LA PATRULLA-X: 176 A 188

 

Marvel Masterworks: The Uncanny X-Men, Vol. 10 by Chris Claremont
My rating: 4 of 5 stars

Solucionadas en el tomo anterior las cuestiones relacionadas con Madelyne Pryor, en este tomo vamos a ver como la Patrulla-X se dirige hacia los dos grandes eventos del momento, Secret Wars y la guerra contra los Fantasmas Espaciales que habían saltado de la colección Rom a todas las del universo Marvel. Y lo harían con dibujos de John Romita Jr, que poco a poco iría dejando de parecerse a Paul Smith para ir cogiendo su propio rollo, y su propio estilo.

Estas primeras historias de Romita se van a centrar en Tormenta, Kitty y la incorporación de Pícara al grupo, que poco a poco tendrá que irse ganando la confianza de sus compañeros. El tomo abrirá con la luna de miel de Cíclope y Madelyne, que se las tendrán que ver con tiburones y un pulpo gigante (no pueden tener un día tranquilo también estos pobres), mientras el equipo, liderado por Tormenta y formado por Rondador, Coloso, Lobezno, Pícara y Kitty, se van a ver emboscados por la Hermandad de Mutantes Diabólicos de Mística que trata de recuperar a Pícara, en un conflicto que dejará a un muy malherido Coloso, y a Kitty en manos de los Morlocks, que intentarán que cumpla su promesa de casarse con Caliban, aunque será finalmente este el que la libere y la permita volver a la superficie... y así solucionar sus problemas con Tormenta (Kitty no había llevado nada bien el cambio de look ni el cambio de actitud de esta), y lo van a hacer justo a tiempo, ya que mientras Kitty acompaña a Doug Ramsey a la Academia de Massachussetts, como se vio en Nuevos Mutantes, la Patrulla-X va a ser uno más de los equipos de superhéroes en ser llevados (Profesor Xavier incluido) al Mundo de Batalla del Todopoderoso durante las Secret Wars.

A su regreso, la Patrulla-X aterrizará en Japón, donde tendrán que hacer frente a la dragona con la que Lockheed se había emparejado en el Mundo de Batalla, y que en nuestro mundo tiene un tamaño muy distinto y va a causar grandes daños en Tokio. Y mientras el grupo combate en Japón, Pícara va a volar hacia Nueva York para comprobar el estado de Kitty, pero se va a encontrar con un mensaje en el contestador de Michael Rossi, un viejo aliado de Carol Danvers... y la parte de su mente que es Carol Danvers la va a llevar a infiltrarse en el Helitransporte para rescatar a Rossi (que ni la conoce), consiguiendo así que el departamento de Seguridad convierta a Pícara en su objetivo número uno, y que va a irse gestando con la aparición de nuevos personajes, como Valerie Cooper, enlace del gobierno para asuntos mutantes, o Forja, un mutante que trabaja para el gobierno de Estados Unidos utilizando sus poderes para desarrollar tecnología militar, entre ellos, un arma que puede privar a cualquiera de sus poderes... y que va a despertar también el interés de los Fantasmas del Espacio, ya que consideran que con el tiempo, el arma de Forja podría ser una amenaza para sus intereses.

Tras un breve encontronazo entre Coloso y el Juggernaut que parece servir para que Coloso salga del estado de estupor en el que ha quedado sumido tras la muerte de Zsaji en Secret Wars y su ruptura con Kitty al volver a la Tierra, y la aparición de Rachel (Summers) y Selene, vamos a llegar al punto cúspide de este tomo, con las fuerzas gubernamentales atacando a Pícara y Tormenta, y esta última, recibiendo por error un disparo destinado a Pícara con el arma experimental de Forja y que va a dejar a Tormenta sin poderes de forma indefinida...

Y que a nivel de cómic, nos va a dejar con Muerte Viva, una historia escrita por Chris Claremont y dibujada por Barry Windsor Smith, en la que Tormenta tendrá que rehacerse después de haber perdido sus poderes, y lo hará junto a Forja, estableciéndose el inicio de la relación entre estos dos personajes, que con la ayuda de Naze, el maestro chamán de Forja, tendrán que hacer frente a un ataque por parte de las Brujas, que buscan la muerte de Forja y de todos aquellos que se encuentran en el Nido del Águila, el refugio de Forja en Dallas.

En fin, un tomo con mucho de todo, y que quizá al verse interrumpido por Secret Wars y el tema de los Fantasmas (aunque como es habitual Claremont sabe sacar provecho incluso de sus obligaciones), donde quizá no veamos al mejor John Romita Jr del mundo, pero que va cumpliendo, sin duda.

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