padre Tiempo, el Anillo de la Libertad y la agencia SHADE; por otro lado, la Sociedad de Supervillanos (con un nuevo líder que no aparece aún pero que irá teniendo importancia de cara a Crisis Final), que ha enviado a la Legión Nuclear a averiguar cual es la fuente de radiación; y a los Caballeros Atómicos, un misterioso grupo armado con tecnología extraterrestre, y que quieren contener la radiación de la ciudad. A estos, hay que añadir otros intereses, como los propios ciudadanos de Bludhaven, exiliados de su ciudad y dirigidos por un nuevo y contestatario Firebrand, los Jóvenes Titanes o Hal Jordan.
Justin Gray, Jimmy Palmiotti y Dan Jurgens son los encargados de contar la historia de Bludhaven, y como he dicho antes, en su momento esta historia me entusiasmó, pero a día de hoy, me ha dejado mucho más frío que entonces. La narrativa me ha parecido un poco floja, y quizá después de muchos años leyendo cómics "contestatarios", a día de hoy me parece mucho menos original... aunque hay momentos absolutamente geniales, todo sea dicho, especialmente lo relacionado con un héroe desaparecido que vuelve y la armadura de Monarca... un guiño a un viejo argumento truncado en DC...
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jueves, 26 de diciembre de 2019
WE3
We3 by Grant Morrison
My rating: 3 of 5 stars
No me canso de decir lo contento que estoy por la Biblioteca Grant Morrison que está publicando ECC, que me está dando la oportunidad de releer algunas cosas y de descubrir trabajos suyos que aún no había leído, y este último caso es el de WE3, a pesar de que soy consciente de que es una de las obras más famosas de este autor.
Y desde luego, es muy original. WE3 es un equipo de animales entrenados especialmente por el Ejército de Estados Unidos para misiones de alto peligro, un perro, un gato y un conejo metidos en armaduras robóticas y que se comunican hablando con un vocabulario muy sencillo. Los WE3 son utilizados para misiones encubiertas mientras se desarrollan nuevos animales, como el Número 4 o un ejército de ratas que dan auténtico miedo. Pero la evolución de estos nuevos proyectos lleva a que desde el gobierno se retire a los WE3, y su creadora, que no está demasiado dispuesta, permite que se escapen, de modo que el argumento central del cómic es la huída de los WE3 de sus perseguidores.
Impresionantemente dibujado por uno de los colaboradores habituales de Morrison, el dibujante Frank Quitely, WE3 tiene algunas páginas que son auténtica magia, y el propio tomo hace hincapié en ellas incluyendo bocetos y comentarios de los autores sobre la secuencia de apertura, por ejemplo, o la escena de la huída de los WE3 que reúne más de cien viñetas en unas cuatro páginas que se corresponden a diferentes tomas de las cámaras de seguridad del centro militar. Y sin embargo, aún con todo esto a favor, la historia se queda un poquito escasa, muy lejos de sus auténticas obras maestras (quizá es que el tomo anterior, Animal Man, deja el listón muy alto), pero aún así, es una auténtica joya.
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My rating: 3 of 5 stars
No me canso de decir lo contento que estoy por la Biblioteca Grant Morrison que está publicando ECC, que me está dando la oportunidad de releer algunas cosas y de descubrir trabajos suyos que aún no había leído, y este último caso es el de WE3, a pesar de que soy consciente de que es una de las obras más famosas de este autor.
Y desde luego, es muy original. WE3 es un equipo de animales entrenados especialmente por el Ejército de Estados Unidos para misiones de alto peligro, un perro, un gato y un conejo metidos en armaduras robóticas y que se comunican hablando con un vocabulario muy sencillo. Los WE3 son utilizados para misiones encubiertas mientras se desarrollan nuevos animales, como el Número 4 o un ejército de ratas que dan auténtico miedo. Pero la evolución de estos nuevos proyectos lleva a que desde el gobierno se retire a los WE3, y su creadora, que no está demasiado dispuesta, permite que se escapen, de modo que el argumento central del cómic es la huída de los WE3 de sus perseguidores.
Impresionantemente dibujado por uno de los colaboradores habituales de Morrison, el dibujante Frank Quitely, WE3 tiene algunas páginas que son auténtica magia, y el propio tomo hace hincapié en ellas incluyendo bocetos y comentarios de los autores sobre la secuencia de apertura, por ejemplo, o la escena de la huída de los WE3 que reúne más de cien viñetas en unas cuatro páginas que se corresponden a diferentes tomas de las cámaras de seguridad del centro militar. Y sin embargo, aún con todo esto a favor, la historia se queda un poquito escasa, muy lejos de sus auténticas obras maestras (quizá es que el tomo anterior, Animal Man, deja el listón muy alto), pero aún así, es una auténtica joya.
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miércoles, 25 de diciembre de 2019
JLA: CRISIS DE CONCIENCIA
JLA, Vol. 18: Crisis of Conscience by Geoff Johns
My rating: 4 of 5 stars
Con Crisis de Conciencia, Liga de la Justicia se incorporaba al devenir de todo el Universo DC, cubriendo el tiempo entre Crisis de Identidad y Crisis Infinita, como parte de los pasos que se denominaron "Camino a Crisis Infinita", y el mismo Geoff Johns se incorporó de desarrollar esta historia, basándose en lo narrado por Brad Meltzer en Crisis de Identidad.
En Crisis de Identidad, habíamos visto como el asesinato de Sue Dibny, la mujer del Hombre Elástico, revelaba una serie de episodios oscuros en el pasado de la Liga, en los que después de que Sue fuera violada por el Doctor Luz, los miembros de la Liga de aquel entonces habían decidido que Zatanna borrara los recuerdos de varios villanos, entre ellos Luz y la Sociedad de la Injusticia. Pero también a Batman cuando había descubierto lo que habían hecho. Aunque finalmente ni Luz ni la Sociedad de la Injusticia había tenido nada que ver en la muerte de Sue Dibny, una brecha se había abierto en la JLA, y en Crisis de Conciencia es donde se desarrollaría, de forma simultánea a otros eventos de DC, como Sacrificio, donde podemos ver un enfrentamiento entre un Superman dominado por Maxwell Lord contra Batman y Wonder Woman, y como tras matar a Lord, Wonder Woman había abandonado la Liga de la Justicia.
Así que la Liga que tenemos en Crisis de Conciencia no es la que habíamos dejado en el tomo anterior: el regresado Hal Jordan, Flash, Flecha Verde, Hawkman, Zatanna, Superman, Batman y J'onn J'onzz tienen que hacer frente a los pecados del pasado de la Liga cuando alguien devuelve a la Sociedad de la Injusticia sus recuerdos robados y estos deciden hacer lo que habían planeado hacer tanto tiempo atrás: atacar a la Liga a través de sus seres queridos, convirtiendo en objetivos a Lois Lane, Linda West-Park, Tim Drake y otros familiares y amigos de los miembros de la Liga... al tiempo que tienen que hacer frente a un profundo conflicto entre ellos, y al responsable de devolver a la actividad a la Sociedad de la Injusticia,
Aunque no carece de momentos épicos en el enfrentamiento entre la Liga y la Sociedad, Crisis de Conciencia es sobre todo un relato sobre la desconfianza, y los enfrentamientos que saltan a primera línea son los internos en la Liga, no sólo físicos sino también verbales y de principios, y sobre todo, con Crisis de Conciencia el propio concepto de la Liga de la Justicia queda herido de muerte. .........
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My rating: 4 of 5 stars
Con Crisis de Conciencia, Liga de la Justicia se incorporaba al devenir de todo el Universo DC, cubriendo el tiempo entre Crisis de Identidad y Crisis Infinita, como parte de los pasos que se denominaron "Camino a Crisis Infinita", y el mismo Geoff Johns se incorporó de desarrollar esta historia, basándose en lo narrado por Brad Meltzer en Crisis de Identidad.
En Crisis de Identidad, habíamos visto como el asesinato de Sue Dibny, la mujer del Hombre Elástico, revelaba una serie de episodios oscuros en el pasado de la Liga, en los que después de que Sue fuera violada por el Doctor Luz, los miembros de la Liga de aquel entonces habían decidido que Zatanna borrara los recuerdos de varios villanos, entre ellos Luz y la Sociedad de la Injusticia. Pero también a Batman cuando había descubierto lo que habían hecho. Aunque finalmente ni Luz ni la Sociedad de la Injusticia había tenido nada que ver en la muerte de Sue Dibny, una brecha se había abierto en la JLA, y en Crisis de Conciencia es donde se desarrollaría, de forma simultánea a otros eventos de DC, como Sacrificio, donde podemos ver un enfrentamiento entre un Superman dominado por Maxwell Lord contra Batman y Wonder Woman, y como tras matar a Lord, Wonder Woman había abandonado la Liga de la Justicia.
Así que la Liga que tenemos en Crisis de Conciencia no es la que habíamos dejado en el tomo anterior: el regresado Hal Jordan, Flash, Flecha Verde, Hawkman, Zatanna, Superman, Batman y J'onn J'onzz tienen que hacer frente a los pecados del pasado de la Liga cuando alguien devuelve a la Sociedad de la Injusticia sus recuerdos robados y estos deciden hacer lo que habían planeado hacer tanto tiempo atrás: atacar a la Liga a través de sus seres queridos, convirtiendo en objetivos a Lois Lane, Linda West-Park, Tim Drake y otros familiares y amigos de los miembros de la Liga... al tiempo que tienen que hacer frente a un profundo conflicto entre ellos, y al responsable de devolver a la actividad a la Sociedad de la Injusticia,
Aunque no carece de momentos épicos en el enfrentamiento entre la Liga y la Sociedad, Crisis de Conciencia es sobre todo un relato sobre la desconfianza, y los enfrentamientos que saltan a primera línea son los internos en la Liga, no sólo físicos sino también verbales y de principios, y sobre todo, con Crisis de Conciencia el propio concepto de la Liga de la Justicia queda herido de muerte. .........
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lunes, 23 de diciembre de 2019
IT
It by Stephen King
My rating: 5 of 5 stars
Bueno, a raíz de ver las nuevas películas, decidí que había llegado el momento de hacer otra visita al universo literario de Stephen King. Y el resultado ha sido muy positivo. Había leído ya It hace como... no sé, veinticinco años, creo que estaba en el instituto, y lo recordaba con una sensación agridulce. A ver, la idea de Pennywise, el payaso asesino y psicópata con poderes siniestros, me pareció muy interesante, y daba auténtico miedo. La realidad tras el payaso... en fin, me dejó un poco frío y fue responsable de una impresión que he mantenido con el paso de los años con muchas novelas de Stephen King, la de que tiene grandes ideas pero unos finales nefastos.
A día de hoy, no sé si será una cuestión de edad, o de criterio, o de a saber qué, pero la novela me ha gustado mucho más, sobre todo porque he visto lo bien que es capaz King de caracterizar a sus personajes, de darles trasfondo y personalidad. Incluso con los niños, los auténticos protagonistas de It, donde podría haber caído en tópicos y clichés, King es capaz de darles a cada uno de los Perdedores su personalidad, siendo posible en muchas ocasiones saber quien está hablando incluso sin indicaciones, sólo por las expresiones que utilizan.
La trama de It comienza con una escena escalofriante, cuando el pequeño Georgie corre con su impermeable amarillo bajo la lluvia detrás de un barco de papel parafinado que le ha hecho su hermano Bill. En su carrera, Georgie está a punto de perder el barco por una alcantarilla, y es allí donde se encuentra con Pennywise, el Payaso Bailarín. El encuentro le cuesta la vida a Georgie, pero es sólo uno de los muchos niños que irán muriendo en Derry ese verano, mientras un grupo de siete niños, los Perdedores, comienzan a reunirse empujados quizá por una fuerza mayor que ellos, y a averiguar la verdad tras Pennywise y todo lo que ocurre en Derry. Bill, Beverly, Ben, Richie, Eddie, Stan y Mike irán descubriendo poco a poco una historia siniestra que se encuentra en la propia savia de Derry, una oscuridad que lo llena todo a su alrededor... y que amenaza con devorarlo todo si ellos, siete niños desesperados, no son capaces de impedirlo...
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My rating: 5 of 5 stars
Bueno, a raíz de ver las nuevas películas, decidí que había llegado el momento de hacer otra visita al universo literario de Stephen King. Y el resultado ha sido muy positivo. Había leído ya It hace como... no sé, veinticinco años, creo que estaba en el instituto, y lo recordaba con una sensación agridulce. A ver, la idea de Pennywise, el payaso asesino y psicópata con poderes siniestros, me pareció muy interesante, y daba auténtico miedo. La realidad tras el payaso... en fin, me dejó un poco frío y fue responsable de una impresión que he mantenido con el paso de los años con muchas novelas de Stephen King, la de que tiene grandes ideas pero unos finales nefastos.
A día de hoy, no sé si será una cuestión de edad, o de criterio, o de a saber qué, pero la novela me ha gustado mucho más, sobre todo porque he visto lo bien que es capaz King de caracterizar a sus personajes, de darles trasfondo y personalidad. Incluso con los niños, los auténticos protagonistas de It, donde podría haber caído en tópicos y clichés, King es capaz de darles a cada uno de los Perdedores su personalidad, siendo posible en muchas ocasiones saber quien está hablando incluso sin indicaciones, sólo por las expresiones que utilizan.
La trama de It comienza con una escena escalofriante, cuando el pequeño Georgie corre con su impermeable amarillo bajo la lluvia detrás de un barco de papel parafinado que le ha hecho su hermano Bill. En su carrera, Georgie está a punto de perder el barco por una alcantarilla, y es allí donde se encuentra con Pennywise, el Payaso Bailarín. El encuentro le cuesta la vida a Georgie, pero es sólo uno de los muchos niños que irán muriendo en Derry ese verano, mientras un grupo de siete niños, los Perdedores, comienzan a reunirse empujados quizá por una fuerza mayor que ellos, y a averiguar la verdad tras Pennywise y todo lo que ocurre en Derry. Bill, Beverly, Ben, Richie, Eddie, Stan y Mike irán descubriendo poco a poco una historia siniestra que se encuentra en la propia savia de Derry, una oscuridad que lo llena todo a su alrededor... y que amenaza con devorarlo todo si ellos, siete niños desesperados, no son capaces de impedirlo...
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JLA DE KURT BUSIEK: LAS NORMAS DEL SINDICATO
JLA, Vol. 17: Syndicate Rules by Kurt Busiek
My rating: 3 of 5 stars
Seguimos con el repaso a JLA y sus arcos anteriores a Crisis Infinita, y ahora ha llegado el turno al arco que escribió uno de los guionistas más solventes de los últimos 90 y los primeros años del siglo XXI, Kurt Busiek. En unos años en los que los guiones eran bastante bluff debido a la época Image, la crisis creativa y esas cosas, Busiek había sabido mantener una línea muy interesante en Marvel, en los Thunderbolts, y luego guionizó una de las etapas más largas e interesantes que han tenido los Vengadores, hasta el punto de que cuando DC y Marvel llegaron a ese épico acuerdo que permitió la publicación de la serie limitada JLA/Vengadores, se decidió que fuera Kurt Busiek quien dirigiera el esperado evento.
Así que cuando se puso en sus manos a la Liga de la Justicia, Busiek decidió recuperar los eventos de dicha serie limitada, y continuarlos haciendo uso de una de las reinvenciones más llamativas que Grant Morrison había llevado a cabo (aunque no dentro de la serie oficial), el Sindicato del Crimen de Amérika, la versión siniestra y malvada de la Liga de la Justicia procedente del Universo de Antimateria. A consecuencia de los eventos de JLA/Vengadores, el universo DC había sufrido varios cambios, y al descubrir esto, los miembros del Sindicato deciden investigar en el Universo de Materia Positiva, haciéndose pasar por sus contrapartidas de la Liga.
Pero al mismo tiempo, estas alteraciones son detectadas también el Qward, el planeta de los Armeros, la réplica de Oa en el universo de Materia Negativa, y un nuevo Sumoseñor de los Armeros se lanza a la búsqueda de los responsables, enviando un arma capaz de destruir planetas enteros contra la Tierra.
Con este planteamiento, Busiek narra una historia que adolece de los mismos problemas que todos los arcos de "relleno" que completaron el espacio entre la etapa Kelly y Crisis Infinita, la falta de continuidad. Sin duda Busiek, que habría reinventado a los propios Vengadores, podría haber creado todo un nuevo mundo para la JLA, pero las decisiones de la editorial mandaban, y el siguiente arco ya sería Crisis de Conciencia, con guión de Geoff Johns y donde se verían las consecuencias de Crisis de Identidad, la historia de Brad Meltzer que vendría a reestructurar todo el Universo DC.
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My rating: 3 of 5 stars
Seguimos con el repaso a JLA y sus arcos anteriores a Crisis Infinita, y ahora ha llegado el turno al arco que escribió uno de los guionistas más solventes de los últimos 90 y los primeros años del siglo XXI, Kurt Busiek. En unos años en los que los guiones eran bastante bluff debido a la época Image, la crisis creativa y esas cosas, Busiek había sabido mantener una línea muy interesante en Marvel, en los Thunderbolts, y luego guionizó una de las etapas más largas e interesantes que han tenido los Vengadores, hasta el punto de que cuando DC y Marvel llegaron a ese épico acuerdo que permitió la publicación de la serie limitada JLA/Vengadores, se decidió que fuera Kurt Busiek quien dirigiera el esperado evento.
Así que cuando se puso en sus manos a la Liga de la Justicia, Busiek decidió recuperar los eventos de dicha serie limitada, y continuarlos haciendo uso de una de las reinvenciones más llamativas que Grant Morrison había llevado a cabo (aunque no dentro de la serie oficial), el Sindicato del Crimen de Amérika, la versión siniestra y malvada de la Liga de la Justicia procedente del Universo de Antimateria. A consecuencia de los eventos de JLA/Vengadores, el universo DC había sufrido varios cambios, y al descubrir esto, los miembros del Sindicato deciden investigar en el Universo de Materia Positiva, haciéndose pasar por sus contrapartidas de la Liga.
Pero al mismo tiempo, estas alteraciones son detectadas también el Qward, el planeta de los Armeros, la réplica de Oa en el universo de Materia Negativa, y un nuevo Sumoseñor de los Armeros se lanza a la búsqueda de los responsables, enviando un arma capaz de destruir planetas enteros contra la Tierra.
Con este planteamiento, Busiek narra una historia que adolece de los mismos problemas que todos los arcos de "relleno" que completaron el espacio entre la etapa Kelly y Crisis Infinita, la falta de continuidad. Sin duda Busiek, que habría reinventado a los propios Vengadores, podría haber creado todo un nuevo mundo para la JLA, pero las decisiones de la editorial mandaban, y el siguiente arco ya sería Crisis de Conciencia, con guión de Geoff Johns y donde se verían las consecuencias de Crisis de Identidad, la historia de Brad Meltzer que vendría a reestructurar todo el Universo DC.
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domingo, 22 de diciembre de 2019
JLA DE CHUCK AUSTEN: EL DOLOR DE LOS DIOSES
JLA, Vol. 16: Pain of the Gods by Chuck Austen
My rating: 4 of 5 stars
El final de las sucesivas etapas de JLA y la cercanía de Crisis de Identidad y todo el camino que llevaría a la Crisis Infinita orquestada por Geoff Johns, ponía JLA en una situación extraña, ya que ningún guionista podía desarrollar arcos largos, lo que fue llevando a una superposición de interinidades pero manteniendo autores de renombre al frente de la colección. Y ese sería el caso de El Dolor de los Dioses, un arco con guiones de Chuck Austen y dibujo de Ron Garney que supone un giro radical en las tramas que hasta este momento y desde el primer número de Grant Morrison se venían dando en la serie.
Y es que Austen se aleja del tono cósmico y épico de la JLA para construir una historia intimista donde podemos asistir a los momentos más duros y emocionales del equipo, donde podemos ver la fragilidad interior de cada uno de sus oponentes principales. Dedicando un episodio a cada héroe y con una metatrama que comienza cuando un error de Superman provoca la muerte de un superhéroe desconocido, El Dolor de los Dioses se adentra en las dudas, los miedos, los traumas y las responsabilidades de estos dioses modernos que son Superman, Wonder Woman, Batman, Flash, Green Lantern y el Detective Marciano, y lo hace de una forma realmente interesante y bien contada donde Chuck Austen demuestra que es un auténtico especialista en este tipo de historias, con una gran capacidad para humanizar a personajes tan distantes como pueden ser Superman o J'onn J'onzz.
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My rating: 4 of 5 stars
El final de las sucesivas etapas de JLA y la cercanía de Crisis de Identidad y todo el camino que llevaría a la Crisis Infinita orquestada por Geoff Johns, ponía JLA en una situación extraña, ya que ningún guionista podía desarrollar arcos largos, lo que fue llevando a una superposición de interinidades pero manteniendo autores de renombre al frente de la colección. Y ese sería el caso de El Dolor de los Dioses, un arco con guiones de Chuck Austen y dibujo de Ron Garney que supone un giro radical en las tramas que hasta este momento y desde el primer número de Grant Morrison se venían dando en la serie.
Y es que Austen se aleja del tono cósmico y épico de la JLA para construir una historia intimista donde podemos asistir a los momentos más duros y emocionales del equipo, donde podemos ver la fragilidad interior de cada uno de sus oponentes principales. Dedicando un episodio a cada héroe y con una metatrama que comienza cuando un error de Superman provoca la muerte de un superhéroe desconocido, El Dolor de los Dioses se adentra en las dudas, los miedos, los traumas y las responsabilidades de estos dioses modernos que son Superman, Wonder Woman, Batman, Flash, Green Lantern y el Detective Marciano, y lo hace de una forma realmente interesante y bien contada donde Chuck Austen demuestra que es un auténtico especialista en este tipo de historias, con una gran capacidad para humanizar a personajes tan distantes como pueden ser Superman o J'onn J'onzz.
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jueves, 19 de diciembre de 2019
JLA DE CLAREMONT Y BYRNE: EL DÉCIMO CÍRCULO
JLA, Vol. 15: The Tenth Circle by John Byrne
My rating: 3 of 5 stars
Después del final de la etapa Kelly en JLA, llegaba el momento de los clásicos. Y en el tomo El Décimo Círculo vamos a encontrar muchos nombres clásicos. El primero, Dennis O'Neil, se encargaría de un arco corto de tres partes llamado Extinción, acompañado por los lápices de Tang Eng Huat (que a mi me gusta lo justo, básicamente nada). Dennis O'Neil es una de las figuras más importantes del cómic de los años setenta, innovador al incluir en sus colecciones (estuvo a cargo de Green Lantern/Green Arrow, por ejemplo) temas sociales y políticos, y llegó a JLA con ese mismo espíritu, innovador a pesar de los años, y con carga social, sobre toco ecológica. En Extinción, una inteligencia extraterrestre que responde al nombre de Peppy (en fin...), llega a la Tierra esperando encontrar que esta, según se había escrito milenios atrás en su libro sagrado, el libro de Lol, estaría bajo el dominio de los monos de máscara plateada. Sorprendido, Peppy, en compañía de la Liga de la Justicia, asiste al dominio de la especie humana, a todo lo que esta está haciendo en el planeta... y al hecho de ser el último de su especie, elemento que comparte con J'onn J'onnz y con el propio Superman. Con un dibujo que no le hace justicia, Dennis O'Neil consigue una historia muy clásica e interesante...
Que da paso a uno de los tándem creativos más importantes del mundo del cómic. De todas las eras, da igual Cuando uno habla de Chris Claremont y John Byrne (y encima les ayuda Gerry Conway) estamos hablando de historia. Las sagas más épicas de la Patrulla-X fueron obra de este tándem, podríamos decir que juntos o por separado han participado de toda la historia de Marvel: La Patrulla-X, los Cuatro Fantásticos, los Vengadores, Alpha Flight... Todo. Y Byrne se había encargado también de Superman después de Crisis en Tierras Infinitas, reformulando todo el mundo del primer superhéroe, desde Krypton a su primer encuentro con Batman, sus relaciones, Smallville... Todo. Y volvieron a reunirse para El Décimo Círculo, un arco que cubriría la última media docena de números antes del 100 de la nueva encarnación de la JLA. En El Décimo Círculo, la JLA y la nueva encarnación de la Patrulla Condenada, tienen que hacer frente a una historia clásica de vampiros y sectas, donde el enemigo es una criatura poderosa conocida como El Crucificador, un vampiro clásico, de los de cruces y estacas, que consigue hacerse con el control de pesos pesados, como Superman o Fe. Byrne y Claremont (y Conway) hacen un trabajo clásico: épico, lleno de diálogos, de pensamientos, en el mejor estilo de los ochenta, y sabiendo que Claremont es un monstruo de la continuidad, hubiera sido muy interesante verle en una distancia larga, con más posibilidades para trabajar con todos estos personajes...
Pero llegaba el número 100, y para él, volvían Joe Kelly y Doug Mahnke, con un número especial en el que recuperaban a un viejo grupo que había hecho frente a Superman en las páginas de Action Cómic, creación del propio Joe Kelly: la Élite. En Action Cómics habíamos conocido a este equipo, formado por Manchester Black, Menagerie, The Hat y Coldcast, y con él, Kelly había planteado un conflicto entre dos formas de ver el heroísmo: el clásico, encabezado por Superman, y la "nueva actitud" que había llegado en los 90, con héroes duros, capaces de soluciones duras. Dirigidos por la hermana de Manchester Black, Vera Black, la Élite se enfrentaba a la Liga de la Justicia en unas condiciones parecidas, como dos formas de ver el heroísmo, pero este número 100 servía sobre todo como lanzamiento de una nueva colección de Liga de la Justicia, Justice League: Elite, donde Joe Kelly y Joe Mahnke se llevarían a algunas de sus incorporaciones (Fe, Mayor Desastre, los Cuervo) junto a los miembros de la Élite, y Flash, así que el número 100 acababa con una ominosa frase de Superman.
La Liga de la Justicia había cambiado para siempre.
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My rating: 3 of 5 stars
Después del final de la etapa Kelly en JLA, llegaba el momento de los clásicos. Y en el tomo El Décimo Círculo vamos a encontrar muchos nombres clásicos. El primero, Dennis O'Neil, se encargaría de un arco corto de tres partes llamado Extinción, acompañado por los lápices de Tang Eng Huat (que a mi me gusta lo justo, básicamente nada). Dennis O'Neil es una de las figuras más importantes del cómic de los años setenta, innovador al incluir en sus colecciones (estuvo a cargo de Green Lantern/Green Arrow, por ejemplo) temas sociales y políticos, y llegó a JLA con ese mismo espíritu, innovador a pesar de los años, y con carga social, sobre toco ecológica. En Extinción, una inteligencia extraterrestre que responde al nombre de Peppy (en fin...), llega a la Tierra esperando encontrar que esta, según se había escrito milenios atrás en su libro sagrado, el libro de Lol, estaría bajo el dominio de los monos de máscara plateada. Sorprendido, Peppy, en compañía de la Liga de la Justicia, asiste al dominio de la especie humana, a todo lo que esta está haciendo en el planeta... y al hecho de ser el último de su especie, elemento que comparte con J'onn J'onnz y con el propio Superman. Con un dibujo que no le hace justicia, Dennis O'Neil consigue una historia muy clásica e interesante...
Que da paso a uno de los tándem creativos más importantes del mundo del cómic. De todas las eras, da igual Cuando uno habla de Chris Claremont y John Byrne (y encima les ayuda Gerry Conway) estamos hablando de historia. Las sagas más épicas de la Patrulla-X fueron obra de este tándem, podríamos decir que juntos o por separado han participado de toda la historia de Marvel: La Patrulla-X, los Cuatro Fantásticos, los Vengadores, Alpha Flight... Todo. Y Byrne se había encargado también de Superman después de Crisis en Tierras Infinitas, reformulando todo el mundo del primer superhéroe, desde Krypton a su primer encuentro con Batman, sus relaciones, Smallville... Todo. Y volvieron a reunirse para El Décimo Círculo, un arco que cubriría la última media docena de números antes del 100 de la nueva encarnación de la JLA. En El Décimo Círculo, la JLA y la nueva encarnación de la Patrulla Condenada, tienen que hacer frente a una historia clásica de vampiros y sectas, donde el enemigo es una criatura poderosa conocida como El Crucificador, un vampiro clásico, de los de cruces y estacas, que consigue hacerse con el control de pesos pesados, como Superman o Fe. Byrne y Claremont (y Conway) hacen un trabajo clásico: épico, lleno de diálogos, de pensamientos, en el mejor estilo de los ochenta, y sabiendo que Claremont es un monstruo de la continuidad, hubiera sido muy interesante verle en una distancia larga, con más posibilidades para trabajar con todos estos personajes...
Pero llegaba el número 100, y para él, volvían Joe Kelly y Doug Mahnke, con un número especial en el que recuperaban a un viejo grupo que había hecho frente a Superman en las páginas de Action Cómic, creación del propio Joe Kelly: la Élite. En Action Cómics habíamos conocido a este equipo, formado por Manchester Black, Menagerie, The Hat y Coldcast, y con él, Kelly había planteado un conflicto entre dos formas de ver el heroísmo: el clásico, encabezado por Superman, y la "nueva actitud" que había llegado en los 90, con héroes duros, capaces de soluciones duras. Dirigidos por la hermana de Manchester Black, Vera Black, la Élite se enfrentaba a la Liga de la Justicia en unas condiciones parecidas, como dos formas de ver el heroísmo, pero este número 100 servía sobre todo como lanzamiento de una nueva colección de Liga de la Justicia, Justice League: Elite, donde Joe Kelly y Joe Mahnke se llevarían a algunas de sus incorporaciones (Fe, Mayor Desastre, los Cuervo) junto a los miembros de la Élite, y Flash, así que el número 100 acababa con una ominosa frase de Superman.
La Liga de la Justicia había cambiado para siempre.
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martes, 17 de diciembre de 2019
JLA DE JOE KELLY: PRUEBA DE FUEGO
JLA, Vol. 14: Trial by Fire by Joe Kelly
My rating: 3 of 5 stars
Con Prueba de Fuego, llegó a su final la etapa de Joe Kelly. Crisis de Identidad y todo lo que iba a traer se aproximaba en el horizonte, y había ajustes que hacer para todas las colecciones de DC a medio plazo. Aún quedaba tiempo para una interinidad que llegaría de la mano de dos autores míticos (ya llegaremos a eso). Y en su último arco, Kelly y Mahnke decidieron enfrentar a la JLA a una auténtica prueba de fuego, uno de los enemigos más poderosos que la Liga se había encontrado nunca... y que se trataba de uno de ellos.
Después de los acontecimientos de La Era de Obsidiana, donde J'onn J'onnz había sido anulado por el dominio de Rama Khan sobre el fuego, el Detective Marciano había dejado la Liga para intentar eliminar su miedo al fuego, y lo hizo acudiendo a una antigua enemiga de Superman, la villana Quemadura, con la que J'onn iría comenzando en los arcos anteriores una relación relativamente romántica... con consecuencias inesperadas para todos los implicados. Y es que en Prueba de Fuego, vemos como al liberarse de su miedo al fuego, J'onn libera una antigua memoria genética eliminada milenios atrás por los Guardianes de Oa, los Marcianos de Fuego. Convertido en una entidad llamada Fernus el Incinerador, J'onn comienza intentando establecer una nueva paz mundial utilizando su telepatía para forzar por ejemplo una paz entre Bialya y Qurac, pero también comienzan a aparecer asesinados diferentes villanos, siendo amenazado el propio Lex Luthor... y a no tardar, toda la Liga de la Justicia.
Con este arco, Joe Kelly ponía fin a una etapa que había comenzado tan en lo alto que, aunque supo mantener un nivel más que alto, fue decayendo poco a poco, a pesar de las interesantes propuestas del guionista y de los dibujantes que le acompañaron.
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My rating: 3 of 5 stars
Con Prueba de Fuego, llegó a su final la etapa de Joe Kelly. Crisis de Identidad y todo lo que iba a traer se aproximaba en el horizonte, y había ajustes que hacer para todas las colecciones de DC a medio plazo. Aún quedaba tiempo para una interinidad que llegaría de la mano de dos autores míticos (ya llegaremos a eso). Y en su último arco, Kelly y Mahnke decidieron enfrentar a la JLA a una auténtica prueba de fuego, uno de los enemigos más poderosos que la Liga se había encontrado nunca... y que se trataba de uno de ellos.
Después de los acontecimientos de La Era de Obsidiana, donde J'onn J'onnz había sido anulado por el dominio de Rama Khan sobre el fuego, el Detective Marciano había dejado la Liga para intentar eliminar su miedo al fuego, y lo hizo acudiendo a una antigua enemiga de Superman, la villana Quemadura, con la que J'onn iría comenzando en los arcos anteriores una relación relativamente romántica... con consecuencias inesperadas para todos los implicados. Y es que en Prueba de Fuego, vemos como al liberarse de su miedo al fuego, J'onn libera una antigua memoria genética eliminada milenios atrás por los Guardianes de Oa, los Marcianos de Fuego. Convertido en una entidad llamada Fernus el Incinerador, J'onn comienza intentando establecer una nueva paz mundial utilizando su telepatía para forzar por ejemplo una paz entre Bialya y Qurac, pero también comienzan a aparecer asesinados diferentes villanos, siendo amenazado el propio Lex Luthor... y a no tardar, toda la Liga de la Justicia.
Con este arco, Joe Kelly ponía fin a una etapa que había comenzado tan en lo alto que, aunque supo mantener un nivel más que alto, fue decayendo poco a poco, a pesar de las interesantes propuestas del guionista y de los dibujantes que le acompañaron.
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lunes, 16 de diciembre de 2019
JLA DE JOE KELLY: REGLAS DE APRENDIZAJE
JLA, Vol. 13: Rules of Engagement by Joe Kelly
My rating: 3 of 5 stars
Creo que después de una maravilla como La Era de Obsidiana, era inevitable que la colección flojeara un poco, y es lo que ocurre en las dos historias que se incluyen en Reglas de Aprendizaje y que sirven como presentación de la nueva alineación de la JLA. Superman, Batman, Wonder Woman y Flash se unen a John Stewart, Fe, Átomo, Firestorm, Cuervo Manitú y el Mayor Desastre en dos tramas que, la verdad, son interesantes sobre todo por cómo Kelly enfocó muchos aspectos de la propia política de Estados Unidos en los años posteriores al 11-S.
En la primera historia, a causa de una extraña manifestación cósmica (ojo que Kelly no se queda atrás con Waid y Morrison cuando se pone espacial), la JLA recibe una transmisión de radio procedente de una distancia absurda (creo que son 50 años luz), una llamada de auxilio de una civilización, los Kylaq, que piden ayuda frente a un imperio galáctico que los quiere absorber, una unión liderada por un tal Pacificador. Esta civilización no tiene posibilidad de viaje transluminal, así que es una amenaza que no va a llegar a la Tierra nunca, ni afecta a nuestro planeta de ninguna manera, así que la JLA tiene que decidir si se involucra en el conflicto... y empujados por Wonder Woman lo hacen, encontrándose de pronto en una incómoda posición, pues los Kylaq han requerido los servicios de un antiguo enemigo de la Liga, Kanjar Ro, para que les ayude a hacer frente al Pacificador, y sus métodos no son compatibles con los de la JLA, que tiene que hacer frente a muy difíciles decisiones.
La siguiente historia, contó con Duncan Rouleau en los lápices, dándole un descanso a Doug Mahnke, con quien comparte cierto estilo pictórico, aunque Rouleau es bastante más cartoon que Mahnke, y en ella, Kelly habló ni más ni menos que del fascismo en norteamérica y de la situación de miedo creada por el 11-S. La JLA interviene como mediadores entre la policía local y un refugio para niños metahumanos conocido como Safe Haven, dirigido por un grupo de voluntarios metahumanos. Pero Safe Haven es destruido, todos sus habitantes dado por muertos, y parece que todos los miembros presentes de la JLA son los culpables. Así, mientras Superman, Fe, Desastre, Flash y John Stewart enfrentan su culpabilidad de diferentes maneras, Batman, Átomo, Firestorm, Wonder Woman y Cuervo Manitú tienen que averiguar qué ocurrió en verdad en Safe Haven... y lo que descubren tiene mucho que ver con un grupo de metahumanos de corte fascista y la manipulación de un grupo paramilitar para conseguir que uno de los miembros de la JLA vuelva con ellos.
Por último, y con lápices de Chriscross, Kelly lanza un número único muy interesante en el que afronta un espinoso tema: la guerra con Iraq bajo el pretexto de la existencia de armas de destrucción masiva. Y lo hace, como no, recurriendo a una metáfora metahumana, en la que la JLA tiene que hacer frente a unos ataques terroristas en Estados Unidos tras los que según la administración Luthor se encuentra Qurac, pero sin pruebas claras, y mientras Superman toma una decisión, los miembros de la JLA contrarios al intervencionismo de Luthor comienzan a desaparecer uno a uno...
En fin, una saga muy interesante, que sólo pierde estrellas, la verdad, porque Golden Perfect y la Edad De Obsidiana habían sido prácticamente perfectos, pero que mantiene un nivel muy alto de calidad y que es infinitamente mejor que cualquier cosa que se esté escribiendo a día de hoy.
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My rating: 3 of 5 stars
Creo que después de una maravilla como La Era de Obsidiana, era inevitable que la colección flojeara un poco, y es lo que ocurre en las dos historias que se incluyen en Reglas de Aprendizaje y que sirven como presentación de la nueva alineación de la JLA. Superman, Batman, Wonder Woman y Flash se unen a John Stewart, Fe, Átomo, Firestorm, Cuervo Manitú y el Mayor Desastre en dos tramas que, la verdad, son interesantes sobre todo por cómo Kelly enfocó muchos aspectos de la propia política de Estados Unidos en los años posteriores al 11-S.
En la primera historia, a causa de una extraña manifestación cósmica (ojo que Kelly no se queda atrás con Waid y Morrison cuando se pone espacial), la JLA recibe una transmisión de radio procedente de una distancia absurda (creo que son 50 años luz), una llamada de auxilio de una civilización, los Kylaq, que piden ayuda frente a un imperio galáctico que los quiere absorber, una unión liderada por un tal Pacificador. Esta civilización no tiene posibilidad de viaje transluminal, así que es una amenaza que no va a llegar a la Tierra nunca, ni afecta a nuestro planeta de ninguna manera, así que la JLA tiene que decidir si se involucra en el conflicto... y empujados por Wonder Woman lo hacen, encontrándose de pronto en una incómoda posición, pues los Kylaq han requerido los servicios de un antiguo enemigo de la Liga, Kanjar Ro, para que les ayude a hacer frente al Pacificador, y sus métodos no son compatibles con los de la JLA, que tiene que hacer frente a muy difíciles decisiones.
La siguiente historia, contó con Duncan Rouleau en los lápices, dándole un descanso a Doug Mahnke, con quien comparte cierto estilo pictórico, aunque Rouleau es bastante más cartoon que Mahnke, y en ella, Kelly habló ni más ni menos que del fascismo en norteamérica y de la situación de miedo creada por el 11-S. La JLA interviene como mediadores entre la policía local y un refugio para niños metahumanos conocido como Safe Haven, dirigido por un grupo de voluntarios metahumanos. Pero Safe Haven es destruido, todos sus habitantes dado por muertos, y parece que todos los miembros presentes de la JLA son los culpables. Así, mientras Superman, Fe, Desastre, Flash y John Stewart enfrentan su culpabilidad de diferentes maneras, Batman, Átomo, Firestorm, Wonder Woman y Cuervo Manitú tienen que averiguar qué ocurrió en verdad en Safe Haven... y lo que descubren tiene mucho que ver con un grupo de metahumanos de corte fascista y la manipulación de un grupo paramilitar para conseguir que uno de los miembros de la JLA vuelva con ellos.
Por último, y con lápices de Chriscross, Kelly lanza un número único muy interesante en el que afronta un espinoso tema: la guerra con Iraq bajo el pretexto de la existencia de armas de destrucción masiva. Y lo hace, como no, recurriendo a una metáfora metahumana, en la que la JLA tiene que hacer frente a unos ataques terroristas en Estados Unidos tras los que según la administración Luthor se encuentra Qurac, pero sin pruebas claras, y mientras Superman toma una decisión, los miembros de la JLA contrarios al intervencionismo de Luthor comienzan a desaparecer uno a uno...
En fin, una saga muy interesante, que sólo pierde estrellas, la verdad, porque Golden Perfect y la Edad De Obsidiana habían sido prácticamente perfectos, pero que mantiene un nivel muy alto de calidad y que es infinitamente mejor que cualquier cosa que se esté escribiendo a día de hoy.
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sábado, 14 de diciembre de 2019
JLA DE JOE KELLY: LA EDAD DE OBSIDIANA
JLA, Vol. 12: The Obsidian Age, Vol. 2 by Joe Kelly
My rating: 5 of 5 stars
Después de releer la Edad de Obsidiana, creo que este es el punto culminante de la etapa de JLA de Joe Kelly, y me quedo corto en las estrellas que le puedo dar, porque con todo lo que me gusta la JLA de Morrison, y lo genial que me pareció por ejemplo La Torre de Babel en la etapa Waid, La Edad de Obsidiana es la historia que más me ha gustado DE TODO LO QUE HE LEÍDO DE JLA. Así que vamos al turrón.
Después de los acontecimientos de Nuestros Mundos en Guerra, Joe Kelly decidió en La Edad de Obsidiana retomar la desaparición de Aquaman y de la propia Atlantis que había ocurrido cuando en el especial JLA de Nuestros Mundos en Guerra, Aquaman se había enfrentado a una de las sondas de Imperiex y Tempest había lanzado sobre Atlantis un hechizo que la había hecho desaparecer. Después de investigar una serie de eventos extraños en alta mar, la JLA es atacada por dos extraños, un guerrero enfundado en una armadura azteca/inca de más de tres mil años de antigüedad y un chamán nativo americano que responde al curioso nombre de Cuervo Manitú (lo de las culturas antiguas lo llevan regular, hace tres mil años no había ni cultura Inca, ni cultura Azteca... y estas no tuvieron nada que ver la una con la otra, pero bueno, vamos a dejarlo estar que la historia lo merece). Lo extraño es que Cuervo Manitú ha aparecido en varias ocasiones en los sueños de Green Lantern, y lo hace con la JLA siendo asesinada a su alrededor. Cuervo Manitú habla de una profecía que habla de una hidra de siete cabezas (y que hace alusión a la JLA y sus siete miembros), pero tras un duro enfrentamiento con ellos, él y su aliado deciden huir, recurriendo a la magia de la Sima en la que se encontraba Atlantis para escapar... con inesperadas consecuencias, pues las ruinas de Atlantis aparecen de nuevo en la superficie, y la JLA desaparece.
Con este disparador, Joe Kelly comenzó a desarrollar su historia, de una forma muy interesante, pues la lleva simultáneamente en dos tiempos. Por un lado, tenemos a la JLA habitual en Atlantis hace tres mil años, buscando a Aquaman y tratando de hacer frente a una Liga de la Justicia "de la antigüedad", formada por los propios Cuervo Manitú y Tezumak, además de un hechicero oriental llamado Ballenero, un golem hebreo, la guerrera africana Sela, un antiguo Rama Khan, y la sacerdotisa atlante Gamemnae. Y por otro lado, tras activarse el protocolo de desaparición de la JLA en nuestro tiempo, tenemos a una nueva JLA que tiene que hacer frente a una extraña descompensación del agua en el mundo, mientras un grupo de magos y científicos dirigidos por Zatanna y Tempest investigan las viejas ruinas de Atlantis. Esta nueva Liga de la Justicia estaría formada por personajes muy dispares, como los ya clásicos Green Arrow, Firestorm y Átomo, nuevas incorporaciones como Hawkgirl, Jason Blood/Demon. y el Mayor Desastre, personajes de nuevo cuño como Fe, y todos ellos bajo el liderazgo de Nightwing.
Con una gran habilidad narrativa (apoyada por el dibujo ágil y expresivo de Doug Mahnke), Kelly nos va llevando de una Liga a otra, dándonos pistas en un tiempo y otro de lo que está pasando hasta descubrir que su enemigo es el mismo en ambos lados de la historia, y llegar a un final que supone una reestructuración completa del equipo, con varias salidas (Demon, .Green Arrow, Hawkgirl, Nightwing, Plastic Man, el Green Lantern Kyle Rayner y J'onn J'onnz dejan el equipo), y entradas (Fe, Firestorm y Átomo se quedan, junto al Green Lantern John Stewart, además de uno de los miembros de la Liga "Antigua" que además es un guiño a la serie animada de los Superamigos).
Si alguien va a leer una única historia de la JLA, no debería dudarlo. Esa debería ser La Edad de Obsidiana.
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My rating: 5 of 5 stars
Después de releer la Edad de Obsidiana, creo que este es el punto culminante de la etapa de JLA de Joe Kelly, y me quedo corto en las estrellas que le puedo dar, porque con todo lo que me gusta la JLA de Morrison, y lo genial que me pareció por ejemplo La Torre de Babel en la etapa Waid, La Edad de Obsidiana es la historia que más me ha gustado DE TODO LO QUE HE LEÍDO DE JLA. Así que vamos al turrón.
Después de los acontecimientos de Nuestros Mundos en Guerra, Joe Kelly decidió en La Edad de Obsidiana retomar la desaparición de Aquaman y de la propia Atlantis que había ocurrido cuando en el especial JLA de Nuestros Mundos en Guerra, Aquaman se había enfrentado a una de las sondas de Imperiex y Tempest había lanzado sobre Atlantis un hechizo que la había hecho desaparecer. Después de investigar una serie de eventos extraños en alta mar, la JLA es atacada por dos extraños, un guerrero enfundado en una armadura azteca/inca de más de tres mil años de antigüedad y un chamán nativo americano que responde al curioso nombre de Cuervo Manitú (lo de las culturas antiguas lo llevan regular, hace tres mil años no había ni cultura Inca, ni cultura Azteca... y estas no tuvieron nada que ver la una con la otra, pero bueno, vamos a dejarlo estar que la historia lo merece). Lo extraño es que Cuervo Manitú ha aparecido en varias ocasiones en los sueños de Green Lantern, y lo hace con la JLA siendo asesinada a su alrededor. Cuervo Manitú habla de una profecía que habla de una hidra de siete cabezas (y que hace alusión a la JLA y sus siete miembros), pero tras un duro enfrentamiento con ellos, él y su aliado deciden huir, recurriendo a la magia de la Sima en la que se encontraba Atlantis para escapar... con inesperadas consecuencias, pues las ruinas de Atlantis aparecen de nuevo en la superficie, y la JLA desaparece.
Con este disparador, Joe Kelly comenzó a desarrollar su historia, de una forma muy interesante, pues la lleva simultáneamente en dos tiempos. Por un lado, tenemos a la JLA habitual en Atlantis hace tres mil años, buscando a Aquaman y tratando de hacer frente a una Liga de la Justicia "de la antigüedad", formada por los propios Cuervo Manitú y Tezumak, además de un hechicero oriental llamado Ballenero, un golem hebreo, la guerrera africana Sela, un antiguo Rama Khan, y la sacerdotisa atlante Gamemnae. Y por otro lado, tras activarse el protocolo de desaparición de la JLA en nuestro tiempo, tenemos a una nueva JLA que tiene que hacer frente a una extraña descompensación del agua en el mundo, mientras un grupo de magos y científicos dirigidos por Zatanna y Tempest investigan las viejas ruinas de Atlantis. Esta nueva Liga de la Justicia estaría formada por personajes muy dispares, como los ya clásicos Green Arrow, Firestorm y Átomo, nuevas incorporaciones como Hawkgirl, Jason Blood/Demon. y el Mayor Desastre, personajes de nuevo cuño como Fe, y todos ellos bajo el liderazgo de Nightwing.
Con una gran habilidad narrativa (apoyada por el dibujo ágil y expresivo de Doug Mahnke), Kelly nos va llevando de una Liga a otra, dándonos pistas en un tiempo y otro de lo que está pasando hasta descubrir que su enemigo es el mismo en ambos lados de la historia, y llegar a un final que supone una reestructuración completa del equipo, con varias salidas (Demon, .Green Arrow, Hawkgirl, Nightwing, Plastic Man, el Green Lantern Kyle Rayner y J'onn J'onnz dejan el equipo), y entradas (Fe, Firestorm y Átomo se quedan, junto al Green Lantern John Stewart, además de uno de los miembros de la Liga "Antigua" que además es un guiño a la serie animada de los Superamigos).
Si alguien va a leer una única historia de la JLA, no debería dudarlo. Esa debería ser La Edad de Obsidiana.
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jueves, 12 de diciembre de 2019
JLA DE JOE KELLY: GOLDEN PERFECT
JLA, Vol. 10: Golden Perfect by Joe Kelly
My rating: 5 of 5 stars
Golden Perfect fue el nombre del primer arco de Joe Kelly al frente de Liga de la Justicia, y la verdad es que fue una entrada espectacular. Kelly, probablemente no tan conocido como Morrison o Waid, llegaba a JLA después de haber pasado por Marvel (Masacre, Patrulla-X) y por las páginas de las colecciones de Superman en la propia DC, pero se enfrentaba a un desafío importante después de las espectaculares etapas de Morrison y Waid. Y además, lo hacía sin contar con un dibujante tan llamativo como había sido Bryan Hitch, siendo su compañero durante toda la etapa el mucho más sombrío (y personal) Doug Mahnke. Y sin embargo, Joe Kelly consiguió una etapa larga, completa, interesante y con una gran caracterización de los personajes, dotándoles de un sentido del humor y unas conversaciones que estaban ausentes en las icónicas etapas anteriores.
Siguiendo el ejemplo de Waid, Joe Kelly decidió arrancar con una JLA mucho más limitada en el número de lo que había sido la gran formación de Morrison, manteniéndose en siete miembros, seis de los siete grandes (Batman, Superman, Wonder Woman, Green Lantern, Flash y el Detective Marciano; Aquaman quedaba fuera debido a los acontecimientos de Nuestros Mundos en Guerra), más Plastic Man, que le daba el contrapeso humorístico a la grandiosidad de las tramas. Y Golden Perfect fue el arranque de una larga etapa de más de treinta números.
Además de una introducción (que plantea en tono de la serie) en la que la JLA se enfrenta a unas criaturas dominadas por uno de los villanos clásicos de Flash, Abra Kadabra, y de un epílogo protagonizado por Batman y Plastic Man que se centra en la búsqueda del hijo de este último, el grueso de Golden Perfect es una historia donde Wonder Woman es la protagonista principal. Y sobre todo, el Lazo de Wonder Woman, el Lazo de la Verdad. Todo comienza cuando Diana recibe una alerta procedente de una de sus fundaciones, sus "embajadoras" han sido asesinadas por proteger a una mujer procedente de un misterioso país asiático, Jamaphurtan (o algo así), que había huído de allí junto a su hijo. Wonder Woman y la JLA acuden a averiguar qué ha pasado con el niño, heredero del líder de la nación, Rama Khan, una especie de cargo religioso y mágico que gobierna una nación paradisíaca con el poder de la propia Tierra. Y es al tener que enfrentarse a sus propios sentimientos y a la idea de que un hijo debe estar siempre con su madre, frente a las leyes, la tradición y la posible destrucción del propio paraíso, lo que hace que durante un enfrentamiento con Rama Khan, el Lazo de la Verdad se rompa.
Wonder Woman inicia entonces un peregrinaje para recomponer el lazo (y a sí misma), pero la JLA se encuentra con que la ruptura del Lazo ha tenido una consecuencia inesperada, y es que la Verdad ha dejado de existir, se ha roto. La Verdad como concepto. Los números pierden su sentido, la Tierra no tiene por qué ser redonda... Golden Perfect tiene uno de los momentos más chocantes y originales de la JLA contemporánea, con Ray Palmer (Átomo) encogido a tamaño molecular y aferrado a un átomo, gritando "2+1 son tres, ¡deja de dar cuatro!"
En fin, el inicio de la que sería la última etapa "importante" de la JLA antes de la llegada de Crisis Infinita... y quizá, a falta de releer mucho, la última gran etapa de la JLA contemporánea.
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My rating: 5 of 5 stars
Golden Perfect fue el nombre del primer arco de Joe Kelly al frente de Liga de la Justicia, y la verdad es que fue una entrada espectacular. Kelly, probablemente no tan conocido como Morrison o Waid, llegaba a JLA después de haber pasado por Marvel (Masacre, Patrulla-X) y por las páginas de las colecciones de Superman en la propia DC, pero se enfrentaba a un desafío importante después de las espectaculares etapas de Morrison y Waid. Y además, lo hacía sin contar con un dibujante tan llamativo como había sido Bryan Hitch, siendo su compañero durante toda la etapa el mucho más sombrío (y personal) Doug Mahnke. Y sin embargo, Joe Kelly consiguió una etapa larga, completa, interesante y con una gran caracterización de los personajes, dotándoles de un sentido del humor y unas conversaciones que estaban ausentes en las icónicas etapas anteriores.
Siguiendo el ejemplo de Waid, Joe Kelly decidió arrancar con una JLA mucho más limitada en el número de lo que había sido la gran formación de Morrison, manteniéndose en siete miembros, seis de los siete grandes (Batman, Superman, Wonder Woman, Green Lantern, Flash y el Detective Marciano; Aquaman quedaba fuera debido a los acontecimientos de Nuestros Mundos en Guerra), más Plastic Man, que le daba el contrapeso humorístico a la grandiosidad de las tramas. Y Golden Perfect fue el arranque de una larga etapa de más de treinta números.
Además de una introducción (que plantea en tono de la serie) en la que la JLA se enfrenta a unas criaturas dominadas por uno de los villanos clásicos de Flash, Abra Kadabra, y de un epílogo protagonizado por Batman y Plastic Man que se centra en la búsqueda del hijo de este último, el grueso de Golden Perfect es una historia donde Wonder Woman es la protagonista principal. Y sobre todo, el Lazo de Wonder Woman, el Lazo de la Verdad. Todo comienza cuando Diana recibe una alerta procedente de una de sus fundaciones, sus "embajadoras" han sido asesinadas por proteger a una mujer procedente de un misterioso país asiático, Jamaphurtan (o algo así), que había huído de allí junto a su hijo. Wonder Woman y la JLA acuden a averiguar qué ha pasado con el niño, heredero del líder de la nación, Rama Khan, una especie de cargo religioso y mágico que gobierna una nación paradisíaca con el poder de la propia Tierra. Y es al tener que enfrentarse a sus propios sentimientos y a la idea de que un hijo debe estar siempre con su madre, frente a las leyes, la tradición y la posible destrucción del propio paraíso, lo que hace que durante un enfrentamiento con Rama Khan, el Lazo de la Verdad se rompa.
Wonder Woman inicia entonces un peregrinaje para recomponer el lazo (y a sí misma), pero la JLA se encuentra con que la ruptura del Lazo ha tenido una consecuencia inesperada, y es que la Verdad ha dejado de existir, se ha roto. La Verdad como concepto. Los números pierden su sentido, la Tierra no tiene por qué ser redonda... Golden Perfect tiene uno de los momentos más chocantes y originales de la JLA contemporánea, con Ray Palmer (Átomo) encogido a tamaño molecular y aferrado a un átomo, gritando "2+1 son tres, ¡deja de dar cuatro!"
En fin, el inicio de la que sería la última etapa "importante" de la JLA antes de la llegada de Crisis Infinita... y quizá, a falta de releer mucho, la última gran etapa de la JLA contemporánea.
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NUESTROS MUNDOS EN GUERRA
Superman: Our Worlds at War Omnibus by Jeph Loeb
My rating: 5 of 5 stars
Incluso habiéndolo leído ya muchas veces, debo decir que he disfrutado muchísimo de la relectura de Nuestros Mundos en Guerra, un evento DC que se desarrolló principalmente en las páginas de las cuatro colecciones con las que contaba el Hombre de Acero en los primeros años del siglo XXI, pero que tendría repercusiones y especiales en todo el Universo DC, con la participación de la mayoría de los héroes en activo, y numerosas bajas (que evidentemente con el tiempo fueron de ida y vuelta). La verdad es que Nuestros Mundos en Guerra es una obra que, como su título indica, habla de la guerra, y lo hace con una épica digna de la mejor película bélica, al tiempo que nos permite asistir al lado más oscuro de cualquier conflicto bélico: familias rotas, sacrificios, gente desaparecida...
Nuestros Mundos en Guerra recupera a un villano que Jeph Loeb y Ed McGuiness habían creado como enemigo de Superman, Imperiex, un ser de energía que se alimentaba de mundos y al que el Hombre de Acero ya había derrotado... pero en Nuestros Mundos en Guerra, Imperiex vuelve para amenazar esta vez la Tierra, ya que esta había sido el centro de los hechos que habían rehecho el Universo (la Crisis en Tierras Infinitas de Marv Wolfman y George Pérez), de modo que contaba con que la destrucción de la Tierra le permitiera lanzar un nuevo Big Bang y generar un universo "correcto". Los ataques de Imperiex sobre la Tierra son despiadados, pero no es el único participante del conflicto, pues Imperiex tiene una serie de enemigos a nivel estelar que acuden a la Tierra para enfrentarse a él, una alianza alienígena de la que forman parte personajes como Starfire, Máxima, Grayven, Mongal o Adam Strange... y dirigida por el propio Darkseid, que no duda en transportar Apokolips para hacerla entrar en órbita con la Tierra.
Lex Luthor se convierte en uno de los principales oponentes de Imperiex, pues en aquella época, Luthor era ni más ni menos que el presidente de los Estados Unidos, pero no será el único Luthor que se implique en la batalla, ya que también lo hará Lena Luthor, su hija, convertida en heraldo de uno de los más clásicos enemigos de Superman, Brainiac (Brainiac 13 en esta iteración).
No quiero decir nada más, ya que lo cierto es que Nuestros Mundos en Guerra es una de esas historias que esconde sorpresas prácticamente en cada página, muy equilibrada en nivel guiones y dibujantes, desde el espectacular Ed McGuiness hasta el sombrío Jae Lee que hizo su aparición en la portada del número que ponía fin a la saga. Una auténtica maravilla.
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My rating: 5 of 5 stars
Incluso habiéndolo leído ya muchas veces, debo decir que he disfrutado muchísimo de la relectura de Nuestros Mundos en Guerra, un evento DC que se desarrolló principalmente en las páginas de las cuatro colecciones con las que contaba el Hombre de Acero en los primeros años del siglo XXI, pero que tendría repercusiones y especiales en todo el Universo DC, con la participación de la mayoría de los héroes en activo, y numerosas bajas (que evidentemente con el tiempo fueron de ida y vuelta). La verdad es que Nuestros Mundos en Guerra es una obra que, como su título indica, habla de la guerra, y lo hace con una épica digna de la mejor película bélica, al tiempo que nos permite asistir al lado más oscuro de cualquier conflicto bélico: familias rotas, sacrificios, gente desaparecida...
Nuestros Mundos en Guerra recupera a un villano que Jeph Loeb y Ed McGuiness habían creado como enemigo de Superman, Imperiex, un ser de energía que se alimentaba de mundos y al que el Hombre de Acero ya había derrotado... pero en Nuestros Mundos en Guerra, Imperiex vuelve para amenazar esta vez la Tierra, ya que esta había sido el centro de los hechos que habían rehecho el Universo (la Crisis en Tierras Infinitas de Marv Wolfman y George Pérez), de modo que contaba con que la destrucción de la Tierra le permitiera lanzar un nuevo Big Bang y generar un universo "correcto". Los ataques de Imperiex sobre la Tierra son despiadados, pero no es el único participante del conflicto, pues Imperiex tiene una serie de enemigos a nivel estelar que acuden a la Tierra para enfrentarse a él, una alianza alienígena de la que forman parte personajes como Starfire, Máxima, Grayven, Mongal o Adam Strange... y dirigida por el propio Darkseid, que no duda en transportar Apokolips para hacerla entrar en órbita con la Tierra.
Lex Luthor se convierte en uno de los principales oponentes de Imperiex, pues en aquella época, Luthor era ni más ni menos que el presidente de los Estados Unidos, pero no será el único Luthor que se implique en la batalla, ya que también lo hará Lena Luthor, su hija, convertida en heraldo de uno de los más clásicos enemigos de Superman, Brainiac (Brainiac 13 en esta iteración).
No quiero decir nada más, ya que lo cierto es que Nuestros Mundos en Guerra es una de esas historias que esconde sorpresas prácticamente en cada página, muy equilibrada en nivel guiones y dibujantes, desde el espectacular Ed McGuiness hasta el sombrío Jae Lee que hizo su aparición en la portada del número que ponía fin a la saga. Una auténtica maravilla.
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lunes, 9 de diciembre de 2019
JLA DE MARK WAID
JLA, Vol. 9: Terror Incognita by Mark Waid
My rating: 3 of 5 stars
Bueno, como me he leído la JLA de Mark Waid del tirón en un par de días y para no hacer tres reseñas separadas, las cuelo todas aquí en la última parte, pero cada una tiene sus estrellitas.
Mark Waid, autor de Kingdom Come, llegó a JLA con una misión difícil: continuar con la épica JLA de Morrison, y la verdad es que a través de sus tres arcos argumentales, Waid hizo un trabajo más que digno en la colección. El primero de ellos, Torre de Babel, es una de las historias mejor trabajadas y con más mala baba que he leído sobre superhéroes, siendo especialmente importante para dos figuras: Batman, y el villano Ra's al-Gul. En este arco, la Liga tiene que hacer frente a un grupo de operaciones especiales que parece capacitado para anular uno por uno los poderes de cada uno de los miembros de la Liga de la Justicia, comenzando por el Detective Marciano, Aquaman, Plastic Man y Green Lantern... y al mismo tiempo, Ra's al-Gul comienza uno de sus retorcidos planes para sembrar el caos en la humanidad, y esta vez lo hace de forma que el ser humano sea incapaz de entender ningún texto escrito en ninguna parte del planeta, lo que lleva a múltiples y peligrosas confusiones en fronteras, hospitales, etc... La historia es bastante potente, y lo primero que hace Waid es reducir el tamaño de la JLA que tanto había crecido con Morrison a un número bastante más manejable de miembros que mantendrá durante toda su etapa. Lo malo de este arco es que está dibujado por Howard Porter, pero bueno... este sería su último arco en Liga de la Justicia.
Para dar paso en el siguiente arco al mucho más espectacular Bryan Hitch, muy Alan Davis hasta que poco a poco fue definiendo su propio estilo. Realmente, en Divide y Vencerás encontraremos dos arcos independientes. El primero, llamado El Bosque, nos trae el enfrentamiento de la Liga de la Justicia con la Bruja Malvada de Blancanieves, que aparece en Manhattan tras ser liberada de un libro encantado, y que comienza a convertir Manhattan en un país de cuento de hadas perverso, creyendo que Wonder Woman es su antigua adversaria. El arco que da nombre al volumen, Divide y Vencerás, comenzó en el número 50 de JLA, y fue un número especial con varios dibujantes, en el que Waid narraba como diversos grupos de la JLA hacen frente al Doctor Destino (Doctor Destiny en inglés, no el héroe, Doctor Fate), pero sobre todo a sus propias dudas, después del tenso final de Torre de Babel y las consecuencias que había tenido para la propia JLA. Pero el grueso de la historia llega cuando las identidades particulares de la JLA se ven separadas de sus identidades heróicas. Así, Clark Kent, Bruce Wayne, John Jones, Kyle Rayner, Patrick O'Brien y Wally West se encuentran con que ya no son Superman, Batman, el Detective Marciano, Green Lantern, Plastic Man y Flash; y que sólo Wonder Woman y Aquaman (que no tienen identidades secretas), continúan siendo ellos mismos. Waid aprovecha este argumento para analizar qué partes de cada uno de ellos corresponden a su identidad enmascarada o a su identidad privada, y nos sorprende cuando vemos por ejemplo a un Wally West perezoso, un Bruce Wayne lleno de ira (mientras Batman es poco más que un espantajo), un Clark Kent con miedo a las alturas o un Superman deshumanizado.
Por último, en Terror Incognita, Waid vuelve al origen de la Liga de Morrison, y trae de vuelta a los terroríficos marcianos blancos, liderados por Protex, y que parecen decididos a aplastar de una vez a la Liga de la Justicia, en una historia tensa y con un final espectacular en el mejor estilo Morrison.
En fin, Waid tuvo una etapa breve pero efectiva, con dibujos muy espectaculares en la parte de Bryan Hitch, y muy bien trabajado, sobre todo, repito, eficaz, muy Waid.
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My rating: 3 of 5 stars
Bueno, como me he leído la JLA de Mark Waid del tirón en un par de días y para no hacer tres reseñas separadas, las cuelo todas aquí en la última parte, pero cada una tiene sus estrellitas.
Mark Waid, autor de Kingdom Come, llegó a JLA con una misión difícil: continuar con la épica JLA de Morrison, y la verdad es que a través de sus tres arcos argumentales, Waid hizo un trabajo más que digno en la colección. El primero de ellos, Torre de Babel, es una de las historias mejor trabajadas y con más mala baba que he leído sobre superhéroes, siendo especialmente importante para dos figuras: Batman, y el villano Ra's al-Gul. En este arco, la Liga tiene que hacer frente a un grupo de operaciones especiales que parece capacitado para anular uno por uno los poderes de cada uno de los miembros de la Liga de la Justicia, comenzando por el Detective Marciano, Aquaman, Plastic Man y Green Lantern... y al mismo tiempo, Ra's al-Gul comienza uno de sus retorcidos planes para sembrar el caos en la humanidad, y esta vez lo hace de forma que el ser humano sea incapaz de entender ningún texto escrito en ninguna parte del planeta, lo que lleva a múltiples y peligrosas confusiones en fronteras, hospitales, etc... La historia es bastante potente, y lo primero que hace Waid es reducir el tamaño de la JLA que tanto había crecido con Morrison a un número bastante más manejable de miembros que mantendrá durante toda su etapa. Lo malo de este arco es que está dibujado por Howard Porter, pero bueno... este sería su último arco en Liga de la Justicia.
Para dar paso en el siguiente arco al mucho más espectacular Bryan Hitch, muy Alan Davis hasta que poco a poco fue definiendo su propio estilo. Realmente, en Divide y Vencerás encontraremos dos arcos independientes. El primero, llamado El Bosque, nos trae el enfrentamiento de la Liga de la Justicia con la Bruja Malvada de Blancanieves, que aparece en Manhattan tras ser liberada de un libro encantado, y que comienza a convertir Manhattan en un país de cuento de hadas perverso, creyendo que Wonder Woman es su antigua adversaria. El arco que da nombre al volumen, Divide y Vencerás, comenzó en el número 50 de JLA, y fue un número especial con varios dibujantes, en el que Waid narraba como diversos grupos de la JLA hacen frente al Doctor Destino (Doctor Destiny en inglés, no el héroe, Doctor Fate), pero sobre todo a sus propias dudas, después del tenso final de Torre de Babel y las consecuencias que había tenido para la propia JLA. Pero el grueso de la historia llega cuando las identidades particulares de la JLA se ven separadas de sus identidades heróicas. Así, Clark Kent, Bruce Wayne, John Jones, Kyle Rayner, Patrick O'Brien y Wally West se encuentran con que ya no son Superman, Batman, el Detective Marciano, Green Lantern, Plastic Man y Flash; y que sólo Wonder Woman y Aquaman (que no tienen identidades secretas), continúan siendo ellos mismos. Waid aprovecha este argumento para analizar qué partes de cada uno de ellos corresponden a su identidad enmascarada o a su identidad privada, y nos sorprende cuando vemos por ejemplo a un Wally West perezoso, un Bruce Wayne lleno de ira (mientras Batman es poco más que un espantajo), un Clark Kent con miedo a las alturas o un Superman deshumanizado.
Por último, en Terror Incognita, Waid vuelve al origen de la Liga de Morrison, y trae de vuelta a los terroríficos marcianos blancos, liderados por Protex, y que parecen decididos a aplastar de una vez a la Liga de la Justicia, en una historia tensa y con un final espectacular en el mejor estilo Morrison.
En fin, Waid tuvo una etapa breve pero efectiva, con dibujos muy espectaculares en la parte de Bryan Hitch, y muy bien trabajado, sobre todo, repito, eficaz, muy Waid.
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DESTINO CAMELOT, REINOS FANTÁSTICOS DEL CINE Y LA TELEVISIÓN
Destino Camelot: Reinos fantásticos del cine y la televisión by Francisco Javier Millán
My rating: 5 of 5 stars
Destino Camelot ha sido un libro que he ido disfrutando de menos a más, la verdad. Igual al principio me dio un poco de pereza, pero es verdad que en cuanto le cogí ritmo (y entré a tener cada vez más factor nostalgia, todo sea dicho), le he ido cogiendo el gusto.
Como el propio autor explica, Destino Camelot sería el último número de una trilogía formada por sus obras anteriores, sobre la Generación Goonies (este lo pillaré en algún momento) y Star Wars (este no, que pereza), y en él, nos trae un montón de detalles y curiosidades sobre el cine de fantasía que surgió en los años ochenta. Y lo hace de una forma bastante ágil, entretenida y amena, y sobre todo, ensalzando mucho el valor nostálgico para aquellos que vivimos nuestra infancia en esos años. Excalibur, Merlín el Encantador, El Señor de los Anillos, Conan, Red Sonja, Cristal Oscuro, Dentro del Laberinto, La Princesa Prometida, Lady Halcón, Willow, Masters del Universo, Los Inmortales, Krull... Todas estas películas y más son el objetivo del autor, y la verdad... yo estoy deseando volver a verlas todas otra vez...
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My rating: 5 of 5 stars
Destino Camelot ha sido un libro que he ido disfrutando de menos a más, la verdad. Igual al principio me dio un poco de pereza, pero es verdad que en cuanto le cogí ritmo (y entré a tener cada vez más factor nostalgia, todo sea dicho), le he ido cogiendo el gusto.
Como el propio autor explica, Destino Camelot sería el último número de una trilogía formada por sus obras anteriores, sobre la Generación Goonies (este lo pillaré en algún momento) y Star Wars (este no, que pereza), y en él, nos trae un montón de detalles y curiosidades sobre el cine de fantasía que surgió en los años ochenta. Y lo hace de una forma bastante ágil, entretenida y amena, y sobre todo, ensalzando mucho el valor nostálgico para aquellos que vivimos nuestra infancia en esos años. Excalibur, Merlín el Encantador, El Señor de los Anillos, Conan, Red Sonja, Cristal Oscuro, Dentro del Laberinto, La Princesa Prometida, Lady Halcón, Willow, Masters del Universo, Los Inmortales, Krull... Todas estas películas y más son el objetivo del autor, y la verdad... yo estoy deseando volver a verlas todas otra vez...
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sábado, 7 de diciembre de 2019
JLA DE MARK WAID: ESCALERA HACIA EL CIELO
JLA: Escalera hacia el Cielo by Mark Waid
My rating: 3 of 5 stars
Con la etapa de Grant Morrison tocando a su fin en la JLA, llegaba la hora de ir buscando sustituto, y uno de los nombres que se escuchaba era Mark Waid, que había realizado ya algunos tie-in dentro de la colección. Quizá para ver cómo se le daba a Waid escribir historias de mayor calibre, se le puso al timón de Escalera hacia el Cielo, una publicación especial de gran formato que contaría con los lápices de Bryan Hitch, un dibujante británico con muchas semejanzas con el gran Alan Davis, y que no mucho después pasaría a Marvel para dibujar la historia que le catapultaría al Olimpo de los dibujantes, The Ultimates, la adaptación al universo Ultimate de los Vengadores.
Después de ver lo que hacía Morrison para presentar desafíos a la JLA, Waid, un autor más que solvente que había escrito el guión de la aclamadísima Kingdom Come, no quiso quedarse atrás y planteó a la JLA una amenaza a su altura, y es que la propia Tierra sería secuestrada por una especie de extraterrestres cuasi inmortales, que se llevan la Tierra junto con un buen puñado de mundos de DC (Thanagar, Rann, Khund...), utilizando para ello algo tan gigantesco como una enorme nave espacial que ensarta los planetas como cuentas de collar a través de su eje, simulando gravedad y radiación solar. Es muy bestia, de verdad, y es cierto que el dibujo de Hitch deja boquiabierto cuando representa la nave, los planetas, siendo muy efectivo a la hora de transmitir la magnitud de la amenaza. Los siete grandes de la JLA, junto a Átomo y Acero, tienen que hacer frente a la situación, evitando conflictos en la Tierra mientras tratan de averiguar qué está ocurriendo, descubriendo que los extraterrestres que se han llevado la Tierra lo hacen porque se acerca el momento de su muerte tras una larguísima existencia, y estos, asustados, están investigando la espiritualidad del universo en busca de respuestas.
Como veis, el planteamiento es osado, pues lo que Waid hace (y lo que ya había hecho en Kingdom Come en parte) es una investigación espiritual del fenómeno metahumano, a través de los grandes iconos del Universo DC, y si no llega a las cinco estrellas es porque creo que la historia está demasiado recortada por un problema de páginas, y podría haber dado mucho más de sí, con escenas que se solucionan en una viñeta o dos.
En fin, una historia enorme quizá demasiado comprimida, pero que por formato y dibujo, es espectacular de ver.
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My rating: 3 of 5 stars
Con la etapa de Grant Morrison tocando a su fin en la JLA, llegaba la hora de ir buscando sustituto, y uno de los nombres que se escuchaba era Mark Waid, que había realizado ya algunos tie-in dentro de la colección. Quizá para ver cómo se le daba a Waid escribir historias de mayor calibre, se le puso al timón de Escalera hacia el Cielo, una publicación especial de gran formato que contaría con los lápices de Bryan Hitch, un dibujante británico con muchas semejanzas con el gran Alan Davis, y que no mucho después pasaría a Marvel para dibujar la historia que le catapultaría al Olimpo de los dibujantes, The Ultimates, la adaptación al universo Ultimate de los Vengadores.
Después de ver lo que hacía Morrison para presentar desafíos a la JLA, Waid, un autor más que solvente que había escrito el guión de la aclamadísima Kingdom Come, no quiso quedarse atrás y planteó a la JLA una amenaza a su altura, y es que la propia Tierra sería secuestrada por una especie de extraterrestres cuasi inmortales, que se llevan la Tierra junto con un buen puñado de mundos de DC (Thanagar, Rann, Khund...), utilizando para ello algo tan gigantesco como una enorme nave espacial que ensarta los planetas como cuentas de collar a través de su eje, simulando gravedad y radiación solar. Es muy bestia, de verdad, y es cierto que el dibujo de Hitch deja boquiabierto cuando representa la nave, los planetas, siendo muy efectivo a la hora de transmitir la magnitud de la amenaza. Los siete grandes de la JLA, junto a Átomo y Acero, tienen que hacer frente a la situación, evitando conflictos en la Tierra mientras tratan de averiguar qué está ocurriendo, descubriendo que los extraterrestres que se han llevado la Tierra lo hacen porque se acerca el momento de su muerte tras una larguísima existencia, y estos, asustados, están investigando la espiritualidad del universo en busca de respuestas.
Como veis, el planteamiento es osado, pues lo que Waid hace (y lo que ya había hecho en Kingdom Come en parte) es una investigación espiritual del fenómeno metahumano, a través de los grandes iconos del Universo DC, y si no llega a las cinco estrellas es porque creo que la historia está demasiado recortada por un problema de páginas, y podría haber dado mucho más de sí, con escenas que se solucionan en una viñeta o dos.
En fin, una historia enorme quizá demasiado comprimida, pero que por formato y dibujo, es espectacular de ver.
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viernes, 6 de diciembre de 2019
BIBLIOTECA GRANT MORRISON: ANIMAL MAN (I)
Animal Man, Vol. 1 by Grant Morrison
My rating: 5 of 5 stars
Leí por primera vez la etapa de Grant Morrison en Animal Man hace ya algunos años, de prestado, y de nuevo, la Biblioteca Grant Morrison me ha dado la oportunidad de tenerlo y releerlo, y volver a disfrutarlo aún más si cabe. Y es que una de las grandes habilidades de Morrison a la hora de escribir cuando cuenta con libertad (como en el caso de Animal Man) es que la lectura mejora con los años y la experiencia, algo de lo que estoy disfrutando mucho últimamente y no sólo en este tipo de cómics.
Hacia 1988, como cuenta el mismo guionista en la introducción, le dieron la oportunidad de trabajar con un personaje secundario a su elección, y decidió hacerlo con Animal Man, un personaje de segunda fila que llevaba años apartados del foco. Buddy Baker, el alter ego de Animal Man, había obtenido sus poderes tras recibir el estallido de una nave extraterrestre, lo que le había hecho capaz de adquirir las habilidades de los animales, pero lo "original" de Buddy es que era un personaje con familia: mujer y dos hijos, lo que lo alejaba del estándar clásico del superhéroe solitario (como Batman) o enlazado en una relación romántica de novia eterna (como Superman en aquellos momentos).
Total, que a Morrison le dieron carta blanca para jugar con Animal Man (como ya habían hecho con Sandman y Neil Gaiman con un notorio éxito), y Morrison transformó su etapa en el personaje en todo un ejercicio de reivindicación de los derechos animales y sobre todo, de metaliteratura. En este primer tomo, El Zoo Humano, la historia no se sale demasiado de una narrativa habitual, aunque uno de sus números, El Evangelio del Coyote, ya avisa de lo que está por venir. Después de decidir volver a ser un superhéroe tras un tiempo apartado y con la formación de la nueva Liga de la Justicia Internacional, piensa que es el momento de conseguir vivir de ser un héroe, y su primer caso consiste en investigar una extraña situación en unos laboratorios que hacen experimentos médicos con simios. El adversario de Buddy, en este caso, sería otro personaje marginal del Universo DC, Bwana Bestia, y si bien el tratamiento que se le da a la trama es bastante clásico, la historia es muy buena, y con mucha carga reivindicativa.
Y a partir de ahí, las cosas se empiezan a poner extrañas. Aparte de un par de números que se integrarían en el crossover anual de DC de aquel año, ¡Invasión!, pero a los que Morrison sabe dar su toque personal, está el ya mencionado anteriormente Evangelio del Coyote, un relato original en planteamiento y desarrollo que abre las puertas a lo que va terminar viniendo...
Y lo que viene es muy grande.
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My rating: 5 of 5 stars
Leí por primera vez la etapa de Grant Morrison en Animal Man hace ya algunos años, de prestado, y de nuevo, la Biblioteca Grant Morrison me ha dado la oportunidad de tenerlo y releerlo, y volver a disfrutarlo aún más si cabe. Y es que una de las grandes habilidades de Morrison a la hora de escribir cuando cuenta con libertad (como en el caso de Animal Man) es que la lectura mejora con los años y la experiencia, algo de lo que estoy disfrutando mucho últimamente y no sólo en este tipo de cómics.
Hacia 1988, como cuenta el mismo guionista en la introducción, le dieron la oportunidad de trabajar con un personaje secundario a su elección, y decidió hacerlo con Animal Man, un personaje de segunda fila que llevaba años apartados del foco. Buddy Baker, el alter ego de Animal Man, había obtenido sus poderes tras recibir el estallido de una nave extraterrestre, lo que le había hecho capaz de adquirir las habilidades de los animales, pero lo "original" de Buddy es que era un personaje con familia: mujer y dos hijos, lo que lo alejaba del estándar clásico del superhéroe solitario (como Batman) o enlazado en una relación romántica de novia eterna (como Superman en aquellos momentos).
Total, que a Morrison le dieron carta blanca para jugar con Animal Man (como ya habían hecho con Sandman y Neil Gaiman con un notorio éxito), y Morrison transformó su etapa en el personaje en todo un ejercicio de reivindicación de los derechos animales y sobre todo, de metaliteratura. En este primer tomo, El Zoo Humano, la historia no se sale demasiado de una narrativa habitual, aunque uno de sus números, El Evangelio del Coyote, ya avisa de lo que está por venir. Después de decidir volver a ser un superhéroe tras un tiempo apartado y con la formación de la nueva Liga de la Justicia Internacional, piensa que es el momento de conseguir vivir de ser un héroe, y su primer caso consiste en investigar una extraña situación en unos laboratorios que hacen experimentos médicos con simios. El adversario de Buddy, en este caso, sería otro personaje marginal del Universo DC, Bwana Bestia, y si bien el tratamiento que se le da a la trama es bastante clásico, la historia es muy buena, y con mucha carga reivindicativa.
Y a partir de ahí, las cosas se empiezan a poner extrañas. Aparte de un par de números que se integrarían en el crossover anual de DC de aquel año, ¡Invasión!, pero a los que Morrison sabe dar su toque personal, está el ya mencionado anteriormente Evangelio del Coyote, un relato original en planteamiento y desarrollo que abre las puertas a lo que va terminar viniendo...
Y lo que viene es muy grande.
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martes, 3 de diciembre de 2019
CUATRO FANTÁSTICOS DE JONATHAN HICKMAN: SOLUCIONARLO TODO
Fantastic Four, Volume 2 by Jonathan Hickman
My rating: 5 of 5 stars
Que Panini esté por fin reeditando la etapa de Jonathan Hickman al frente de Cuatro Fantásticos y la edición de la biblioteca Grant Morrison en ECC han sido las dos mejores noticias del año en cuanto al tema cómics... y bueno, de bastante más que del año, vamos a ser sinceros, que el patio está un poco manga por hombro.
En fin, sin hablar más de mi opinión sobre el panorama actual del cómic, lo cierto es que estaba deseando que llegase a las librerías una reedición de esta etapa de Cuatro Fantásticos ya que no estaba en mi biblioteca de cómics, en su momento lo leí de prestado, y a día de hoy considero que es un imprescindible que se ha demorado demasiado debido seguramente a cuestiones internas en Marvel, donde llegaron a cancelar las series de Cuatro Fantásticos para no darle publicidad a unos personajes que estaban en Fox (bueno, a cancelar 4F y a hundir en la mierda a los mutantes...). Jonathan Hickman, que había llegado a Marvel de mano de Brian Michael Bendis en Guerreros Secretos, se convirtió en uno de los pilares de la compañía, y demostró ser un gran arquitecto, y de hecho, todo su trabajo en la editorial desde Guerreros Secretos a Secret War, pasando por Cuatro Fantásticos, Fundación Futuro y sus Vengadores y Nuevos Vengadores, se puede leer como una sola historia muy bien trabajada.
En estos primeros números de Cuatro Fantásticos después de que se ocupara de la miniserie de los imaginautas para Reinado Oscuro, Hickman plantea lo que serán los pilares de su serie, en dos arcos argumentales perfectamente separados por la fiesta de cumpleaños de Franklin Richards. En el primer arco, Reed Richards recupera una de sus viejas ideas, la idea 101 de su listado de Cien Ideas que había realizado durante Civil War: Solucionarlo todo. Y para ello, recurre a la creación que había desarrollado durante Reinado Oscuro, el Puente que le permite acceder a diversas realidades alternativas y que le lleva a formar parte de un consejo interdimensional de Reed Richard(s) que comparten esa decisión. Tras este arco, tenemos el cumpleaños de Franklin Richards, donde hay además de tener una importante modificación en el carácter de este personaje, encontramos lo que será el origen de la próxima Fundación Futuro, con la llegada de "niños especiales" de diferentes formas a la tutela de los 4F. En este número además, Valeria Richards recibe una visita muy especial que le da una serie de instrucciones sobre el futuro cercano, y lo que plantean los siguientes cuatro números es precisamente el arranque de esa profecía, con la aparición de cuatro ciudades extrañas cuyo conflicto se convertirá en parte importante de la trama de los 4F.
Durante esta etapa, Hickman estuvo acompañado por los lápices de Dale Eaglesham (literalmente lápices, ya que el trabajo de Eaglesham durante esta etapa no se entintaba, dándosele color directamente sobre su lápiz), un dibujante procedente de DC y discípulo de Alan Davis, que realiza un trabajo muy funcional y en algunos momentos bastante espectacular.
Genial, absolutamente genial.
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My rating: 5 of 5 stars
Que Panini esté por fin reeditando la etapa de Jonathan Hickman al frente de Cuatro Fantásticos y la edición de la biblioteca Grant Morrison en ECC han sido las dos mejores noticias del año en cuanto al tema cómics... y bueno, de bastante más que del año, vamos a ser sinceros, que el patio está un poco manga por hombro.
En fin, sin hablar más de mi opinión sobre el panorama actual del cómic, lo cierto es que estaba deseando que llegase a las librerías una reedición de esta etapa de Cuatro Fantásticos ya que no estaba en mi biblioteca de cómics, en su momento lo leí de prestado, y a día de hoy considero que es un imprescindible que se ha demorado demasiado debido seguramente a cuestiones internas en Marvel, donde llegaron a cancelar las series de Cuatro Fantásticos para no darle publicidad a unos personajes que estaban en Fox (bueno, a cancelar 4F y a hundir en la mierda a los mutantes...). Jonathan Hickman, que había llegado a Marvel de mano de Brian Michael Bendis en Guerreros Secretos, se convirtió en uno de los pilares de la compañía, y demostró ser un gran arquitecto, y de hecho, todo su trabajo en la editorial desde Guerreros Secretos a Secret War, pasando por Cuatro Fantásticos, Fundación Futuro y sus Vengadores y Nuevos Vengadores, se puede leer como una sola historia muy bien trabajada.
En estos primeros números de Cuatro Fantásticos después de que se ocupara de la miniserie de los imaginautas para Reinado Oscuro, Hickman plantea lo que serán los pilares de su serie, en dos arcos argumentales perfectamente separados por la fiesta de cumpleaños de Franklin Richards. En el primer arco, Reed Richards recupera una de sus viejas ideas, la idea 101 de su listado de Cien Ideas que había realizado durante Civil War: Solucionarlo todo. Y para ello, recurre a la creación que había desarrollado durante Reinado Oscuro, el Puente que le permite acceder a diversas realidades alternativas y que le lleva a formar parte de un consejo interdimensional de Reed Richard(s) que comparten esa decisión. Tras este arco, tenemos el cumpleaños de Franklin Richards, donde hay además de tener una importante modificación en el carácter de este personaje, encontramos lo que será el origen de la próxima Fundación Futuro, con la llegada de "niños especiales" de diferentes formas a la tutela de los 4F. En este número además, Valeria Richards recibe una visita muy especial que le da una serie de instrucciones sobre el futuro cercano, y lo que plantean los siguientes cuatro números es precisamente el arranque de esa profecía, con la aparición de cuatro ciudades extrañas cuyo conflicto se convertirá en parte importante de la trama de los 4F.
Durante esta etapa, Hickman estuvo acompañado por los lápices de Dale Eaglesham (literalmente lápices, ya que el trabajo de Eaglesham durante esta etapa no se entintaba, dándosele color directamente sobre su lápiz), un dibujante procedente de DC y discípulo de Alan Davis, que realiza un trabajo muy funcional y en algunos momentos bastante espectacular.
Genial, absolutamente genial.
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lunes, 2 de diciembre de 2019
JLA: TERCERA GUERRA MUNDIAL
JLA, Vol. 6: World War III by Grant Morrison
My rating: 3 of 5 stars
Con Tercera Guerra Mundial, acababa finalmente la etapa de Grant Morrison en JLA, y lo hacía cumpliendo con lo que había prometido desde el primer número: la llegada de Maggedon, una amenaza que había atemorizado a los propios habitantes de Wonderworld y que había llevado a los dioses de Nueva Génesis a enviar a Orión y Big Barda a unirse a la Liga de la Justicia para hacer frente a la amenaza que habría de llegar.
Y finalmente llega y resulta ser una amenaza muy "Morrisoniana", un arma conceptual programada para la destrucción de la humanidad a través del conflicto (quizá un poco demasiado parecido al Virus Hourman que habíamos visto ya en Un Millón), lo que provoca el estallido de numerosos conflictos bélicos a los que la JLA tiene que hacer frente por todo el globo, mientras se enfrentan a una nueva Banda de la Injusticia formada por Lex Luthor, el General, la Reina Abeja y Prometeo, que resultan ser una herramienta más de Maggedon en su proyecto de destruir la Tierra.
Y quizá, de toda la etapa de Morrison en JLA, Tercera Guerra Mundial sea su arco más flojo, o esa es mi impresión. Me da la sensación de que la historia es precipitada, poco espectacular a nivel argumental y quizá algo repetitiva y redundante dentro de la propia etapa del escritor escocés. Por supuesto, el dibujo de Porter ayuda poco... pero es que en este caso la edición que hizo Planeta de este arco es taaaaan mala que descuenta. Y es que la traducción es mala, y sobre todo, descuidada. Incluso diría que despreocupada, con errores que demuestran que quien la hizo no tenía ni la menor idea de lo que estaba haciendo (hay un momento en el que buscando una forma de dar energía a una máquina, Flash le da el pie a Relámpago Negro, Black Lighting en inglés, pero en la traducción, lo que hace Flash es exclamar sin venir a cuento "Rayos Negros").
En fin, el cierre es un poco flojo para una etapa que, en conjunto, es una auténtica maravilla.
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My rating: 3 of 5 stars
Con Tercera Guerra Mundial, acababa finalmente la etapa de Grant Morrison en JLA, y lo hacía cumpliendo con lo que había prometido desde el primer número: la llegada de Maggedon, una amenaza que había atemorizado a los propios habitantes de Wonderworld y que había llevado a los dioses de Nueva Génesis a enviar a Orión y Big Barda a unirse a la Liga de la Justicia para hacer frente a la amenaza que habría de llegar.
Y finalmente llega y resulta ser una amenaza muy "Morrisoniana", un arma conceptual programada para la destrucción de la humanidad a través del conflicto (quizá un poco demasiado parecido al Virus Hourman que habíamos visto ya en Un Millón), lo que provoca el estallido de numerosos conflictos bélicos a los que la JLA tiene que hacer frente por todo el globo, mientras se enfrentan a una nueva Banda de la Injusticia formada por Lex Luthor, el General, la Reina Abeja y Prometeo, que resultan ser una herramienta más de Maggedon en su proyecto de destruir la Tierra.
Y quizá, de toda la etapa de Morrison en JLA, Tercera Guerra Mundial sea su arco más flojo, o esa es mi impresión. Me da la sensación de que la historia es precipitada, poco espectacular a nivel argumental y quizá algo repetitiva y redundante dentro de la propia etapa del escritor escocés. Por supuesto, el dibujo de Porter ayuda poco... pero es que en este caso la edición que hizo Planeta de este arco es taaaaan mala que descuenta. Y es que la traducción es mala, y sobre todo, descuidada. Incluso diría que despreocupada, con errores que demuestran que quien la hizo no tenía ni la menor idea de lo que estaba haciendo (hay un momento en el que buscando una forma de dar energía a una máquina, Flash le da el pie a Relámpago Negro, Black Lighting en inglés, pero en la traducción, lo que hace Flash es exclamar sin venir a cuento "Rayos Negros").
En fin, el cierre es un poco flojo para una etapa que, en conjunto, es una auténtica maravilla.
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domingo, 1 de diciembre de 2019
JLA/TITANES: EL IMPERATIVO TECHNIS
JLA/Titans: The Technis Imperative by Devin Grayson
My rating: 3 of 5 stars
A finales de los 90, un concepto tan importante para DC como los Titanes, había quedado un poco a la deriva. Los Titanes habían empezado como la reunión de los compañeros adolescentes de los héroes principales de la casa, Robin (Batman), Wonder Girl (Wonder Woman), Kid Flash (Flash), Speedy (Green Arrow) y Aqualad (Aquaman). El concepto en sí era un poco rancio, pero con el tiempo y la participación de grandes guionistas, especialmente Marv Wolfman y sus Nuevos Titanes, terminaron convertidos en mucho más, una pieza fundamental para el Universo DC, especialmente en esa mítica formación que incluía a Robin/Nightwing, Wonder Girl, Kid Flash, Changeling, Ciborg, Starfire y Raven.
Con El Imperativo Tecnis, una saga en tres números que cruzaba la JLA con los Titanes, se repitió el escenario que había funcionado con gran éxito en la JLA de Morrison, apartar las "actualizaciones" del equipo y devolver a la primera plana al equipo estrella. Para ello se recurrió a dos grandes del cómic DC, la guionista Devin Grayson y el guionista/dibujante Phil Jiménez, que organizaron un evento gigantesco con docenas y docenas de personajes (Jiménez demostraría ser un digno heredero de George Pérez a la hora de plasmar viñetas con muchísimos personajes). Todo comienza cuando los miembros de todas las encarnaciones de los Titanes comienzan desaparecer, secuestrados por unas extrañas criaturas tecnológicas, mientras la Atalaya de la JLA es asaltada por una inteligencia artificial que se extiende rápidamente, ocupando toda la Luna y creando grandes problemas geológicos y tecnológicos en la Tierra. A partir de esta premisa, Grayson y Jiménez crearon una historia llena de personajes y más personajes... Y la verdad es que no tiene mucho más. Se nota que la trama sirve para hacer "limpieza" de Titanes y para recordar a todos los miembros que han formado parte de todas las encarnaciones del equipo... pero también de la JLA.
Ahora bien, si el argumento es un poco simplón, el arte de Phil Jiménez es espectacular, lo que sube un poquito la nota, al menos una estrellita es para el dibujo.
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My rating: 3 of 5 stars
A finales de los 90, un concepto tan importante para DC como los Titanes, había quedado un poco a la deriva. Los Titanes habían empezado como la reunión de los compañeros adolescentes de los héroes principales de la casa, Robin (Batman), Wonder Girl (Wonder Woman), Kid Flash (Flash), Speedy (Green Arrow) y Aqualad (Aquaman). El concepto en sí era un poco rancio, pero con el tiempo y la participación de grandes guionistas, especialmente Marv Wolfman y sus Nuevos Titanes, terminaron convertidos en mucho más, una pieza fundamental para el Universo DC, especialmente en esa mítica formación que incluía a Robin/Nightwing, Wonder Girl, Kid Flash, Changeling, Ciborg, Starfire y Raven.
Con El Imperativo Tecnis, una saga en tres números que cruzaba la JLA con los Titanes, se repitió el escenario que había funcionado con gran éxito en la JLA de Morrison, apartar las "actualizaciones" del equipo y devolver a la primera plana al equipo estrella. Para ello se recurrió a dos grandes del cómic DC, la guionista Devin Grayson y el guionista/dibujante Phil Jiménez, que organizaron un evento gigantesco con docenas y docenas de personajes (Jiménez demostraría ser un digno heredero de George Pérez a la hora de plasmar viñetas con muchísimos personajes). Todo comienza cuando los miembros de todas las encarnaciones de los Titanes comienzan desaparecer, secuestrados por unas extrañas criaturas tecnológicas, mientras la Atalaya de la JLA es asaltada por una inteligencia artificial que se extiende rápidamente, ocupando toda la Luna y creando grandes problemas geológicos y tecnológicos en la Tierra. A partir de esta premisa, Grayson y Jiménez crearon una historia llena de personajes y más personajes... Y la verdad es que no tiene mucho más. Se nota que la trama sirve para hacer "limpieza" de Titanes y para recordar a todos los miembros que han formado parte de todas las encarnaciones del equipo... pero también de la JLA.
Ahora bien, si el argumento es un poco simplón, el arte de Phil Jiménez es espectacular, lo que sube un poquito la nota, al menos una estrellita es para el dibujo.
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JLA: JUSTICIA PARA TODOS
JLA: Justicia para todos by Grant Morrison
My rating: 4 of 5 stars
Justicia para Todos es un cómic un poco especial para mí, porque con él, después de muchos (muchos) años alejado de DC, fue con el que volví a llegar a estos héroes, a Superman, Batman y compañía. Y fue en la edición (horrible) de Norma Editorial, que tenía una manera muy especial por así decirlo de publicar cómics de DC.
Con Justicia para Todos tenemos un nuevo número que recoge varios arcos argumentales de la JLA, y en este caso, por primera vez, no todos ellos son de Grant Morrison, ya que incluye varios tie-in con guión de Mark Millar, Mark Waid y Devin Grayson (bueno, son tres grandes nombres para hacer números de relleno, todo sea dicho). El primero de ellos continúa directamente los acontecimientos de Un Millón, donde Montevideo resultaba destruída tras el ataque de Vandal Savage utilizando los Rocket Red, y nos cuenta el conflicto entre la JLA, de corte internacional, con un equipo de metahumanos desarrollados por el ejército de Estados Unidos y dirigidos por el General Wade Eiling, que se hacen llamar los Ultramarines (y que son una versión retorcida de los Cuatro Fantásticos). Superado el conflicto con los Ultramarines, tenemos un número en el que la Liga tiene que enfrentarse a un Amazo que intenta liberar el Profesor Ivo y que va acumulando todos los poderes de los miembros del equipo.
Y tras este número (escrito por Mark Waid) llega el arco que más peso tiene en el tomo, Crisis por Cinco, en el que la Liga se une a los miembros de la antigua Sociedad de la Justicia para hacer frente a una amenaza que puede destruir la propia realidad, el conflicto entre dos genios de la Quinta Dimensión, Yz y Lkz, siendo el primero el antiguo genio de Johnny Thunder en la Sociedad de la Justicia. La presencia de entes de la quinta dimensión en nuestro mundo (incluyendo a Qwsp, un viejo enemigo de Aquaman), hace que nuestro mundo se vaya desmoronando, mientras además, Lkz manipula el mundo para atrapar al propio Espectro o enviar a un héroe olvidado, Triumph, acompañado de dos de sus compañeros en lo que fue JLA Task Force (Ray y Gipsy, JLA Task Force fue el intento de DC en los 90 por crear una colección de tipo Image... mejor no recordarlo), contra la propia JLA.
El tomo cierra con dos números autoconclusivos, donde vemos la participación de la JLA en uno de los eventos más importantes de la historia de Batman, Tierra de Nadie (donde a raíz de un terremoto y sus consecuencias, Gotham se ve apartada legalmente de los Estados Unidos y en el que se ha basado tanto la tercera película de Nolan sobre Batman como la última temporada de la serie Gotham), y luego vemos como Batman envía a la Liga a luchar contra... Bruce Wayne.
Con Justicia para Todos, Morrison da el último paso hacia el que sería el final de su etapa en la JLA, la llegada de Maggedon, la amenaza de la que se llevaba hablando prácticamente desde el primer número de la colección, y que tendría lugar en Tercera Guerra Mundial... Un tomo que Norma no llegaría a editar nunca y que tendríamos que esperar años para leer (de hecho, curiosamente, Norma se lo saltó y pasó a las siguientes etapas de la JLA... lo dicho, eran muy suyos).
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My rating: 4 of 5 stars
Justicia para Todos es un cómic un poco especial para mí, porque con él, después de muchos (muchos) años alejado de DC, fue con el que volví a llegar a estos héroes, a Superman, Batman y compañía. Y fue en la edición (horrible) de Norma Editorial, que tenía una manera muy especial por así decirlo de publicar cómics de DC.
Con Justicia para Todos tenemos un nuevo número que recoge varios arcos argumentales de la JLA, y en este caso, por primera vez, no todos ellos son de Grant Morrison, ya que incluye varios tie-in con guión de Mark Millar, Mark Waid y Devin Grayson (bueno, son tres grandes nombres para hacer números de relleno, todo sea dicho). El primero de ellos continúa directamente los acontecimientos de Un Millón, donde Montevideo resultaba destruída tras el ataque de Vandal Savage utilizando los Rocket Red, y nos cuenta el conflicto entre la JLA, de corte internacional, con un equipo de metahumanos desarrollados por el ejército de Estados Unidos y dirigidos por el General Wade Eiling, que se hacen llamar los Ultramarines (y que son una versión retorcida de los Cuatro Fantásticos). Superado el conflicto con los Ultramarines, tenemos un número en el que la Liga tiene que enfrentarse a un Amazo que intenta liberar el Profesor Ivo y que va acumulando todos los poderes de los miembros del equipo.
Y tras este número (escrito por Mark Waid) llega el arco que más peso tiene en el tomo, Crisis por Cinco, en el que la Liga se une a los miembros de la antigua Sociedad de la Justicia para hacer frente a una amenaza que puede destruir la propia realidad, el conflicto entre dos genios de la Quinta Dimensión, Yz y Lkz, siendo el primero el antiguo genio de Johnny Thunder en la Sociedad de la Justicia. La presencia de entes de la quinta dimensión en nuestro mundo (incluyendo a Qwsp, un viejo enemigo de Aquaman), hace que nuestro mundo se vaya desmoronando, mientras además, Lkz manipula el mundo para atrapar al propio Espectro o enviar a un héroe olvidado, Triumph, acompañado de dos de sus compañeros en lo que fue JLA Task Force (Ray y Gipsy, JLA Task Force fue el intento de DC en los 90 por crear una colección de tipo Image... mejor no recordarlo), contra la propia JLA.
El tomo cierra con dos números autoconclusivos, donde vemos la participación de la JLA en uno de los eventos más importantes de la historia de Batman, Tierra de Nadie (donde a raíz de un terremoto y sus consecuencias, Gotham se ve apartada legalmente de los Estados Unidos y en el que se ha basado tanto la tercera película de Nolan sobre Batman como la última temporada de la serie Gotham), y luego vemos como Batman envía a la Liga a luchar contra... Bruce Wayne.
Con Justicia para Todos, Morrison da el último paso hacia el que sería el final de su etapa en la JLA, la llegada de Maggedon, la amenaza de la que se llevaba hablando prácticamente desde el primer número de la colección, y que tendría lugar en Tercera Guerra Mundial... Un tomo que Norma no llegaría a editar nunca y que tendríamos que esperar años para leer (de hecho, curiosamente, Norma se lo saltó y pasó a las siguientes etapas de la JLA... lo dicho, eran muy suyos).
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